Instituciones del Chaco y Tarija aguardan por información oficial
La crisis del Pilcomayo halla a las instituciones desinformadas
La Gobernación confirmó que la carne de pescado está contaminada con metales pesados, lo que supone un riesgo para la salud pública. La OTN-PB aún no se pronuncia sobre esta problemática
Sin duda que el informe presentado por la Gobernación de Tarija, en el que advierte contaminación con metales pesados en la carne de pescado del río Pilcomayo, ha sorprendido a las instituciones locales y nacionales, que aun aguardan por un informe oficial para recién poder pronunciarse y definir qué acciones asumir.
El informe, basado en un análisis realizado por el Instituto Nacional de Salud Ocupacional (INSO), advierte la presencia de mercurio hasta en 0,81 mg, cuando el límite permisible es de 0.5 mg, de acuerdo al Codex Alimentario que utiliza la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Mientras, que en el caso de la presencia de plomo, la OMS establece que el límite permitido es de 0,2 mg. Sin embargo, en las muestras analizadas se detectaron valores hasta de 0,3mg.

Preocupa salud de los indígenas
tras evidenciarse contaminación
Asimismo, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) recomendó evitar el consumo de este alimento extraído del Pilcomayo, lo que puede traer consecuencias en la salud de la población de riesgo, como mujeres en etapa fértil, embarazadas, madres lactantes y niños pequeños.
El silencio
El País buscó conocer qué acciones asumirá la Oficina Técnica Nacional de los Ríos Pilcomayo y Bermejo (OTN-PB). Sin embargo, su representante, Rommel Uño, y personal técnico de esta institución han evitado pronunciarse.
Por otro lado, se intentó contactar al responsable de la Red de Salud de Villa Montes para ahondar en detalles sobre la salud de las familias que viven en los márgenes del río Pilcomayo y si en este último tiempo se realizó alguna atención por posibles signos de intoxicación por el consumo de pescado de este afluente, pero tampoco se pudo establecer comunicación.
Por segundo día consecutivo, este medio buscó conversar con el capitán grande del pueblo Weenhayek, Francisco Pérez, para conocer su percepción sobre este estudio realizado por la Gobernación y la implicancia que esto supone para las miles de familias indígenas que sobreviven y alimentan de la pesca en el Pilcomayo, pero el dirigente ha evitado pronunciarse.
Sin información oficial
El director de Salud del Gobierno Regional de Villa Montes, Agustín Quispe, señaló que han podido tomar conocimiento por los medios de comunicación sobre el estudio que confirma contaminación con metales pesados en pescados sacados del río Pilcomayo. Sin embargo, enfatizó que hasta la jornada de este viernes, no han recibido ninguna información oficial por parte de la Gobernación o el Sedes.
Quispe mencionó que el trabajo encarado por la Gobernación no ha sido coordinado con el Gobierno Regional de Villa Montes, por lo que lo anunciado por el Sedes ha sido “una sorpresa”.
“En las últimas horas hemos sostenido una reunión con los personeros de la Red de Salud de Villa Montes, ellos reconocieron que (el Sedes) ha venido a querer coordinar con ellos y se derivó al área de Salud Ambiental”, mencionó.
Consultado si su persona maneja alguna información por enfermedades relacionadas a la presencia de metales pesados en la carne de pescado del Pilcomayo, Quispe argumentó que epidemiológicamente no se tienen notificaciones por situaciones parecidas.
Tomando en cuenta que a la fecha el pescado villamontino sigue comercializándose en los principales centros de abasto de Tarija, la responsable de la Intendencia Municipal, Shirley Miranda, dijo haber tomado conocimiento de esta información por las redes sociales, pero que hasta el viernes no recibieron un informe oficial.
Miranda refirió que en este tipo de situaciones debe establecerse un nivel de coordinación departamental, a partir de ahí fijar el lineamiento para precautelar la salud de la población.