Ávila niega el mal manejo de áridos y señala a UNIR
El alcalde de San Lorenzo, Miguel Ávila, desmintió las acusaciones del concejal, Roberto Vargas, quien denunció que la Planta Municipal de Áridos funciona como una empresa, además que no tiene un plan de manejo de cuencas ni emite facturas. Ávila explicó que existen otros intereses en las...



El alcalde de San Lorenzo, Miguel Ávila, desmintió las acusaciones del concejal, Roberto Vargas, quien denunció que la Planta Municipal de Áridos funciona como una empresa, además que no tiene un plan de manejo de cuencas ni emite facturas. Ávila explicó que existen otros intereses en las difamaciones realizadas y detrás del concejal se encuentra “la cúpula de UNIR”.
Ante los criterios emitidos por Vargas, Ávila explicó que el Concejo Municipal de San Lorenzo aprobó una ley que autoriza el funcionamiento de la Planta de Áridos y posee un plazo de seis meses para regularizar algunos de los permisos ambientales.
“Hemos decidido como municipio aprovechar los pocos recursos extractivos que tenemos que estaban siendo explotados por empresas o particulares que no dejaban ningún beneficio al municipio. En el afán de encontrar un ingreso propio, el año pasado hicimos un crédito con el FNDR (Fondo Nacional de Desarrollo Regional) para poder adquirir una procesadora de áridos”, manifestó Ávila.
A su vez, aclaró que una empresa tiene otras características, como tener un grado de autonomía, por lo que la Planta de Áridos no necesariamente tiene que proceder de la manera que indicó el concejal. Según la información del Alcalde, en los seis meses de funcionamiento de la Planta se pudo obtener una ganancia de dos millones de bolivianos que significan un presupuesto considerable para San Lorenzo, que tiene un ingreso anual de 16 millones de bolivianos. La proyección de crecimiento se incrementará en los próximos meses y se espera llegar a fin de año con un aporte del 30 por ciento de ingresos propios.
Ávila señaló que las acusaciones forman parte de una campaña difamatoria realizada por “la alta cúpula política de Unidos Para Renovar (UNIR) que tiene intereses empresariales referidos a la explotación de áridos en San Lorenzo”.
“Yo creo que él (Roberto Vargas) está siendo utilizado para hacer este tipo de insultos, porque no podemos calificarlos de otra forma. Le han pedido a mi persona de que permitamos la operación de una planta privada de áridos. Pero conforme a la Ley de Autonomía Municipal que crea el marco jurídico para operar en lo referente a la explotación de áridos se han visto perjudicados”, indicó Ávila.
Pero Vargas argumentó que la Planta de Áridos no cuenta con un manejo de cuencas ni un permiso ambiental para su funcionamiento ni tampoco emite factura para las compras. “Lamentablemente el Alcalde falta a la verdad. En otras cosas dice que el municipio tiene el monopolio en la explotación de áridos. No es así”, explicó.
La Planta de Áridos se emplazó el 2017
La Planta Municipal de Áridos de San Lorenzo, emplazada en la comunidad de Oropeza desde la primera semana de octubre de la gestión 2017, funcionó a media carga en un inicio por encontrarse en etapa de adecuación, según aseguran fuentes municipales. La capacidad de producción es de 4.500 toneladas (tn) mensuales de áridos triturados.
El alcalde de este municipio, Miguel Ávila, señaló que San Lorenzo es el primer municipio que explota sus propios áridos, lo que significa una entrada significativa de recursos. La adquisición de la maquinaria se hizo bajo un crédito del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) de nueve millones de bolivianos.
“En el caso de nuestro municipio no tenemos gas, petróleo, regalías, por lo que hemos apostado a hacer una actividad productiva que es una suerte de nacionalización de nuestros áridos, es un recurso que estaba siendo explotado por particulares de forma abusiva, sin respetar normas ambientales”, sostuvo la autoridad en una anterior entrevista.
Además la proyección es incrementar la ganancia obtenida por la explotación de áridos y generar ingresos que beneficien a la población y accedan a fuentes de empleo.
Escogieron un lugar provisional para la primera prueba (Oropeza), porque es una de las zonas más ricas en áridos que son procesados en tres tipos de cortes para utilizarlos en diferentes construcciones. Se utilizan tres máquinas modernas: triturador a mandíbulas, triturador cónico y el clasificador de material.
Ante la petición de fiscalización, Ávila sostuvo que el municipio se encuentra siendo fiscalizado constantemente, pero no habría ningún obstáculo para rendir un informe.
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Ante los criterios emitidos por Vargas, Ávila explicó que el Concejo Municipal de San Lorenzo aprobó una ley que autoriza el funcionamiento de la Planta de Áridos y posee un plazo de seis meses para regularizar algunos de los permisos ambientales.
“Hemos decidido como municipio aprovechar los pocos recursos extractivos que tenemos que estaban siendo explotados por empresas o particulares que no dejaban ningún beneficio al municipio. En el afán de encontrar un ingreso propio, el año pasado hicimos un crédito con el FNDR (Fondo Nacional de Desarrollo Regional) para poder adquirir una procesadora de áridos”, manifestó Ávila.
A su vez, aclaró que una empresa tiene otras características, como tener un grado de autonomía, por lo que la Planta de Áridos no necesariamente tiene que proceder de la manera que indicó el concejal. Según la información del Alcalde, en los seis meses de funcionamiento de la Planta se pudo obtener una ganancia de dos millones de bolivianos que significan un presupuesto considerable para San Lorenzo, que tiene un ingreso anual de 16 millones de bolivianos. La proyección de crecimiento se incrementará en los próximos meses y se espera llegar a fin de año con un aporte del 30 por ciento de ingresos propios.
Ávila señaló que las acusaciones forman parte de una campaña difamatoria realizada por “la alta cúpula política de Unidos Para Renovar (UNIR) que tiene intereses empresariales referidos a la explotación de áridos en San Lorenzo”.
“Yo creo que él (Roberto Vargas) está siendo utilizado para hacer este tipo de insultos, porque no podemos calificarlos de otra forma. Le han pedido a mi persona de que permitamos la operación de una planta privada de áridos. Pero conforme a la Ley de Autonomía Municipal que crea el marco jurídico para operar en lo referente a la explotación de áridos se han visto perjudicados”, indicó Ávila.
Pero Vargas argumentó que la Planta de Áridos no cuenta con un manejo de cuencas ni un permiso ambiental para su funcionamiento ni tampoco emite factura para las compras. “Lamentablemente el Alcalde falta a la verdad. En otras cosas dice que el municipio tiene el monopolio en la explotación de áridos. No es así”, explicó.
La Planta de Áridos se emplazó el 2017
La Planta Municipal de Áridos de San Lorenzo, emplazada en la comunidad de Oropeza desde la primera semana de octubre de la gestión 2017, funcionó a media carga en un inicio por encontrarse en etapa de adecuación, según aseguran fuentes municipales. La capacidad de producción es de 4.500 toneladas (tn) mensuales de áridos triturados.
El alcalde de este municipio, Miguel Ávila, señaló que San Lorenzo es el primer municipio que explota sus propios áridos, lo que significa una entrada significativa de recursos. La adquisición de la maquinaria se hizo bajo un crédito del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) de nueve millones de bolivianos.
“En el caso de nuestro municipio no tenemos gas, petróleo, regalías, por lo que hemos apostado a hacer una actividad productiva que es una suerte de nacionalización de nuestros áridos, es un recurso que estaba siendo explotado por particulares de forma abusiva, sin respetar normas ambientales”, sostuvo la autoridad en una anterior entrevista.
Además la proyección es incrementar la ganancia obtenida por la explotación de áridos y generar ingresos que beneficien a la población y accedan a fuentes de empleo.
Escogieron un lugar provisional para la primera prueba (Oropeza), porque es una de las zonas más ricas en áridos que son procesados en tres tipos de cortes para utilizarlos en diferentes construcciones. Se utilizan tres máquinas modernas: triturador a mandíbulas, triturador cónico y el clasificador de material.
Ante la petición de fiscalización, Ávila sostuvo que el municipio se encuentra siendo fiscalizado constantemente, pero no habría ningún obstáculo para rendir un informe.
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