El arte sombrío de Esteban Hoyos Humacata
El joven estudiante ganó un espacio en la Casa de la Cultura donde expuso un poco de su producción gráfica y su visión sobre su generación.



Esteban Hoyos Humacata, estudiante de la Unidad Educativa San Luis, ha logrado convertir uno de los espacios de la Casa de la Cultura en una galería del horror. Y no es que haya sangre en las paredes, o cadáveres llenos de gusanos en cada esquina. Simplemente ha montado algunos caballetes con sus cuadros, y otros los ha colgado. Pero estos nos ofrecen representaciones del espanto psicológico que permea el imaginario de las generaciones jóvenes de hoy, según el autor.
Desde muy pequeño, a Esteban le gustó la pintura. “Nunca fui a clases”, dice el novel artista, para quien toda su técnica y estilo es consecuencia de un gusto natural. Por el contrario, sus padres si lo inscribieron a clases de piano, aunque todavía no vemos el fruto de esos esfuerzos. Quizá en algún momento nos ofrezca piezas tanto o más sombrías como los cuadros que ha expuesto.
“Me quedaron recuerdos de esos tiempos y empecé a pintar esas cosas”
Cualquier espectador distraído diría que la temática general de sus pinturas gira alrededor del mentado Halloween. Y si, habrá algo de cierto en esa apreciación. No hay duda que la industria cinematográfica ha calado hondo en la imaginación del ser humano, y que en muchos casos sirve para colonizar y fijar la capacidad de la mente y el espíritu en una sola tendencia. Pero Esteban va un paso más allá cuando asegura que lo que quiere mostrar con estos cuadros es “lo que sienten los adolescentes que padecen depresión y baja autoestima. Lo que quiero mostrar es qué les pasa, qué piensan y qué pueden hacer”.
Así, en opinión del joven artista, la generación a la que pertenece es “algo depresiva”. Él mismo tuvo un tiempo en el que pasó por ese estado, y como dice, “me quedaron recuerdos de esos tiempos y empecé a pintar esas cosas”. Su obra muestra una paleta en la que predominan el blanco y negro, y una galería de personajes tétricos. Esteban asegura que “cada uno tiene su mensaje oculto”, así como su propio precio. Enhorabuena, Esteban.
Fotos: Grover Peralta.