Atrapan al “artista caníbal”, pintaba cuadros con sangre
Un escabroso crimen se ha dado a conocer en las últimas horas en Venezuela, llegando a la detención de Luis Alfredo González, quien en la prensa se dio a conocer como el “artista antropófago”. Se trata de un hombre que fue detenido tras reconocer que mató a una persona, comió parte...



Un escabroso crimen se ha dado a conocer en las últimas horas en Venezuela, llegando a la detención de Luis Alfredo González, quien en la prensa se dio a conocer como el “artista antropófago”.
Se trata de un hombre que fue detenido tras reconocer que mató a una persona, comió parte de sus restos y, posteriormente, pintó un cuadro con su sangre y cenizas en la localidad de San José de Barlovento.
Según se afirma desde la Sub-Delegación de dicha localidad venezolana, descubrieron el crimen siguiendo la pista de un hombre cuyo paradero era desconocido, arribando así a su finca.
Allí encontrar restos óseos del desaparecido, dando luego con González, quien, al ser interrogado, confesó el homicidio y dio detalles del mismo, señalando que el propio fallecido lo había contratado para que prestara unos particulares “servicios fúnebres”.
El hombre señaló que su víctima le había pedido matarlo, comer parte de su cuerpo y luego pintar un lienzo con su sangre y cenizas.
Debido a que en el lugar de los hechos se han encontrado documentos pertenecientes a personas que nada tenían que ver con la finca, por lo que se investiga si es que ha habido más víctimas.
Además, también se hallaron en el lugar varios cuadros, los que serán sometidos a peritajes para determinar cómo fueron confeccionados.
Las pinturas localizadas serán sometidas a diversas pruebas forenses, además que se presume que una de sus víctimas le autorizó al artista antropófago el asesinato, el cual incluía la ingesta de sus restos y la realización de pinturas con su sangre y cenizas.
Antecedentes
El asesinato más reciente de Dorángel Vargas Gómez, alias el “Comegente”, es el de Anthony Correa y Juan Carlos Herrera, sus compañeros del Cuartel de Prisiones de Politachira. Familiares de las víctimas aseguraron que el caníbal cocinó la carne, el “Grillo”, líder del pabellón, la sirvió en platos al resto de la población penal con arroz no sin antes obligarlos a alimentarse de una de las cabezas.
En 1999 la desaparición de 12 hombres detonó las alarmas de la policía del Táchira. En una precaria vivienda habitaba un personaje siniestro, interceptaba a hombres que caminaban por las orillas del río Torbes, los mataba con una lanza y los descuartizaba. Se comió el corazón de Cruz Baltazar Moreno, una sus primeras víctimas, a las otras les sacaba los ojos para echárselos a la sopa. Guardaba las partes humanas que comería, enterraba aquellas que lo indigestaban, como manos, pies y cabezas.
Se trata de un hombre que fue detenido tras reconocer que mató a una persona, comió parte de sus restos y, posteriormente, pintó un cuadro con su sangre y cenizas en la localidad de San José de Barlovento.
Según se afirma desde la Sub-Delegación de dicha localidad venezolana, descubrieron el crimen siguiendo la pista de un hombre cuyo paradero era desconocido, arribando así a su finca.
Allí encontrar restos óseos del desaparecido, dando luego con González, quien, al ser interrogado, confesó el homicidio y dio detalles del mismo, señalando que el propio fallecido lo había contratado para que prestara unos particulares “servicios fúnebres”.
El hombre señaló que su víctima le había pedido matarlo, comer parte de su cuerpo y luego pintar un lienzo con su sangre y cenizas.
Debido a que en el lugar de los hechos se han encontrado documentos pertenecientes a personas que nada tenían que ver con la finca, por lo que se investiga si es que ha habido más víctimas.
Además, también se hallaron en el lugar varios cuadros, los que serán sometidos a peritajes para determinar cómo fueron confeccionados.
Las pinturas localizadas serán sometidas a diversas pruebas forenses, además que se presume que una de sus víctimas le autorizó al artista antropófago el asesinato, el cual incluía la ingesta de sus restos y la realización de pinturas con su sangre y cenizas.
Antecedentes
El asesinato más reciente de Dorángel Vargas Gómez, alias el “Comegente”, es el de Anthony Correa y Juan Carlos Herrera, sus compañeros del Cuartel de Prisiones de Politachira. Familiares de las víctimas aseguraron que el caníbal cocinó la carne, el “Grillo”, líder del pabellón, la sirvió en platos al resto de la población penal con arroz no sin antes obligarlos a alimentarse de una de las cabezas.
En 1999 la desaparición de 12 hombres detonó las alarmas de la policía del Táchira. En una precaria vivienda habitaba un personaje siniestro, interceptaba a hombres que caminaban por las orillas del río Torbes, los mataba con una lanza y los descuartizaba. Se comió el corazón de Cruz Baltazar Moreno, una sus primeras víctimas, a las otras les sacaba los ojos para echárselos a la sopa. Guardaba las partes humanas que comería, enterraba aquellas que lo indigestaban, como manos, pies y cabezas.