Trump afirma que "no quiere" retrasar las elecciones, horas después de haberse preguntado si se deberían postergar



El presidente de EE.UU., Donald Trump, arremetió este jueves contra la idea de que las elecciones presidenciales de noviembre se realicen mediante el voto por correo.
"Con la votación universal por correo (no la votación ausente, que es buena), [las presidenciales de] 2020 serán las elecciones más inexactas y fraudulentas de la historia. Será una gran vergüenza para EE.UU.", escribió el mandatario en su cuenta de Twitter.
"¿Retrasar la elección hasta que las personas puedan votar de manera adecuada y segura?", se pregunta a continuación Trump.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se refirió el jueves a la posibilidad de aplazar la elección presidencial del 3 de noviembre pese a que la fecha está fijada en la Constitución, alegando sospechas infundadas de que el aumento del voto por correo debido a la pandemia provocará fraude electoral.
Se trata de la primera vez que el presidente plantea esta posibilidad, algo que los demócratas temían desde que empezó la crisis del coronavirus.
La fecha de las elecciones presidenciales (el martes después del primer lunes de noviembre cada cuarto año) está fijada por la legislación federal desde 1845, y el presidente carece de competencia para cambiarla unilateralmente. Una reforma de la ley, con la Cámara baja del Congreso en manos de los demócratas, sería poco menos que imposible, y además podría ser impugnada ante la justicia. El margen de desplazamiento, en cualquier caso, tampoco sería muy amplio, ya que la Constitución establece que el nuevo Congreso (también hay elecciones legislativas en la misma fecha) debe constituirse el 3 de enero y el mandato del presidente debe empezar el 20 de ese mismo mes.
Pero el solo hecho de plantear un aplazamiento constituye una acción insólita para un presidente, en un país que presume de modélico en el traspaso pacífico del poder, y abre la posibilidad de que el propio Trump o sus seguidores más fieles cuestionen la legitimidad de unas elecciones para las que, desde hace unas semanas, los sondeos dan una clara ventaja a su rival demócrata, Joe Biden.
“Con el sistema universal de voto por correo (no el voto para los ausentes, que va bien), las de 2020 serán las elecciones más fraudulentas e imprecisas de la historia. Sería una gran vergüenza para Estados Unidos. Aplazamos las elecciones hasta que las personas puedan votar de forma adecuada y segura???”, ha tuiteado el presidente estadounidense.