Libros de la Biblia Malaquías
Autor: Malaquías, “mi mensajero” Fecha: Alrededor del 430 a.C. Lugar: Jerusalén Capítulo 1.- Cien años después que han regresado del exilio en Babilonia, los judíos cumplen aún con ofrecer sacrificios, pero no con las primicias, sino que los realizan con lo que les sobra: animales...



Autor: Malaquías, “mi mensajero”
Fecha: Alrededor del 430 a.C.
Lugar: Jerusalén
Capítulo 1.- Cien años después que han regresado del exilio en Babilonia, los judíos cumplen aún con ofrecer sacrificios, pero no con las primicias, sino que los realizan con lo que les sobra: animales con defectos, guardándose lo mejor para ellos. Por su desobediencia Dios les retira sus bendiciones.
“Maldito el que engaña, el que teniendo machos en su rebaño, promete, y sacrifica a Jehová lo dañado. Porque yo soy Gran Rey, dice Jehová de los ejércitos, y mi nombre es temible entre las naciones” (v.14).
Capítulo 2.- Malaquías habla a los sacerdotes: “Si no oyereis, y si no decidís de corazón dar gloria a mi nombre, ha dicho Jehová de los ejércitos, enviaré maldición sobre vosotros, y maldeciré vuestras bendiciones; y aun las he maldecido, porque no os habéis decidido de corazón” (v.2).
El profeta insta al pueblo a tratarse con respeto, a que no sean desleales con sus mujeres. “Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que cubre de iniquidad su vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales” (v.16).
Capítulo 3.- Comienza con la predicción sobre el precursor del Mesías, Juan el Bautista: “He aquí, yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí; y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis, y el ángel del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová de los ejércitos” (v.1). Es el Mesías en su segundo advenimiento en juicio.
En los versículos 7 al 12, Dios les habla del pecado de robarle los diezmos: “¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas” (v.8).
Capítulo 4.- El profeta dice que Dios bendecirá a los que le temen: “Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada” (v.2).
Y que llegará el día que Dios juzgará a los malos: “Hollaréis a los malos, los cuales serán ceniza bajo las plantas de vuestros pies, en el día en que yo actúe, ha dicho Jehová de los ejércitos” (v.3).
En este último capítulo del libro de Malaquías, y del Antiguo Testamento, se presenta la promesa del gran día del Señor. Para unos será día de destrucción por su soberbia y maldad, y por desechar el arrepentimiento. Pero los que le temen y le aman serán restaurados.
Este libro nos enseña que Dios no bendice una vida desobediente; que debemos dar a Dios lo que es de Él, cumpliendo con nuestros diezmos y ofrendas.
Fecha: Alrededor del 430 a.C.
Lugar: Jerusalén
Capítulo 1.- Cien años después que han regresado del exilio en Babilonia, los judíos cumplen aún con ofrecer sacrificios, pero no con las primicias, sino que los realizan con lo que les sobra: animales con defectos, guardándose lo mejor para ellos. Por su desobediencia Dios les retira sus bendiciones.
“Maldito el que engaña, el que teniendo machos en su rebaño, promete, y sacrifica a Jehová lo dañado. Porque yo soy Gran Rey, dice Jehová de los ejércitos, y mi nombre es temible entre las naciones” (v.14).
Capítulo 2.- Malaquías habla a los sacerdotes: “Si no oyereis, y si no decidís de corazón dar gloria a mi nombre, ha dicho Jehová de los ejércitos, enviaré maldición sobre vosotros, y maldeciré vuestras bendiciones; y aun las he maldecido, porque no os habéis decidido de corazón” (v.2).
El profeta insta al pueblo a tratarse con respeto, a que no sean desleales con sus mujeres. “Porque Jehová Dios de Israel ha dicho que él aborrece el repudio, y al que cubre de iniquidad su vestido, dijo Jehová de los ejércitos. Guardaos, pues, en vuestro espíritu, y no seáis desleales” (v.16).
Capítulo 3.- Comienza con la predicción sobre el precursor del Mesías, Juan el Bautista: “He aquí, yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí; y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis, y el ángel del pacto, a quien deseáis vosotros. He aquí viene, ha dicho Jehová de los ejércitos” (v.1). Es el Mesías en su segundo advenimiento en juicio.
En los versículos 7 al 12, Dios les habla del pecado de robarle los diezmos: “¿Robará el hombre a Dios? Pues vosotros me habéis robado. Y dijisteis: ¿En qué te hemos robado? En vuestros diezmos y ofrendas” (v.8).
Capítulo 4.- El profeta dice que Dios bendecirá a los que le temen: “Mas a vosotros los que teméis mi nombre, nacerá el Sol de justicia, y en sus alas traerá salvación; y saldréis, y saltaréis como becerros de la manada” (v.2).
Y que llegará el día que Dios juzgará a los malos: “Hollaréis a los malos, los cuales serán ceniza bajo las plantas de vuestros pies, en el día en que yo actúe, ha dicho Jehová de los ejércitos” (v.3).
En este último capítulo del libro de Malaquías, y del Antiguo Testamento, se presenta la promesa del gran día del Señor. Para unos será día de destrucción por su soberbia y maldad, y por desechar el arrepentimiento. Pero los que le temen y le aman serán restaurados.
Este libro nos enseña que Dios no bendice una vida desobediente; que debemos dar a Dios lo que es de Él, cumpliendo con nuestros diezmos y ofrendas.