Rumbo al 3M: Cosas políticas que pueden esconderse en Comadres
Comadres como epicentro político. La afirmación no es mía. Ya hace unos años que el interés por este festejo ha crecido en el país, pero, sobre todo, entre la clase política. Ayer fue Luis Arce Catacora y Eva Copa, hoy iba a ser Jeanine Áñez, pero la epidemia de dengue en la región...



Comadres como epicentro político. La afirmación no es mía. Ya hace unos años que el interés por este festejo ha crecido en el país, pero, sobre todo, entre la clase política. Ayer fue Luis Arce Catacora y Eva Copa, hoy iba a ser Jeanine Áñez, pero la epidemia de dengue en la región oriental – su región, allí donde se disputa el voto duro con Luis Fernando Camacho – lo desaconsejó. Nadie quería ver ese meme en estos tiempos de comunicación política a golpe de clic y sonrisa.
El “contratiempo” deja tocado a los dos grandes frentes: el muy masculino Todos de Adrián Oliva y el no menos, aunque más disimulado, UNIR de Óscar Montes, que preveían volcarse con la presidenta Jeanine Áñez, que solo tenía que discernir sobre su horario laboral, y ahora tendrán que improvisar otros actos.
No se prevé una “solidaridad” con la causa del dengue muy efusiva en Tarija, ya muy preparada en el festejo carnavalero “por excelencia” y en el que toda autoridad, por pequeña sea, participará. La cuestión es que la multiplicación de actores tarijeños en la confrontación electoral y el repentino interés por lo feminista entre los actores políticos han convertido esta fiesta en otro momento para hacer campaña, o lo que toque. Probablemente se escenifique el “traspaso de mando” entre el alcalde Rodrigo Paz y Patricia Paputsakis; las mujeres del MAS, con Ana Sorich en segundo plano, movilizarán sus bases; habrá funcionarios y funcionarias repartiendo canastas y mucho más.
Comadres se volvió político, pena que no sea para incorporar esos debates tan ricos sobre la liberación femenina y el derecho al placer, que por otro lado nunca ha sido debate en este rincón del país, porque es obvio. Los que criticaban antes hechos los exquisitos/as lo defienden ahora. Aquí igual se festeja.
La tensión en el TSE
No es tanto que haya división en las filas del Movimiento Al Socialismo (MAS) como que algunos medios se han empezado a especializar en cazar voceros incautos de ese partido que antes no hablaban y sacar sus declaraciones de contexto. O en tomar la parte por el todo. ¿Qué ascendencia puede tener Adriana Salvatierra para afirmar o negar que las bases se movilizarán en el caso de que Morales sea inhabilitado como hizo ayer?
Antes había corrido como la pólvora una afirmación en ese sentido citando fuentes del MAS, lo que obligó al presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE) Salvador Romero a organizar una conferencia de prensa para negar este extremo y seguir dando cuerda a esa confusión entre habilitaciones técnicas e impugnaciones, y que entre las amenazas subidas de tono de unos y los cálculos de otros están a punto de arrojar por la borda la poca credibilidad que el órgano arrasado en octubre haya podido ganar en este tiempo, y mantenido luego de que la Presidenta Jeanine Áñez anunciara su candidatura. La resolución se espera, precisamente, para estos días de Carnaval… y de esas cosas ya se sabe.
El baile de la unidad
El miércoles se destinó también a matizar a Luis Fernando Camacho y a dejar claro, por si había dudas, que no habrá frente de unidad. Cada cual entiende lo que quiere sobre lo que es una “candidatura en blanco”, pero lo cierto es que Creemos sigue vigente y no hay una intención clara de abandonar la carrera. Al menos a estas alturas. A menos que el MAS empiece a pasar muy claramente en las encuestas que se publican – no las de los partidos - por encima del 40 por ciento. Y, aun así, ninguno querrá reconocerlo.
Con Tarija epicentro político por comadres, se prevén algunos contactos entre mediadores acreditados que operan desde aquí. Pero igualmente se prevé el fracaso. La batalla está siendo en estos momentos psicológica entre los tres o cuatro candidatos del mismo perfil. El que se enoje, pierde.
Las cosas que no aprendió el MAS Tarija
Ayer llegó el candidato a la Presidencia Luis Arce Catacora a Tarija, pero apenas lo habían difundido en sus redes sociales recién creadas. Se movilizaron funcionarios supervivientes de todo lado, sobre todo de los candidatos que siguen siendo ejecutivos. No es lo que era, pero esta vez pareció que las “facciones” hacían un esfuerzo más sincero por esconder sus diferencias. Walter Ferrufino es el jefe de campaña, pero por el momento no se prevén sorpresas.
El “contratiempo” deja tocado a los dos grandes frentes: el muy masculino Todos de Adrián Oliva y el no menos, aunque más disimulado, UNIR de Óscar Montes, que preveían volcarse con la presidenta Jeanine Áñez, que solo tenía que discernir sobre su horario laboral, y ahora tendrán que improvisar otros actos.
No se prevé una “solidaridad” con la causa del dengue muy efusiva en Tarija, ya muy preparada en el festejo carnavalero “por excelencia” y en el que toda autoridad, por pequeña sea, participará. La cuestión es que la multiplicación de actores tarijeños en la confrontación electoral y el repentino interés por lo feminista entre los actores políticos han convertido esta fiesta en otro momento para hacer campaña, o lo que toque. Probablemente se escenifique el “traspaso de mando” entre el alcalde Rodrigo Paz y Patricia Paputsakis; las mujeres del MAS, con Ana Sorich en segundo plano, movilizarán sus bases; habrá funcionarios y funcionarias repartiendo canastas y mucho más.
Comadres se volvió político, pena que no sea para incorporar esos debates tan ricos sobre la liberación femenina y el derecho al placer, que por otro lado nunca ha sido debate en este rincón del país, porque es obvio. Los que criticaban antes hechos los exquisitos/as lo defienden ahora. Aquí igual se festeja.
La tensión en el TSE
No es tanto que haya división en las filas del Movimiento Al Socialismo (MAS) como que algunos medios se han empezado a especializar en cazar voceros incautos de ese partido que antes no hablaban y sacar sus declaraciones de contexto. O en tomar la parte por el todo. ¿Qué ascendencia puede tener Adriana Salvatierra para afirmar o negar que las bases se movilizarán en el caso de que Morales sea inhabilitado como hizo ayer?
Antes había corrido como la pólvora una afirmación en ese sentido citando fuentes del MAS, lo que obligó al presidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE) Salvador Romero a organizar una conferencia de prensa para negar este extremo y seguir dando cuerda a esa confusión entre habilitaciones técnicas e impugnaciones, y que entre las amenazas subidas de tono de unos y los cálculos de otros están a punto de arrojar por la borda la poca credibilidad que el órgano arrasado en octubre haya podido ganar en este tiempo, y mantenido luego de que la Presidenta Jeanine Áñez anunciara su candidatura. La resolución se espera, precisamente, para estos días de Carnaval… y de esas cosas ya se sabe.
El baile de la unidad
El miércoles se destinó también a matizar a Luis Fernando Camacho y a dejar claro, por si había dudas, que no habrá frente de unidad. Cada cual entiende lo que quiere sobre lo que es una “candidatura en blanco”, pero lo cierto es que Creemos sigue vigente y no hay una intención clara de abandonar la carrera. Al menos a estas alturas. A menos que el MAS empiece a pasar muy claramente en las encuestas que se publican – no las de los partidos - por encima del 40 por ciento. Y, aun así, ninguno querrá reconocerlo.
Con Tarija epicentro político por comadres, se prevén algunos contactos entre mediadores acreditados que operan desde aquí. Pero igualmente se prevé el fracaso. La batalla está siendo en estos momentos psicológica entre los tres o cuatro candidatos del mismo perfil. El que se enoje, pierde.
Las cosas que no aprendió el MAS Tarija
Ayer llegó el candidato a la Presidencia Luis Arce Catacora a Tarija, pero apenas lo habían difundido en sus redes sociales recién creadas. Se movilizaron funcionarios supervivientes de todo lado, sobre todo de los candidatos que siguen siendo ejecutivos. No es lo que era, pero esta vez pareció que las “facciones” hacían un esfuerzo más sincero por esconder sus diferencias. Walter Ferrufino es el jefe de campaña, pero por el momento no se prevén sorpresas.