Tu espejo
Los hombres, no siempre entienden una verdad muy simple:
La mujer, cuando ama, es intensamente recíproca.
La naturaleza de una mujer es como un eco, es un reflejo emocional.
Absorben la actitud del hombre hacia ellas a nivel intuitivo y energético.
Tus palabras, tus actos e intenciones, deben coincidir entre sí para que ella sea recíproca
La ley de toda mujer es: "Lo que sembraste - regresa"
A veces como ternura, cuidado, paz y un hogar donde descansar del mundo.
Otras veces, como frialdad, distancia y una puerta cerrada para siempre.
Porque una mujer no es rencorosa.
No es vengativa.
La mujer es un espejo, y refleja exactamente lo que tú has puesto en ella.
¿Quieres un jardín? Cuídalo.
¿Quieres amor? Ámala.
¿Quieres lealtad? Sé digno de confianza.
Si tienes a tu lado a una mujer tranquila, cálida, leal y amorosa, no es casualidad. Ella es el resultado de tus actos.
Y si a tu lado hay frialdad y vacío, tampoco es casualidad. Ella será el reflejo de lo que sembraste.
Mira a tu mujer y verás quién eres realmente.
Porque ella es tu espejo.