La Virgen Urkupiña, la señora misteriosa del cerro
A mediados del siglo XVII en la comarca de Cota al sur de Quillacollo, habitaba una niña, la hija menor de una familia humilde que cuidaba a las ovejas. Todos los días la pastorcita dirigía su rebaño hacia la colina. Cuenta la leyenda que un día de agosto se le apareció una señora con...



A mediados del siglo XVII en la comarca de Cota al sur de Quillacollo, habitaba una niña, la hija menor de una familia humilde que cuidaba a las ovejas. Todos los días la pastorcita dirigía su rebaño hacia la colina.
Cuenta la leyenda que un día de agosto se le apareció una señora con un niño en brazos mientras pasteaba a sus ovejas. Desde aquel entonces la niña demoraba en retornar a su casa porque solía jugar con el niño y tener largas conversaciones con la señora en su idioma nativo “el quechua”.
Sus padres preocupados le preguntaban el porqué de su tardanza y ella les dijo “la mamita y su niño vienen a jugar conmigo”. Alarmados los padres se dirigieron a la colina para constatar el increíble relato de su hija. El párroco y los vecinos del lugar también fueron para corroborar lo que la pequeña decía.
Al llegar al lugar escucharon decir a la niña: “Jaqaypiña Urkupiña, Urkupiña” (Allí está, ya está en el cerro). Pero al acercarse a la cima la señora misteriosamente desapareció, a pesar de lo ocurrido la gente logró observar una imagen celestial que se esfumaba entre los cactus y algarrobos.
En dicho lugar hallaron una imagen de la virgen y posteriormente la trasladaron en procesión hasta la capilla de la localidad de Quillacollo.
Desde aquel día es conocida como la Virgen de Urkupiña y en conmemoración a esa fecha el 15 de agosto se celebra una de las festividades de Cochabamba en honor a la Asunción de la Virgen María. (1970, Mercedes Anaya de Urquidi).
La localidad cochabambina de Quillacollo, a 14 kilómetros de la capital, es escenario de una de las entradas más grandes que tiene el país: la festividad de Urkupiña. La fe, baile y el colorido están presentes en las 70 fraternidades que participan de la entrada folclórica.
La fiesta
En la actualidad, la festividad en honor a la Virgen de Urkupiña forma una larga serie de eventos que marcan la vida en Quillacollo en los meses de julio y agosto. Los días centrales empiezan con la Fastuosa Entrada Folklórica el día 14 de agosto, un desfile de cerca de diez mil bailarines disfrazados y acompañados por músicos, evento inspirado por el Carnaval de Oruro.
El día 15 de agosto se celebra la misa solemne de fiesta, con la asistencia de las Autoridades Eclesiásticas, Nacionales y Departamentales de Bolivia, que finaliza con la procesión de la imagen de la Virgen de Urkupiña por algunas calles del centro de la ciudad de Quillacollo y la repetición de la Entrada Folklórica.
La fiesta culmina el día 16 con la romería popular al cerro Cota (Calvario) donde, según la tradición, apareció la Virgen. En el calvario se realizan una serie de ritos, como la sacada de pedazos de piedra en señal de préstamo de bienes espirituales y materiales, con la promesa de volver al año siguiente para devolver los correspondientes intereses; y también está la compra simbólica de pequeños lotes de terreno y otros objetos en miniatura (casas, movilidades, títulos profesionales, etc.), con la esperanza de adquirir uno real hasta el próximo año, posteriormente, en ambos casos se realiza la ch’alla (libación y ofrenda a la Pachamama), pidiendo las bendiciones y favores a la Virgen de Urkupiña.
La fiesta suele atraer a cerca de al millón de feligreses y turistas nacionales e internacionales y constituye un hito importante tanto en la vida religiosa y social como en la economía, el folklore y el recorrido turístico en Bolivia y los Andes.
Curiosidades
Una de las curiosidades de la festividad de la Virgen de Urkupiña es que en su entrada folklórica participan una serie de grupos autóctonos, tradicionales del lugar que dan inicio a la muestra folklórica.
Otro dato curioso es el origen del nombre de la Virgen, pues es el resultado de una parte de su leyenda. Cuentan que en el momento en el que la niña vio que la Virgen ascendía al cielo, llegó la multitud y le preguntó dónde estaba la mujer que se le aparecía constantemente. Ésta dijo “Jaqaypiña Urkupiña, Urkupiña”, lo que en quechua significa sobre el cerro.
Entre los aspectos únicos también está el inicio de la Peregrinación a la media noche del tercer día, en ese momento miles de devotos de la Virgen de Urkupiña inician el recorrido desde la ciudad de Cochabamba hasta el cerro Cota.
Sin embargo, algo que realmente impacta es que la imagen de la Virgen de Urkupiña, según aseguran los religiosos y feligreses, es la misma que apareció en el lugar de aparición física de la Virgen.
Otra tradición que llama la atención está constituida por la serie de ritos que se hacen en el cerro Cota. Uno de los ritos consiste en romper piedras y según el tamaño será el favor que hará la Virgen al devoto. Luego de extraída la piedra se challa y se la bendice con sacerdotes amautas. Al siguiente año se devuelve la piedra extraída como muestra de que lo que se obtiene se devuelve.
Detalles de la tradición
La entrada
En la actualidad, la festividad en honor a la Virgen de Urkupiña forma una larga serie de eventos que marcan la vida en Quillacollo en los meses de julio y agosto. Los días centrales empiezan con la Fastuosa Entrada Folklórica el día 14 de agosto.
Sin fronteras
La fiesta de la integración nacional ya no es solo nacional. La popularidad de la Virgen de Urkupiña ha pasado fronteras y, hoy, en al menos 20 ciudades del mundo se festeja su aparición en el Cerro de Cota.
El nombre
Cuentan que en el momento en el que la niña vio que la Virgen ascendía al cielo, llegó la multitud y le preguntó dónde estaba la mujer que se le aparecía constantemente. Ésta dijo “Jaqaypiña Urkupiña, Urkupiña”, lo que en quechua significa sobre el cerro. De ahí el nombre de la Virgen.
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Cuenta la leyenda que un día de agosto se le apareció una señora con un niño en brazos mientras pasteaba a sus ovejas. Desde aquel entonces la niña demoraba en retornar a su casa porque solía jugar con el niño y tener largas conversaciones con la señora en su idioma nativo “el quechua”.
Sus padres preocupados le preguntaban el porqué de su tardanza y ella les dijo “la mamita y su niño vienen a jugar conmigo”. Alarmados los padres se dirigieron a la colina para constatar el increíble relato de su hija. El párroco y los vecinos del lugar también fueron para corroborar lo que la pequeña decía.
Al llegar al lugar escucharon decir a la niña: “Jaqaypiña Urkupiña, Urkupiña” (Allí está, ya está en el cerro). Pero al acercarse a la cima la señora misteriosamente desapareció, a pesar de lo ocurrido la gente logró observar una imagen celestial que se esfumaba entre los cactus y algarrobos.
En dicho lugar hallaron una imagen de la virgen y posteriormente la trasladaron en procesión hasta la capilla de la localidad de Quillacollo.
Desde aquel día es conocida como la Virgen de Urkupiña y en conmemoración a esa fecha el 15 de agosto se celebra una de las festividades de Cochabamba en honor a la Asunción de la Virgen María. (1970, Mercedes Anaya de Urquidi).
La localidad cochabambina de Quillacollo, a 14 kilómetros de la capital, es escenario de una de las entradas más grandes que tiene el país: la festividad de Urkupiña. La fe, baile y el colorido están presentes en las 70 fraternidades que participan de la entrada folclórica.
La fiesta
En la actualidad, la festividad en honor a la Virgen de Urkupiña forma una larga serie de eventos que marcan la vida en Quillacollo en los meses de julio y agosto. Los días centrales empiezan con la Fastuosa Entrada Folklórica el día 14 de agosto, un desfile de cerca de diez mil bailarines disfrazados y acompañados por músicos, evento inspirado por el Carnaval de Oruro.
El día 15 de agosto se celebra la misa solemne de fiesta, con la asistencia de las Autoridades Eclesiásticas, Nacionales y Departamentales de Bolivia, que finaliza con la procesión de la imagen de la Virgen de Urkupiña por algunas calles del centro de la ciudad de Quillacollo y la repetición de la Entrada Folklórica.
La fiesta culmina el día 16 con la romería popular al cerro Cota (Calvario) donde, según la tradición, apareció la Virgen. En el calvario se realizan una serie de ritos, como la sacada de pedazos de piedra en señal de préstamo de bienes espirituales y materiales, con la promesa de volver al año siguiente para devolver los correspondientes intereses; y también está la compra simbólica de pequeños lotes de terreno y otros objetos en miniatura (casas, movilidades, títulos profesionales, etc.), con la esperanza de adquirir uno real hasta el próximo año, posteriormente, en ambos casos se realiza la ch’alla (libación y ofrenda a la Pachamama), pidiendo las bendiciones y favores a la Virgen de Urkupiña.
La fiesta suele atraer a cerca de al millón de feligreses y turistas nacionales e internacionales y constituye un hito importante tanto en la vida religiosa y social como en la economía, el folklore y el recorrido turístico en Bolivia y los Andes.
Curiosidades
Una de las curiosidades de la festividad de la Virgen de Urkupiña es que en su entrada folklórica participan una serie de grupos autóctonos, tradicionales del lugar que dan inicio a la muestra folklórica.
Otro dato curioso es el origen del nombre de la Virgen, pues es el resultado de una parte de su leyenda. Cuentan que en el momento en el que la niña vio que la Virgen ascendía al cielo, llegó la multitud y le preguntó dónde estaba la mujer que se le aparecía constantemente. Ésta dijo “Jaqaypiña Urkupiña, Urkupiña”, lo que en quechua significa sobre el cerro.
Entre los aspectos únicos también está el inicio de la Peregrinación a la media noche del tercer día, en ese momento miles de devotos de la Virgen de Urkupiña inician el recorrido desde la ciudad de Cochabamba hasta el cerro Cota.
Sin embargo, algo que realmente impacta es que la imagen de la Virgen de Urkupiña, según aseguran los religiosos y feligreses, es la misma que apareció en el lugar de aparición física de la Virgen.
Otra tradición que llama la atención está constituida por la serie de ritos que se hacen en el cerro Cota. Uno de los ritos consiste en romper piedras y según el tamaño será el favor que hará la Virgen al devoto. Luego de extraída la piedra se challa y se la bendice con sacerdotes amautas. Al siguiente año se devuelve la piedra extraída como muestra de que lo que se obtiene se devuelve.
Detalles de la tradición
La entrada
En la actualidad, la festividad en honor a la Virgen de Urkupiña forma una larga serie de eventos que marcan la vida en Quillacollo en los meses de julio y agosto. Los días centrales empiezan con la Fastuosa Entrada Folklórica el día 14 de agosto.
Sin fronteras
La fiesta de la integración nacional ya no es solo nacional. La popularidad de la Virgen de Urkupiña ha pasado fronteras y, hoy, en al menos 20 ciudades del mundo se festeja su aparición en el Cerro de Cota.
El nombre
Cuentan que en el momento en el que la niña vio que la Virgen ascendía al cielo, llegó la multitud y le preguntó dónde estaba la mujer que se le aparecía constantemente. Ésta dijo “Jaqaypiña Urkupiña, Urkupiña”, lo que en quechua significa sobre el cerro. De ahí el nombre de la Virgen.
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