Del libro: RECUERDOS DE MI TIERRA de Tomás O’Connor d’Arlach. 1917
El Colegio de San Luis



Como recuerdo los bellos días
que en tu recinto feliz pasé;
horas fugaces, luz, alegrías,
¡ay! de aquel tiempo que ya se fue
Era ese tiempo la primavera
de nuestra vida, breve, fugaz;
¡si a esos días volver pudiera...!
Días de encanto, de dicha y paz.
Esos si fueron tiempos mejores!
Con cuanta pena mi corazón
recuerda a alumnos y profesores,
el patio alegre y el gran salón,
y aquél anciano que era severo,
nuestro querido señor rector,
y un viejecito que era el portero,
hombre muy vivo, muy charlador.
Para el veintiuno de Junio, día
de nuestro joven santo patrón
Luis de Gonzaga, gran fiesta había
en el colegio: misa, sermón,
hermosos fuegos artificiales
y mucha música, mucha canción,
globos que hacían los colegiales,
disertaciones en el salón.
Ya todo el tiempo llevó en su huida,
edad tan bella ya se pasó;
muchos dejaron la triste vida,
a otros la suerte lejos llevó.
Como recuerdo los corredores
de ese edificio que tanto amé;
los colegiales, los preceptores,
los bellos días que allí pasé.
Hoy día estamos todos ausentes
los estudiantes de aquella edad;
otros vinieron, ¡hay otras gentes
en el colegio y en la ciudad!