El 2024 concluye el contrato de venta gas a Argentina
Exportación de gas, las opciones de YPFB y Tarija en desventaja
Alquilar los ductos para que Argentina exporte gas a Brasil o comprar gas a Argentina para revender a Brasil, son algunas de opciones que analiza YPFB. En ninguno de casos Tarija recibiría regalías



Con la puesta en marcha del Gasoducto Néstor Kirchner, Argentina ya piensa en dejar de comprar gas a Bolivia desde el 2024 y ser potencial vendedor a Brasil. Lo que pone en jaque económicamente a las gobernaciones, alcaldías y universidades del país, que dejarán de percibir 618 millones de dólares, sólo en Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH). Ahora el Gobierno debe analizar soluciones a corto y largo plazo, como alquilar los ductos de gas a Argentina, o buscar nuevos mercados.
Para el presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, este panorama hace prever que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) tendrá meses de arduas negociaciones. En las que el departamento de Tarija tendrá pocas ventajas.
Las opciones de Bolivia
Cuando se inauguró el Gasoducto Presidente Néstor Kirchner, el pasado domingo 9 de julio, fue el ministro de Economía y precandidato presidencial, Sergio Massa, quien confirmó que Argentina dejará de importar gas de Bolivia, gracias a Vaca Muerta. Dijo que ahora podrán exportar a Chile, y, desde Bolivia, al sur y norte de Brasil.
La Asociación de Municipios de Tarija (AMT), que aglutina a ocho municipios del departamento, el Gobierno Regional del Chaco ni la Universidad Autónoma Juan Misael Saracho, que son las entidades que reciben recursos de las regalías y el IDH, han querido pronunciarse sobre el panorama económico que se avecina para el 2024.
Desde entonces, la estatal petrolera empezó a evaluar otras opciones. Alquilar los ductos al país vecino o comprarle gas y revenderlo a Brasil, son algunas.
El jueves 13 de julio, la secretaria de Energía de Argentina, Flavia Royón, a través de su cuenta de Twitter, informó que se reunió con el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, para conversar sobre la posibilidad de exportar gas a Brasil, a través de la infraestructura de transporte que posee Bolivia.
“Recibí al presidente de YPFB, Armin Dorgathen Tapia, para dialogar sobre el abastecimiento de gas de Bolivia a Argentina. También tuvimos un intercambio sobre la posibilidad de exportar gas a Brasil utilizando la infraestructura de transporte existente en Bolivia”, escribió Royón.
Oscar Claros, gerente de Contratos de Exportación de Gas Natural de YPFB, aseguró que el Gobierno analiza varias posibilidades y que en ningún caso Bolivia perderá.
“Se están barajando muchísimas posibilidades, nuevas líneas de negocios. Y es lógico que si en su momento Argentina tiene un excedente exportable quiera llegar a un mercado competitivo como Brasil. Hoy por hoy la economía dice que lo más lógico es llegar (a Brasil) a través de infraestructura ya existente, ya operativa, ya amortizada que es la de Bolivia”, indicó Claros en Fides.
El experto Napoleón Pacheco calificó esta posibilidad como “una salida miserable” y poco rentable para un país, que pasaría de ser referente gasífero en la región a alquilar ductos.
“Alquilar los ductos por supuesto que no es rentable, porque es una salida miserable. De ser productores potenciales de distribución de gas en el cono sur, estamos pasando a alquilar el gasoducto de exportación a la Argentina. Entonces, puede ser una salida que genere un beneficio mínimo de corto plazo, pero en el largo plazo, por supuesto que es contrario a los intereses de Bolivia”, argumentó Pacheco a la ANF.
La otra opción es revender el gas. Según Claros, Bolivia podría comprar el gas argentino para revenderlo a Brasil por medio de ductos bolivianos y a clientes con los que ya existe una relación comercial de tradición.
“No necesariamente tenemos que ver el gas pasar como sólo transportadores, sino que podemos ser comercializadores. (Podríamos) comprar el gas argentino y nosotros comercializarlo en el mercado brasilero a través de nuestras alianzas estratégicas, de toda la experiencia comercial que tenemos a través de 20 años de ser proveedores del mercado brasilero”, sostuvo el gerente de Contratos de Exportación de YPFB.
Pacheco cree que Argentina querrá negociar el alquiler de los ductos bolivianos a cambio de un pago en especie y no en divisas.
“El peaje que va a pagar Argentina por utilizar el gasoducto en territorio boliviano para llegar al Brasil no va a ser en dólares. Ese peaje va a ser pagado en especie, en gas”, advirtió.

anuncia que se discutirá adenda
para la compraventa de gas
Tarija en desventaja ante cualquiera de las opciones
El presidente del Colegio de Economista de Tarija, Fernando Romero, considera que sin importar la opción que YPFB adopte cuando se acabe el contrato de venta de gas con Argentina, Tarija estará en desventaja.
Romero recordó que el departamento de Tarija recibe regalías por la venta de gas, al mercado externo e interno, y no por otro tipo de negocios que incluya al gas natural.
“No está estipulado que el alquiler genere algún tipo de ingreso directo a gobernaciones, municipios y universidades, solamente está contemplado el IDH. Esta es una solución coyuntural, una de las poca que le queda a corto plazo al Gobierno nacional”, indicó.
Romero advirtió que es un hecho que el fin de contrato con Argentina repercutirá en el departamento de Tarija, donde posiblemente caiga en 35 millones de dólares la renta petrolera.
Para cualquiera de las opciones que maneja el Gobierno, alquilar los ductos o revender argentino al Brasil, los ingresos serán mínimos a comparación con los montos que dejaban las exportaciones, que el 2022 fueron alrededor de 1.330 millones de dólares.
Para el especialista en economía, Brasil es quien ahora tiene “el sartén por el mango”.
“Porque ya no tendrá un solo ofertante, ahora serán dos, que ofrecerán precios variados. Entonces, ahí Argentina tiene las de ganar, porque tiene un importante volumen de producción, con el que podrá copar el mercado, mientras que Bolivia no tiene para cumplir la demanda brasilera”, explicó.
Para cualquier de los casos, Romero recalcó que YPFB tendrá unos meses de arduas negociaciones y requerirá de un equipo técnico, político y diplomático que esté a la altura de la situación.