Tarija ante el desafío de cantar “bien” su himno 60 años después
Luego de décadas de cantar versiones deformadas del Himno a Tarija, luego de la aprobación de la Ley de unificación del mismo por la Asamblea Legislativa Departamental, la población se encuentra ahora con el desafío de interpretarla como sus compositores la pensaron. El pasado 24 de...



Luego de décadas de cantar versiones deformadas del Himno a Tarija, luego de la aprobación de la Ley de unificación del mismo por la Asamblea Legislativa Departamental, la población se encuentra ahora con el desafío de interpretarla como sus compositores la pensaron.
El pasado 24 de enero, la máxima entidad deliberativa aprobó la norma luego de observar la necesidad de unificar en un solo texto esta canción poética por recordarse el 25 su aniversario. Solo resta que el gobernador Adrián Oliva la promulgue para que sea socializada y difundida por todos los medios para que sea cantada de una forma uniforme.
Estudio
Uno de los impulsores de la norma, Fernando Arduz, realizó un estudio en 2010 en el que detectó seis versiones diferentes, a pesar de existir una sola partitura; por ejemplo, a partir de una revisión realizada en 1960 por estudiantes tarijeños en la Normal de Sucre, las unidades educativas empezaron a interpretar esta versión.
A su vez, las bandas militares interpretan la versión de 1956 publicada por el profesor Luis Felipe Arce, basado en el libro “Canciones escolares para las escuelas de Bolivia” editada de manera oficial por el Ministerio de Educación y Bellas Artes.
Arduz detectó al menos seis versiones diferentes del Himno a Tarija y “eso no podía tener sentido porque existe una partitura sobre la cual los músicos podemos leer e interpretarla, entonces, después de realizado el trabajo se propuso que el Himno necesitaba una urgente revisión”, agregó.
Para muestra un botón: la quinta estrofa rompe el “molde rítmico” de las seis restantes, puesto que presenta un “encabalgamiento” que engancha el tercer verso con el cuarto: Sólo amamos la industria, el trabajo / Dulces bienes que brinda la paz; / Con amor para todos, con odio / Para nadie en el pecho jamás.
Si leemos los versos con un breve respiro al final de cada uno, captaremos que el tercer verso debe ser modificado para evitar el contrasentido resultante: “Con amor, para todos con odio”, que es como habría que cantarlo, si queremos ser fieles a la melodía escrita en el pentagrama. En la práctica se ha hallado una salida para el canto, pero ésta modifica la estructura decasilábica de los versos: Sólo amamos la industria, el trabajo / Dulces bienes que brinda la paz; / Con amor para todos / Con odio para nadie en el pecho jamás.
Para Arduz, la solución real para este problema sólo puede darse cambiando los versos tres y cuatro para poder cantar la estrofa con la melodía escrita en el pentagrama, sin provocar cambios en el ritmo. A modo de ejemplo, con la finalidad de quitar el encabalgamiento y evitar el atropello en el canto, se hizo la siguiente modificación en la quinta estrofa: Sólo amamos la industria, el trabajo / Dulces bienes que brinda la paz; / Con amor, con amor para todos, / Con odio para nadie jamás.
A su turno, el director de Patrimonio y Gestión Cultural de la Gobernación de Tarija, Melvin Acosta, recordó que desde 2017 se empezó a trabajar seriamente en la revisión de los antecedentes para la unificación del Himno, con esa intención se conformó un comité técnico integrado por destacados músicos como los maestros Milton Ramos, Atiliano Auza, Gilma Hoyos, Carmen Paravicini, Fernando Arduz, Carmen Chiri y otros.
“La otra tarea que queda como Gobierno Departamental es difundir entre la población la manera ordenada de entonar el Himno a Tarija. El trabajo será difundido a través de la Dirección Departamental de Educación a todos los establecimientos, sus direcciones, en las provincias, acompañados de talleres para facilitar el entendimiento”, apuntó.
El pasado 24 de enero, la máxima entidad deliberativa aprobó la norma luego de observar la necesidad de unificar en un solo texto esta canción poética por recordarse el 25 su aniversario. Solo resta que el gobernador Adrián Oliva la promulgue para que sea socializada y difundida por todos los medios para que sea cantada de una forma uniforme.
Estudio
Uno de los impulsores de la norma, Fernando Arduz, realizó un estudio en 2010 en el que detectó seis versiones diferentes, a pesar de existir una sola partitura; por ejemplo, a partir de una revisión realizada en 1960 por estudiantes tarijeños en la Normal de Sucre, las unidades educativas empezaron a interpretar esta versión.
A su vez, las bandas militares interpretan la versión de 1956 publicada por el profesor Luis Felipe Arce, basado en el libro “Canciones escolares para las escuelas de Bolivia” editada de manera oficial por el Ministerio de Educación y Bellas Artes.
Arduz detectó al menos seis versiones diferentes del Himno a Tarija y “eso no podía tener sentido porque existe una partitura sobre la cual los músicos podemos leer e interpretarla, entonces, después de realizado el trabajo se propuso que el Himno necesitaba una urgente revisión”, agregó.
Para muestra un botón: la quinta estrofa rompe el “molde rítmico” de las seis restantes, puesto que presenta un “encabalgamiento” que engancha el tercer verso con el cuarto: Sólo amamos la industria, el trabajo / Dulces bienes que brinda la paz; / Con amor para todos, con odio / Para nadie en el pecho jamás.
Si leemos los versos con un breve respiro al final de cada uno, captaremos que el tercer verso debe ser modificado para evitar el contrasentido resultante: “Con amor, para todos con odio”, que es como habría que cantarlo, si queremos ser fieles a la melodía escrita en el pentagrama. En la práctica se ha hallado una salida para el canto, pero ésta modifica la estructura decasilábica de los versos: Sólo amamos la industria, el trabajo / Dulces bienes que brinda la paz; / Con amor para todos / Con odio para nadie en el pecho jamás.
Para Arduz, la solución real para este problema sólo puede darse cambiando los versos tres y cuatro para poder cantar la estrofa con la melodía escrita en el pentagrama, sin provocar cambios en el ritmo. A modo de ejemplo, con la finalidad de quitar el encabalgamiento y evitar el atropello en el canto, se hizo la siguiente modificación en la quinta estrofa: Sólo amamos la industria, el trabajo / Dulces bienes que brinda la paz; / Con amor, con amor para todos, / Con odio para nadie jamás.
A su turno, el director de Patrimonio y Gestión Cultural de la Gobernación de Tarija, Melvin Acosta, recordó que desde 2017 se empezó a trabajar seriamente en la revisión de los antecedentes para la unificación del Himno, con esa intención se conformó un comité técnico integrado por destacados músicos como los maestros Milton Ramos, Atiliano Auza, Gilma Hoyos, Carmen Paravicini, Fernando Arduz, Carmen Chiri y otros.
“La otra tarea que queda como Gobierno Departamental es difundir entre la población la manera ordenada de entonar el Himno a Tarija. El trabajo será difundido a través de la Dirección Departamental de Educación a todos los establecimientos, sus direcciones, en las provincias, acompañados de talleres para facilitar el entendimiento”, apuntó.