Marcela y Andrea Palacios, cuadernos artesanales personalizados
Ambas iniciaron un negocio con cuadernos hechos a mano.



Marcela Palacios Vasco y Andrea Palacios Rodríguez, de 24 y 29 años, son dos primas que juntas llevan un emprendimiento denominado Déjà Vu – Papelería Artesanal, el cual se centra en la venta de cuadernos personalizados y hechos a mano por ellas.
A inicios de 2019, Marcela y Andrea buscaban una idea para iniciar juntas un negocio, cosas como macetas o atrapasueños pasaron por su mente, pero cuando se dieron cuenta de que podían vender sus cuadernos, se inclinaron por ello.
Ellas ya personalizaban sus cuadernos antes de tener la idea de venderlos, y todo empezó porque querían algo distinto a lo que les ofrecían las marcas de dicho material, cuentan: “Buscábamos cuadernos diferentes y que de alguna manera dijeran algo sobre nosotras, pero realmente no había nada así. Entonces, empezamos a nuestras propias ilustraciones en las tapas”.
Decidieron lanzar sus cuadernos al público en una feria de emprendimientos, con la intención de conocer la aceptación que podían tener. Al ver que le gustó a la gente y vendieron lo previsto, abrieron una cuenta de Instagram para empezar a promocionarse, era mayo de 2019.
Pura Cepa (PC): ¿Cómo son sus cuadernos?
Marcela y Andrea (M y A): “Depende de la persona. En cuanto a la tapa, ella pide una ilustración y manda ejemplos, para que nosotras sepamos exactamente lo que desea. Las hojas son de papel reciclado y cosidas a mano. Tardamos de 7 a 10 a días en entregar un pedido”.
“Saber que nuestro trabajo se recibe con cariño nos motiva aun más”.
(PC): ¿Y las agendas?
(M y A): “Lanzamos las agendas a inicios de año. Estas también tienen las tapas personalizadas, pero la diferencia es que son impresas, porque tienen diferentes secciones a inicios y fines de mes para hacer seguimiento a cosas como: gastos y presupuesto, hábitos, emociones y recordatorios. Luego tienen otras cosas extras como un espacio para anotar frases, para pintar y dibujar, y otro espacio para anotar las cosas por las que se está agradecido”.
(PC): ¿Esperaban el éxito que están teniendo?
(M y A): “La verdad es que no. El trabajo artesanal no es tan demandado en Tarija, pero la aceptación superó las expectativas. La motivación de nuestro entorno, más las recomendaciones y colaboraciones con otras marcas hicieron esto posible. Además, no hay estrés para nosotras, el trabajo nos gusta, es relajante y terapéutico”.