Fiscal Blanco reconoce que la gente ingresa a la Fiscalía con "miedo"
El Fiscal Departamental de La Paz Edwin Blanco reconoció, este miércoles, que la ciudadanía tiene “miedo” ingresar a la Fiscalía, en medio de cuestionamientos a la labor fiscal por la sentencia de 20 años de cárcel a Jhiery Fernández a pesar de ser inocente. “Yo tengo...



El Fiscal Departamental de La Paz Edwin Blanco reconoció, este miércoles, que la ciudadanía tiene “miedo” ingresar a la Fiscalía, en medio de cuestionamientos a la labor fiscal por la sentencia de 20 años de cárcel a Jhiery Fernández a pesar de ser inocente.
“Yo tengo experiencia y he visto en la gente que ingresa a la Fiscalía con miedo. La Fiscalía da miedo, porque pareciera que los fiscales tienen un perfil duro. Creo que hay que humanizar a los fiscales incluido al departamental”, expresó Blanco.
Sus palabras resonaron en la Comisión Mixta de Justicia Plural de la Asamblea Legislativa donde los postulantes a Fiscal General fueron entrevistados, su afirmación contradice el espíritu del Ministerio Público que es defender la legalidad y los intereses de la sociedad.
La Fiscalía carece de credibilidad dicen varios sectores de la población, porque su actuación no es en favor de la sociedad, tampoco es imparcial. En esa línea se manifestaron recientemente los productores de coca de los Yungas, cuyo líder Franclin Gutiérrez fue enviado a la cárcel; en el conflicto de Achacachi sus dirigentes también fueron detenidos; los opositores señalan al Ministerio Público como un brazo de "persecución política" del Gobierno.
Blanco está en el centro de la tormenta desde la pasada semana, cuando se conoció un audio de la jueza Patricia Pacajes en el que confiesa que Jhiery Fernández fue sentenciado, pese a que no existió el delito de violación contra el bebé Alexander.
La autoridad jurisdiccional insistió que el Fiscal General Ramiro Guerrero presionó en el caso, para favorecer un informe de la entonces forense Ángela Mora. Cuando sucedió el caso, Blanco era fiscal de materia, fue junto a su colega Susana Boyán quienes acusaron a Fernández del delito.
Las voces críticas piden no solo que se aparte del caso, sino que renuncie al cargo, por el nefasto precedente que se ha establecido producto de las investigaciones del Ministerio Público y de los administradores de Justicia.
Blanco aspira a ser Fiscal General del Estado, pretende ser el sucesor de Ramiro Guerrero el exconstituyente del MAS y magistrado de la Corte Suprema de Justicia nombrado por el presidente, Evo Morales.
Este miércoles el todavía Fiscal Departamental llegó a las instalaciones del Palacio de la Revolución de la Asamblea Legislativa Plurinacional, donde en su breve exposición dijo que es necesario “humanizar” a los fiscales.
“(Los fiscales) deben mostrar mayor humanitarismo, debemos humanizar a las autoridades fiscales”, sostuvo Blanco, pese a ser uno de los principales sindicados de acusar sin prueba fehaciente a Fernández, quien -además- reveló el maltrato y la humillación a la que fue sometido por la comisión de fiscales cuando lo acusaron de ser el “violador” del bebé Alexander.
Aunque el Ministerio Público tiene la finalidad de defender la legalidad y los intereses de la sociedad, el concepto contradice la situación de Fernández, a quien tres jueces sentenciaron a 20 años de prisión con base en la acusación de los fiscales, entre ellos Blanco.
Pese a mostrar las pruebas de su inocencia, los fiscales junto a los jueces no solo lo acusaron sino lo sentenciaron a prisión prisión, por un delito que no cometió, como la jueza Pacajes reveló en una grabación.
“Unos fiscales que actuaban como los peores delincuentes legitimados en un cargo, utilizando un código a su gusto y antojo a vista y paciencia de tres jueces. He visto y he sido testigo, sobre todo víctima muda por una supuesta reserva por precautelar la dignidad y honor de un menor. Pero qué hay de mi dignidad, de mi honor y de mis derechos…”, cuestionó Fernández en una carta.
Seguirá como fiscal
Tras concluir su entrevista, Blanco aceptó conversar con la prensa, manifestó que continuará ejerciendo sus funciones como Fiscal Departamental de La Paz y descartó su renuncia por el caso bebé Alexander.
“Yo todavía estoy ejerciendo funciones, he tenido vacación la anterior semana, he estado un poco mal de salud y preparándome para estos exámenes”, sostuvo.
Respecto a las presiones que hubieran existido en el caso del pequeño, manifestó que la jueza Pacajes debe explicar, porque en el caso del Ministerio Público “siempre hemos ejercido la dirección funcional en el marco de nuestras atribuciones”, afirmó.
Tomado de ANF
“Yo tengo experiencia y he visto en la gente que ingresa a la Fiscalía con miedo. La Fiscalía da miedo, porque pareciera que los fiscales tienen un perfil duro. Creo que hay que humanizar a los fiscales incluido al departamental”, expresó Blanco.
Sus palabras resonaron en la Comisión Mixta de Justicia Plural de la Asamblea Legislativa donde los postulantes a Fiscal General fueron entrevistados, su afirmación contradice el espíritu del Ministerio Público que es defender la legalidad y los intereses de la sociedad.
La Fiscalía carece de credibilidad dicen varios sectores de la población, porque su actuación no es en favor de la sociedad, tampoco es imparcial. En esa línea se manifestaron recientemente los productores de coca de los Yungas, cuyo líder Franclin Gutiérrez fue enviado a la cárcel; en el conflicto de Achacachi sus dirigentes también fueron detenidos; los opositores señalan al Ministerio Público como un brazo de "persecución política" del Gobierno.
Blanco está en el centro de la tormenta desde la pasada semana, cuando se conoció un audio de la jueza Patricia Pacajes en el que confiesa que Jhiery Fernández fue sentenciado, pese a que no existió el delito de violación contra el bebé Alexander.
La autoridad jurisdiccional insistió que el Fiscal General Ramiro Guerrero presionó en el caso, para favorecer un informe de la entonces forense Ángela Mora. Cuando sucedió el caso, Blanco era fiscal de materia, fue junto a su colega Susana Boyán quienes acusaron a Fernández del delito.
Las voces críticas piden no solo que se aparte del caso, sino que renuncie al cargo, por el nefasto precedente que se ha establecido producto de las investigaciones del Ministerio Público y de los administradores de Justicia.
Blanco aspira a ser Fiscal General del Estado, pretende ser el sucesor de Ramiro Guerrero el exconstituyente del MAS y magistrado de la Corte Suprema de Justicia nombrado por el presidente, Evo Morales.
Este miércoles el todavía Fiscal Departamental llegó a las instalaciones del Palacio de la Revolución de la Asamblea Legislativa Plurinacional, donde en su breve exposición dijo que es necesario “humanizar” a los fiscales.
“(Los fiscales) deben mostrar mayor humanitarismo, debemos humanizar a las autoridades fiscales”, sostuvo Blanco, pese a ser uno de los principales sindicados de acusar sin prueba fehaciente a Fernández, quien -además- reveló el maltrato y la humillación a la que fue sometido por la comisión de fiscales cuando lo acusaron de ser el “violador” del bebé Alexander.
Aunque el Ministerio Público tiene la finalidad de defender la legalidad y los intereses de la sociedad, el concepto contradice la situación de Fernández, a quien tres jueces sentenciaron a 20 años de prisión con base en la acusación de los fiscales, entre ellos Blanco.
Pese a mostrar las pruebas de su inocencia, los fiscales junto a los jueces no solo lo acusaron sino lo sentenciaron a prisión prisión, por un delito que no cometió, como la jueza Pacajes reveló en una grabación.
“Unos fiscales que actuaban como los peores delincuentes legitimados en un cargo, utilizando un código a su gusto y antojo a vista y paciencia de tres jueces. He visto y he sido testigo, sobre todo víctima muda por una supuesta reserva por precautelar la dignidad y honor de un menor. Pero qué hay de mi dignidad, de mi honor y de mis derechos…”, cuestionó Fernández en una carta.
Seguirá como fiscal
Tras concluir su entrevista, Blanco aceptó conversar con la prensa, manifestó que continuará ejerciendo sus funciones como Fiscal Departamental de La Paz y descartó su renuncia por el caso bebé Alexander.
“Yo todavía estoy ejerciendo funciones, he tenido vacación la anterior semana, he estado un poco mal de salud y preparándome para estos exámenes”, sostuvo.
Respecto a las presiones que hubieran existido en el caso del pequeño, manifestó que la jueza Pacajes debe explicar, porque en el caso del Ministerio Público “siempre hemos ejercido la dirección funcional en el marco de nuestras atribuciones”, afirmó.
Tomado de ANF