Vaca, Guerrero, Paputsakis y Ramos: un póker para una alcaldía



Ni bien han empezado a difundirse los rumores sobre el salto del alcalde Johnny Torres a la política nacional, los nombres de posibles sucesores han empezado a agolparse con una peculiaridad: la mayor parte de las “favoritas” a suceder al alcalde son mujeres.
De momento los analistas y estrategas restan valor a las informaciones que colocan a Johnny Torres, en tanto ficha del MNR, como vicepresidente en algún tiket electoral factible para 2025. Los más audaces lo colocan como pareja de un Manfred Reyes Villa que se ha hartado de negar pretensiones en ser candidato presidencial, o como un ancla tradicionalista (con sigla) para la aventura del “nuevo” partido liberal que impulsan algunos académicos de ese sector ideológico.
De darse, el futuro de la alcaldía, con probabilidad, es femenino, y cuatro son las mujeres que se destacan para pelear por ese cargo.
De entre los aliados del alcalde, la que más números tiene es la concejal Marcela Guerrero, aún joven pero sobradamente experimentada y con el valor añadido que le da su procedencia comunal campesina. Durante años Guerrero fue identificada como parte del Movimiento Al Socialismo (MAS), pero en realidad actuaba dentro de la subcentral de San Jacinto con ánimo sindical. Célebres son algunas de las movilizaciones contra el exgobernador Lino Condori por los temas camineros con la ExpoSur como víctima. En el MAS Tarija (cosas del MAS Tarija) nunca creció y en la búsqueda de nuevas oportunidades de servicio aterrizó junto al hoy gobernador Óscar Montes, que la incluyó como diputada en las elecciones de 2019. Tuvo una pega efímera en el INRA en el gobierno de Jeanine Áñez y ya no volvió a probar suerte. En 2021 se acomodó al final de la franja de seguridad de Unidos al Concejo Municipal y salió elegida. En el último pulso de la alianza se quedó del lado de Torres y hoy por hoy, más madura y segura, apunta de nuevo como candidata a la Alcaldía.
Por galones, la favorita siempre es María Lourdes Vaca con una trayectoria dilatada que la define como una de las voces fundamentales de la Tarija autonómica: fue la directora de Autonomías en la batalla por el Estatuto, lo que le costó años de persecución judicial, pero no le impidió estar dos legislaturas en la Asamblea Legislativa Departamental, ambas veces elegida en la lista del gobernador, aunque acabara ejerciendo la oposición también en ambas. En 2021 apareció como secretaria de Desarrollo Humano en la Gobernación de Óscar Montes, con quien tuvo serias diferencias en el pasado y hoy suena como futurible alcaldesa precisamente como parte del reajuste de fuerzas y la cooperación de UNIR y Camino al Cambio en la Gobernación.
Entre las apuestas para la alcaldía también está Patricia Paputsakis, quien se está tomando un respiro político después de una carrera meteórica de la que salió agotada: con menos de 30 años había sido la diputada más joven de la Asamblea Plurinacional, candidata a concejal chicaneada en el último suspiro y secretaria de Familia. Conoce además la institución por familia y tradición, con el MIR y el FRI y sus restos siempre a la vista, pero ha sido capaz de acomodar nuevos planteamientos y voluntad de reforma. Paputsakis ya improvisó una candidatura en 2021 y todo apunta que repetirá, eso sí, trabajando las alianzas y estrategias con mucho más tiempo.
Cierra el póker Raquel Ramos, una de las fichas más inteligentes de la carismática Julia Ramos, otrora poderosa ministra y sostén del Movimiento Al Socialismo (MAS) y del propio Evo en Tarija, y que recién empieza a renacer de sus cenizas tras una época negra de traiciones y olvidos. Raquel Ramos fue parlamentaria y hoy es la concejal más experimentada en lo que a política se refiere, siendo el quebradero de cabeza del oficialismo. Ramos es “capitalina” (lo que resta tensiones con las comunidades), Bartolina urbana (que suma gremiales), aparentemente arcista y buena oradora, por lo que su nombre suena en las internas del Movimiento al Socialismo después de una racha muy pobre de candidaturas donde solo han cosechado duras derrotas tanto con candidatos propios como con candidatos prestados.
¿Y tú? ¿Cuál crees que sería la mejor candidata?