El asalto a Tarija

Ni bien ha terminado la campaña electoral nacional, los partidos tarijeños han empezado a preparar el asalto al poder subregional, una pequeña cuota consolación que todos tienen por seguro que conquistarán.

No era difícil que sucediera. La mayoría no se han involucrado en la disputa nacional, o más precisamente, se involucraron inicialmente y acabaron desmontándose anticipadamente: Johnny Torres ni entró; Mario Cossío bajó a Camino al Cambio de Creemos cuando vio que era incapaz de encajar las piezas; Óscar Montes se lanzó al abismo antes de esperar a que Jeanine Áñez se estrellara contra el fracaso absoluto; no hacía falta correr tanto, la propia Áñez se bajó una semana después y dejó a Adrián Oliva y sobre todo a Víctor Hugo Zamora en el desempleo. El ministro de Hidrocarburos las tuvo con el ex alcalde, total, para nada. Hasta Pica Lema, que se subió de tapadillo con Camacho, se deshizo de él.

En carrera quedó solo Rodrigo Paz Pereira, pero en su caso más parecía una huida que una apuesta, porque era su nombre el que estaba en franja de seguridad con Carlos Mesa en Tarija, es decir, pega segura. El cálculo era ganar para ayudar. Tal vez se soñó recibiendo el bastón de mando en algún aeropuerto como presidente del Senado ante el viaje de los electos. Lo cierto es que le esperan cinco años mucho más plácidos y descansados en la ciudad de La Paz, y nadie duda de que se trata de una huida.

Tarija ha vuelto a votar oposición: CC ha ganado la elección con casi 50% de los votos luego de que no hubiera una tercera opción clara, como en 2019 en la que Montes apoyó a Óscar Ortiz, y luego de que Chi se esfumara como opción antisistema y voto protesta. Y aunque es bueno recordar que en 2009 y 2014 el MAS ganó con 51% la elección nacional en el departamento, se refuerza el concepto de la diferenciación nacional que cala en tantos sectores.

Óscar Montes ha anunciado que postulará a la Gobernación, básicamente porque su potencial aliado Johnny Torres lo ha madrigado anunciando que irá a la Alcaldía. En la lucha por la Gobernación se cuenta también a Adrián Oliva y a un candidato del MAS – Walter Ferrufino quiere y Álvaro Ruiz también -, además de Luis Alfaro, que “incumpliría” su palabra si no se presenta.

Sin embargo, la batalla real se va a dar en la Alcaldía, donde los datos dicen más fácilmente que no hay posibilidades del MAS. Camino al Cambio de Mario Cossío y Mauricio Lea Plaza; Primero la Gente de Rodrigo Paz; UNIR de Montes; el Todos de Adrián Oliva que tendrá que poner a alguien; Johnny Torres con el MNR; su hermano Gonzalo Chulo Torres con quien pueda y alguien del MAS, como mínimo, pugnarán por la próxima silla municipal.

Los analistas no se atreven todavía a hacer proyecciones: ¿Se habrá cansado Tarija de ser opositora? ¿Aparecerán nuevos líderes con arrastre? ¿Seguirá votando a lo viejo conocido? Lo que está claro es que, aún con crisis, aún sin recursos, aún sin perspectivas, el poder sigue llamando.