Todos contra todoS
Desde que el Movimiento Al Socialismo puso en marcha su estrategia “inclusiva” en las elecciones presidenciales, asumida como “viaje al centro” por uno de los principales estrategas del proceso de cambio como es Walter Chávez y luego matizada por el vicepresidente Álvaro García Linera...



Cierto que en Tarija ya se venía practicando el todo vale desde que Lino Condori asumió el cargo de gobernador interino, y muchos antes, pero rebasada la última trinchera, la de la ideología básica luego de haber dinamitado todas las estructuras partidarias tradicionales, la guerra se convierte en un todos contra todos de culto al caudillo. Esta semana en Tarija se ha visto al diputado Adrián Oliva asegurar que su Vanguardia Integración pretendía situarse a la izquierda del MAS, sólo unos minutos después de que su primer socio (y primer ex socio), Fernando Barrientos de Bien Común (BICO) diera por rota la alianza acusando a Oliva de haberse acercado a la “derecha, extrema” en referencia a Unidad Demócrata del ex mirista Samuel Doria Medina. Doria Medina que aceptó la alianza con Rubén Costas (calificado casi de todo menos de izquierdista) pero la evitó con Tuto Quiroga, ex mano derecha del dictador Hugo Banzer cuando se reconvirtió a demócrata. Con Tuto, sin embargo, sí quiso pactar en las nacionales el alcalde Óscar Montes, líder de la última reminiscencia del MIR de Jaime Paz Zamora y que hasta entonces, y quizá ahora, abanderaba la socialdemocracia clásica a la europea moderada. Montes también rechazó aliarse con Oliva, también con Barrientos y también con el MAS, aunque lo puso en primera posición sobre sus preferencias, lo que provocó la ira en Camino al Cambio, esa agrupación que acaudilló el emenerrista Mario Cossío para alcanzar la Gobernación con un discurso netamente autonomista sin matices de derecha o izquierda y que ahora sostienen una dirección colegiada formada por varios líderes con sólida formación marxista. Por el camino aparecen emenerristas, gente de Unidad Nacional, chaqueños sin identificación ideológica y hasta la UCS emergiendo de sus cenizas. Las diferencias son tan mínimas entre ellos que sólo les une la oposición al MAS, con quien apenas les diferencia que unos están en el poder y los otros no. La nueva sonatina de esta campaña, en Tarija, pero también en otros lugares (el alcalde paceño Luis Revilla también lo repite) es: No somos oposición al MAS, somos alternativa al MAS, para a continuación entonar la letanía de “construir juntos una alternativa para el desarrollo para solucionar los problemas de Tarija”, problemas que llevan ahí más de quince años. Alternativas que suenan a muy poco y que con un MAS, al menos en Tarija, absolutamente volcado al centro – centro, apenas se nota la diferencia. Todos saben que hace falta agua, energía, comida para todos y posibilidades de empleo. Ninguno va a quitar el Prosol, ni la canasta alimentaria para la tercera edad, ni los brigadistas barriales ni ninguno de los otros proyectos asistencialistas que tan pocos resultados han dado viendo la escasa capacidad del mercado para contrarrestar los efectos de una granizada, la casi nula creación de empresas agroalimentarias o el incremento de índices de criminalidad por ejemplo.Hasta la segunda vueltaUna sociedad cada vez más globalizada está cada vez más atomizada. El supuesto auge de los movimientos sociales está desconociendo una característica de las nuevas y no tan nuevas generaciones. La gente accede a la información de primera mano y digan lo que digan los políticos, tienen capacidad de juzgar por sí mismos. Los tiempos en los que el caudillo de cualquier organización social o sindicato indicaba por quién sí y por quien no hay que votar han pasado. Exhibir papeles de proclamaciones y apoyos de “organizaciones sociales” no garantizan nada.Como muestra, el MAS de la campaña presidencial del 12 de octubre de 2014 sumó apoyos por doquier. Sindicatos de trabajadores, clase media, clase alta, chaqueños y centenares de funcionarios… pero los resultados arrojaron un sórdido 51 por ciento idéntico al que cosecharon en 2009 en una situación que se suponía marginal en Tarija. Más ejemplos, en el Chaco no ha temblado la mano a casi nadie para ejercer su voto cruzado, sobre todo en Yacuiba, frente a la decisión de Morales de dejar ser apoyado por cierto grupo de poder cuyas bases rechazan.La polémica ley electoral rebajó al 40 por ciento y una diferencia de diez puntos frente al segundo como cantidad suficiente de votos para ser proclamado gobernador. Con los datos en la mano, y aún fraccionando la oposición, no parece posible que en Tarija se alcancen tantas diferencias, menos si, como se prevé, el voto campesino del MAS opte por una tercera vía una vez constatado el secuestro del proceso de cambio perpetrado por aquellos que estaban antes de que se iniciara.Hablando de proyecto y de visión departamental, han pasado cinco años sin que unos pudieran construir el suyo ni que los otros pudieran recomponer el propio. Sin ideología, la pelea es una cuestión de nombres más arriba o más abajo de la lista, con más cuota y con menos cuota mientras todos lo niegan. Sean encuestas, sean propuestas de las bases, sean pactos de silencio o sea el dedazo del presidente, cada candidato deberá demostrar sus credenciales antes de creerse gobernador. Las negociaciones de la segunda vuelta serán todavía más duras.La segunda vueltaSegún el calendario electoral promovido por el Tribunal Supremo Electoral, después del 29 de marzo, en el caso de que ninguna fuerza política logre más del 40 por ciento de los votos y una diferencia de diez puntos con el segundo partido más votado, se procederá a la segunda vuelta. La fecha fijada para tal efecto es el 3 de mayo.El calendario, además, contempla una contradicción, ya que las organizaciones políticas podrían declinar su intención de participar en la segunda vuelta hasta el viernes 3 de abril, siendo que los resultados definitivos no se darán a conocer hasta el domingo 5 de abril.