Hay apostasía por la no legalización del aborto
La Coalición Argentina por un Estado Laico (CAEL) protagonizó ayer sábado el impulso de una “apostasía colectiva” en Buenos Aires. La impulsora de la campaña de apostasía colectiva en la capital argentina, Pao Raffetta, dijo que “hasta el momento mucha gente estaba despreocupada de...



La Coalición Argentina por un Estado Laico (CAEL) protagonizó ayer sábado el impulso de una “apostasía colectiva” en Buenos Aires.
La impulsora de la campaña de apostasía colectiva en la capital argentina, Pao Raffetta, dijo que “hasta el momento mucha gente estaba despreocupada de su pertenencia a la religión Católica, pero el día de hoy, han decidido que no quieren estar representados por una ideología que atenta contra sus derechos”.
Estas acciones se llevan a cabo por parte del movimiento luego de que el Senado argentino rechazara la legalización del aborto influenciado por la Iglesia católica que goza de privilegios en la nación.
Indicó que hasta el momento habían acumulado un total de 1200 solicitudes para apostatar. Señaló que esto es el “reflejo de la indignación colectiva de muchísimas mujeres pero también de muchos hombres que entienden que estos obstáculos que pone la Iglesia a la hora de garantizar la salud y la educación sexual también los afectan a ellos”.
A su vez, indicaron que esta apostasía se da en contra de una institución que atenta con los derechos humanos ya que no permitió que le legalizara el aborto, que se estableciera la legalidad del matrimonio homosexual, entre otros temas.
Raffetta afirmó que según sus apreciaciones es “hora de tener un Estado verdaderamente laico como muchos países del mundo”.
De forma paralela, los movimientos que se oponen a la legalización del aborto se movilizan para evitar que aquello ocurra, puesto que señalan que están en defensa de la vida.
La situación en la República Argentina está dividida por los que están a favor y los que están en contra del proyecto de ley de legalizar el aborto. Aún no existe una solución concreta a este tema.
La impulsora de la campaña de apostasía colectiva en la capital argentina, Pao Raffetta, dijo que “hasta el momento mucha gente estaba despreocupada de su pertenencia a la religión Católica, pero el día de hoy, han decidido que no quieren estar representados por una ideología que atenta contra sus derechos”.
Estas acciones se llevan a cabo por parte del movimiento luego de que el Senado argentino rechazara la legalización del aborto influenciado por la Iglesia católica que goza de privilegios en la nación.
Indicó que hasta el momento habían acumulado un total de 1200 solicitudes para apostatar. Señaló que esto es el “reflejo de la indignación colectiva de muchísimas mujeres pero también de muchos hombres que entienden que estos obstáculos que pone la Iglesia a la hora de garantizar la salud y la educación sexual también los afectan a ellos”.
A su vez, indicaron que esta apostasía se da en contra de una institución que atenta con los derechos humanos ya que no permitió que le legalizara el aborto, que se estableciera la legalidad del matrimonio homosexual, entre otros temas.
Raffetta afirmó que según sus apreciaciones es “hora de tener un Estado verdaderamente laico como muchos países del mundo”.
De forma paralela, los movimientos que se oponen a la legalización del aborto se movilizan para evitar que aquello ocurra, puesto que señalan que están en defensa de la vida.
La situación en la República Argentina está dividida por los que están a favor y los que están en contra del proyecto de ley de legalizar el aborto. Aún no existe una solución concreta a este tema.