Inestabilidad del dólar golpeó los negocios inmobiliarios en Tarija
Advierten que ha disminuido la venta de casas o departamentos, pero incrementaron los alquileres. En esta época de incertidumbre económica varias familias han optado por comprar lotes para mantener el valor de su dinero



La recesión económica y la escasez de la divisa americana han golpeado al sector inmobiliario en Tarija. Quienes se dedican a este negocio reconocen que esto no es un fenómeno actual, sino que se lo arrastraba desde la pandemia, lo que ahora se ahondó más con la inestabilidad económica que se vive en el país. Advierten que se ha registrado una baja en la compraventa de bienes inmuebles, aumentó la demanda de alquileres, además que hubo una supresión en los contratos de anticrético, esto debido a la volatilidad del dólar.
El País realizó un sondeo sobre la situación de varias inmobiliarias en la capital chapaca, las que coinciden al afirmar, que lejos ha quedado aquella Tarija de bonanza entre la gestión 2012 al 2015, cuando la demanda inmobiliaria daba para redituar de este negocio. Coincidente con la caída de la renta petrolera, este sector ha entrado en receso.
El entendido en el mercado inmobiliario, Oscar Gonzáles de Prada, bróker de Remax Tierra Nueva, explica que en el caso de las obras nuevas, han disminuido notablemente, situación que se arrastraba desde gestiones pasadas, lo que se ahondó más con la escasez de dólares, llevando a una especie de recesión al negocio inmobiliario de la construcción.
G. de Prada explicó que actualmente en el mercado local existe una sobreoferta de casas o departamentos en Tarija, y que son pocas las familias las que pueden afrontar una compra de esta magnitud. Más ahora con la inestabilidad del tipo de cambio del dólar, ya que el mercado inmobiliario maneja la divisa americana como precio referencial.
“Todas las compras de bienes raíces son casi siempre en dólares, siempre hubo un tipo de cambio que era relativamente estable, pero como habrán notado, en este último tiempo se ha advertido que el tipo de cambio ha llegado hasta los 10 bolivianos por la unidad de dólar. Entonces, en lo que respecta el sector de vivienda social, vivienda construida, y la parte residencial ha habido una disminución notable entre septiembre y diciembre del 2023. Hubo una baja en las compras, pero en ese mismo periodo incrementaron los alquileres de residencia”, detalló.
Pese a ello, G. de Prada resaltó que en este tiempo de incertidumbre económica, ha habido varias familias que se han dedicado a la compra de bienes y raíces a fin de preservar el valor de su dinero, adquiriendo principalmente lotes y con menor demanda casas.
“Por ejemplo, nosotros en el mes de enero hemos vendido unos ocho lotes con un perfil entre los 25.000 dólares a 60.000. Aquí lo que quiero retratar que antes la compra de estos bienes inmuebles era intermediada por entidades financieras, pero ahora, a inicios de este año, hemos visto que la venta que hemos hecho, ha sido con el ahorro que la gente tenía en sus casas, que han pagado en su mayoría en bolivianos, pero con un tipo de cambio transado con el vendedor”, expuso.
El experto explicó que por la contracción en la demanda los precios han bajado, empero, reconoció que no todas las familias pueden comprar, y han tenido que postergar su sueño e inclinarse por el alquiler de residencias.
En lo que respecta los bienes raíces comerciales, G. de Prada detalló que hubo un bajón considerable, debido a que en Tarija no existen muchas empresas. Sin embargo, hace énfasis en que después de la pandemia hubo una demanda de bienes inmuebles en el campo (casas, quintas, estancias), la mayoría de las veces los compradores suelen ser de La Paz, Potosí y Chuquisaca.
Los anticréticos
En el caso de los anticréticos, explicó que en el caso de Remax, ante la escasez de dólares, han optado por no realizar este tipo de transacciones. Detalló que con anterioridad se lo hacía, ya que era equivalente a obtener un crédito sin intereses por un determinado tiempo, y que al obtener estos recursos el dinero se lo hacía trabajar en el comercio o se lo invertía.
“Ahora con el tema del dólar, nadie va a estar dispuesto a aceptar que el cliente pague en bolivianos, porque esta moneda puede perder valor de aquí a unos dos años, y dólares no hay. Igualmente la persona que acepte dólares para hacerlo trabajar y para que reditúe, eso es una locura, porque más adelante tendrá que comprar dólares ¿en cuánto?, 10 o 12 bolivianos, lo que actualmente se los está consiguiendo en 8 bolivianos”, mencionó.
Esta situación ha sido constatada por El País, pues al menos cuatro empresas inmobiliarias han coincidido al afirmar que no estaban realizando contratos por anticrético.
Inmobiliarias optan por el tipo de cambio oficial
Consultado sobre cuál es el tipo cambiario del dólar que están utilizando en el mercado inmobiliario, Oscar G. de Prada explicó que se toma como referencia el tipo de cambio oficial, ya que al existir una volatilidad en el precio de la divisa americana, o con el dólar paralelo, esto con el objetivo de evitar una pérdida.
“Hay una nueva realidad en el mercado inmobiliario residencial y hay que acomodarse, si quieren venderlo, hay que hacerlo en el precio que el mercado esté dispuesto a pagar. En el caso de los desarrolladores de obra nueva, los que aún continúan en el mercado local, son aquellos los que han priorizado el diseño de casas con menos áreas comunes, el diseño interno, y el tipo de materiales”, apuntó.