Tarija: Todo el poder para las Bartolinas
La caída de Walter Ferrufino como coordinador gubernamental era una crónica anunciada prácticamente desde el minuto 1 de su nombramiento en aquella víspera del 15 de abril de 2023 en la que Arce sorprendió a todos destituyendo a Marcelo Poma, pues tanto uno como otro parecían escorarse al lado evista del MAS y cierto gusto por figurar como independientes.
Ferrufino venía del lado tarijeñista, pero también tenía cuentas pendientes con varios sectores, fundamentalmente chaqueños, que no olvidan su rol en la articulación de la propuesta de modificación de la Ley del 45%, como del sector campesino, donde siempre ha movido para condicionar de alguna forma a la ejecutiva.
Finalmente han sido estos quienes parecen haber sido determinantes: Arce ha sumado el apoyo de casi todas las subcentrales y tiene previsto asaltar el poder orgánico del MAS Departamental en cuanto se concrete el Congreso, si es que tal cosa llega a suceder antes de las elecciones de 2025.
Arce no tiene previsto nombrar otro delegado dados los antecedentes, pues tanto Poma como Ferrufino prometieron sumar para coser el partido, pero en la práctica se acabaron borrando del conflicto y, en todo caso, trabajando para su propio perfil.
Los campesinos aseguran que esa delegación se ejercerá de forma colegiada por el propio Pacto de Unidad, aunque se diluya la figura en sí. En todo caso, desde hace varios meses, con la rehabilitación de Julia Ramos al frente de la organización Bartolina Sisa, su presencia se ha vuelto imprescindible. A eso se ha sumado el nombramiento de Celinda Sosa en la Cancillería, convirtiéndola en el poder de facto institucional en el terreno.