Piden retirar proyecto de ley de modificación del PGE
“Impuestazo” a las bebidas inquieta a las cervecerías
La alianza de cervecerías artesanales señala que el Gobierno quiere compensar su iliquidez con una mayor presión tributaria sobre las empresas formales
La alianza de cervecerías bolivianas ha manifestado su rechazo a una posible inclusión de rangos para el Impuesto a los Consumos Específicos (ICE) de bebidas alcohólicas y no alcohólicas, que planteó el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas en el Proyecto de Ley PL-354/2021-2022 enviado a la Asamblea Legislativa Plurinacional.
“La modificación de estos rangos tendrán un impacto en las alícuotas del ICE y planteará un incremento de la presión tributaria sobre el sector cervecero del país, lo que plantea un atentado a la sostenibilidad económica de nuestras empresas, especialmente las más pequeñas y vulnerables como es el caso de las cervecerías artesanales. Solicitamos al Gobierno el retiro de este proyecto de ley y trabajar en conjunto en una propuesta de un sistema tributario más bien a favor de la industria nacional”, indicó Guido Mühr, representante de Sabores Bolivianos Alemanes y la marca Prost.
Tratamiento discriminatorio a la formalidad
La crisis económica postpandemia y el incremento del contrabando han golpeado al sector cervecero boliviano, afectando a grandes y pequeñas cervecerías artesanales con un impacto especial sobre estas últimas que muestran mayor vulnerabilidad. Los aliados refuerzan que es necesario proteger a la cerveza boliviana como un producto de excelente calidad que, además, puede potenciar otras actividades, como el turismo, como ocurre en otros países. Adicionalmente, puntualizan sobre una ausencia del Estado para proteger a la producción nacional.
“Hay que considerar a las cervecerías artesanales que, en la actualidad, además de competir con productos de contrabando, les toca luchar con una subida en los precios de la materia prima, si esta subida al impuesto al consumo específico se hace efectiva muchas cervecerías pequeñas tendrán que cerrar sus puertas”, señaló Stefano Coutand, a tiempo de indicar que en el país hay más de 80 cervecerías.
Los representantes del sector indican que este es un tratamiento desigual y discriminatorio con la empresa formal, que genera empleos de calidad y que son los que históricamente más contribuyen al fisco.