Arranca la gestión 2021 - 2026
Los 6 meses de Arce para Tarija: los pendientes y el reto de la refinanciación
El Gobernador busca una reunión con el presidente Luis Arce para intercambiar criterios. La Gobernación requiere de autorización ministerial para convertir la deuda de corto plazo en una de largo plazo



Celebró el presidente Luis Arce Catacora los seis meses de su Gobierno haciendo énfasis en tres aspectos: la mejora de la educación, la mejora en la lucha contra el Covid y la mejora de la situación económica, tres aspectos que en Tarija apenas se han sentido de acuerdo a los pocos datos disponibles.
Mientras tanto, una serie de proyectos y compromisos adquiridos en el pasado no avanzan o no han sido retomados. El gobernador Oscar Montes señaló que esta semana pediría formalmente una reunión con el Presidente para poder trazar una agenda conjunta, aunque por el momento, no hay fecha.
Los datos
Cuando Luis Arce asumió la Presidencia el 8 de noviembre, en Tarija se habían acumulado concretamente 16.362 positivos de coronavirus y 388 decesos, mientras que el domingo se alcanzó la cifra de 26.278 positivos diagnosticados y 669 decesos. Es decir, en la etapa de Arce se han sumado 9.916 positivos y 281 decesos. En términos de tasa de letalidad, que es la que sirve para hacer comparaciones, Tarija acumula un 2,54% de pacientes que fallecen con la enfermedad diagnosticada, sin embargo, antes del 8 de noviembre de 2020 la tasa era del 2,37% y en los seis meses siguientes se ha elevado a 2,83%.
En cualquier caso, con Arce han empezado a llegar las vacunas, ya que se empezaron a distribuir a finales de diciembre a nivel mundial. En Tarija hay 37.919 personas inmunizadas con la primera dosis, que es prácticamente un 10% de la población mayor de 18 años, y 14.957 que ya han obtenido las dos inmunizaciones.
En términos de educación, no consta un dato sobre el seguimiento e implantación real de la educación virtual y semipresencial pretendido, aunque desde las organizaciones de padres de familia se señala que sigue existiendo déficit educativo.
En términos de economía, la reactivación se siente poco en Tarija, que sigue viendo mermados sus ingresos, relacionados íntimamente al gas. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, las exportaciones de gas se han reducido un 23 por ciento en global, lo que ha dejado 499 millones de dólares en las arcas del Estado. De ellas, algo más de la mitad – 280 millones de dólares – salieron de Tarija, por lo que sobre ellas se aplicará el 11 por ciento de la regalía, que con descuentos rondará los 25 millones de dólares, unos 175 millones de bolivianos.
Los mismos datos evidencian un bajo desembolso de recursos por parte del Gobierno. Mientras en la Gobernación de Tarija para el 2021 se programó 553,85 millones de bolivianos de regalías hidrocarburíferas, es decir se esperaba recibir 46 millones de bolivianos por mes, sin embargo, recibió en promedio 10 millones de bolivianos mensual.
Las llegadas de Arce
El ritmo de Luis Arce es diferente al que imprimió Evo Morales en su gestión, y por ello, las llegadas al departamento también han sido menos. Por ejemplo, no ha constado una reunión formal con el gobernador Adrián Oliva para tratar temas bilaterales en los meses de gestión compartida, e incluso en los actos relacionados a la efeméride, Arce desarrolló agenda paralela entregando obras en Padcaya y Yacuiba.
Es verdad, señalan en el círculo del Presidente, que la campaña electoral se precipitó aceleradamente en Tarija, lo que rápidamente colocó al Gobernador como aspirante a la reelección, y Arce no tardó en entrar en campaña ante el pedido del propio MAS Tarija.
La más llamativa fue la visita del 21 de marzo, en plena campaña por la segunda vuelta, donde Luis Arce se reunió con diferentes sectores y principalmente con la Federación de Empresarios Privados de Tarija, según confirmó su presidente Marcelo Romero, quien dijo que solo se trataron temas institucionales relativos al sector vitivinícola, la industria y el comercio.
Arce también se ha prodigado más en el Chaco que en Cercado, donde entregó equipos para el aeropuerto y prometió, de nuevo, la doble vía Yacuiba – Pajoso, entre otros proyectos.
En cualquier caso, los actos proselitistas han eclipsado los demás, particularmente aquel cierre de campaña en el que hizo referencia a la provisión de vacunas del Covid, vinculándolo a una clase social y a la victoria del MAS en las subnacionales.
Los temas pendientes
De todos los temas de corto plazo que están pendientes de una solución por parte del Gobierno nacional, el más avanzado es el de la gestión de la variante Canaletas – Entre Ríos, ya aceptada por la entidad caminera ABC y dispuesto dinero para su mantenimiento.
Pendiente está, por ejemplo, la construcción de la planta de tratamiento de aguas residuales en San Luis, para lo que hay un estudio técnico definido que ahora requerirá de fuentes financiamiento para ejecutar la obra.
Está pendiente la conclusión del anillo energético y la interconexión al Sistema Interconectado Nacional de energía tanto en Cercado como en Bermejo y que alguna vez se ha comprometido por parte del Gobierno nacional.
Otro de los proyectos que no ha logrado avanzar durante la gestión es la de la consolidación de una tercera frontera con Argentina – cuarta en todo el país – a través de Mecoya (Padcaya), que pasa por ser uno de los puntos más activos para el contrabando. La vía permitiría un rápido ingreso y salida de mercancías por Jujuy, desde donde se alcanzarían los puertos medios chilenos. En Tarija existe incluso proyecto carretero para alcanzarlo y hubo acuerdo con el Gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, pero se precisa la autorización de las Cancillerías para avanzar.
Otro tema carretero con estudios y sin licitación es el del túnel del Aguaragüe, un tramo que permitirá recortar unos 25 minutos la distancia, especialmente peligrosa, entre Yacuiba y Caraparí.
De la gestión de Evo Morales también queda la promesa de reformar y elevar la categoría del aeropuerto Oriel Lea Plaza, que luego de haber resuelto algunos de los problemas en la plataforma de despegue y aterrizaje no parece ser prioritario en este momento.
La industrialización del gas
En cualquier caso, las promesas pendientes más recurrentes para con el departamento de Tarija tienen que ver con el gas y con la transformación de este en industria.
La mayor de todas las promesas es la de la construcción de la Planta Petroquímica de Propileno y Polipropileno a partir de la materia prima que se genera en la Planta Separadora de Líquidos del Gran Chaco y que ya está dando rendimientos con la venta de Gas Licuado de Petróleo, aunque ese no sea su principal objetivo.
Para la planta se empezaron a hacer estudios desde 2013, mismos que acabaron definiendo su viabilidad por cerca de 2.000 millones de dólares. En 2016 se garantizó su financiación por medio del Banco Central de Bolivia (BCB) y se lanzó una licitación que debía ser resuelta coincidiendo con el bicentenario tarijeño, sin embargo, la corrupción hizo aparición en YPFB por otra licitación – la de la compra de taladros - que acabó desplazando al presidente Guillermo Achá y poniendo bajo sospecha la de La Planta Petroquímica, cuyo informe de recomendación de resolución ya estaba firmado, proponiendo la adjudicación a Tecnimont y Técnicas Reunidas, que se habían presentado juntas.
Tecnimont era la empresa que había hecho todos los estudios previos y Técnicas Reunidas la constructora de la Planta Separadora de Líquidos, que debe proveer la materia prima, por lo que no era difícil inferir algún tipo de manejo de información privilegiada. El ministro de entonces, Luis Alberto Sánchez, optó por anular la convocatoria, y hasta hoy no se ha vuelto a retomar el asunto.
Arce ha hecho referencias a la industrialización en sus últimas entrevistas, pero refiriéndose exclusivamente a la construcción de nuevas plantas de urea y no así a las de propileno o etileno, contempladas en el plan original post – nacionalización.
“(…) ya se está pensando, y está trabajando YPFB en eso, en hacer nuevas plantas, por ejemplo, de urea. La urea tiene un buen mercado, y es gas, es otra manera de vender gas. Brasil quizás no va a querer nuestro gas, los volúmenes que quería, pero Brasil sí necesita nuestra urea. Perú sí necesita nuestra urea. Argentina necesita nuestra urea”, manifestó.
Explicó que, en “el caso de Brasil, está importando urea desde Rusia, y nosotros estamos al lado. Entonces, tenemos que apurarnos en el proceso de industrialización en el tema del gas, para que no tengamos que depender del precio de exportación del gas en bruto hacia la Argentina o hacia el Brasil”.