La Alcaldía identificó ese problema principalmente en el centro de la ciudad
Atribuyen malos olores en las cloacas a tuberías clandestinas
La Unidad de Mantenimiento de la Alcaldía, que se encarga de la limpieza de las bocas de tormentas, expuso que en el casco viejo hay conexiones ilegales que datan de años atrás
Las tareas de limpieza de las alcantarillas y bocas de tormentas en la ciudad de Tarija se incrementaron en las últimas semanas para evitar que con la época de lluvias las mismas se tapen o colapsen. En distintos barrios se identificaron que estas instalaciones desprenden malos olores y desde la Alcaldía apuntan que, en el centro de la ciudad, se deben a conexiones subterráneas clandestinas.
Otras de las zonas “más conflictivas”, identificadas durante los trabajos de limpieza, fueron los barrios Fátima y La Pampa, donde atribuyen que los olores nauseabundos se deben a que principalmente los comerciantes en el área desechan residuos en las bocas de tormentas.
Conexiones ilegales
El responsable de la Unidad de Mantenimiento de Infraestructura de la Alcaldía, Román Fernández, quien dirige los trabajos de limpieza tanto de las alcantarillas como de las bocas de tormentas, explicó que los malos olores que desprenden estas instalaciones en el centro de la ciudad, se deben a las conexiones ilegales en el sistema de alcantarillado.
“Lamentablemente los vecinos hicieron conexiones clandestinas de sus aguas del baño, del alcantarillado sanitario que sale de las casas, por facilitarse o ahorrarse unos pesos, hicieron sus conexiones al desagüe pluvial en vez del sanitario, entonces todas estas aguas que salen de los baños generan esos malos olores que ahora se sienten”, indicó.
Por más continuos que sean los trabajos de limpieza en el centro de la ciudad, según Fernández, los olores continuarán por este motivo. Para identificar quiénes son las personas que procedieron a realizar estas conexiones, la tarea es “más complicada” debido a que implicaría remover el asfalto, en cada cuadra del centro y verificar de dónde viene cada conexión.
“Es muy difícil detectar cuáles son las casas que han conectado su alcantarilla sanitaria al desagüe pluvial, esto a simple vista no se observa”, aseveró.
Recorridos en los barrios
El problema de los malos olores en los barrios conflictivos de la ciudad, como La Pampa y Fátima, se debe a que, al ser zonas comerciales, algunos negocios vierten sus residuos directamente a estas instalaciones, de acuerdo al responsable de la Unidad de Mantenimiento de Infraestructura de la Alcaldía.
“El problema es la acumulación de sedimento en la avenida Las Américas, pero en Fátima, el olor es insoportable por el mal uso que le dan los vendedores, sobre todo de las carnicerías, las cámaras están llenas de grasa, con el calor y el transcurso del tiempo trasminan olores muy fuertes”, expuso Fernández.
En esta zona se realizan trabajos de limpieza cada dos semanas, pero los trabajos no son suficientes y la solución está dirigida a la educación de los comerciantes en este sector, ya que a la fecha no existe sanción alguna para las personas que realizan esta actividad.
La mala educación “entre vecinos”
Un vecino en el barrio Fátima, Carlos, señaló que, tras años de vivir en este sector, evidenció que algunos vecinos no tienen la “educación” que deberían para el cuidado de las calles y el sistema de alcantarillado o bocas de tormentas.
En reiteradas oportunidades, Carlos comentó que reclamó a un vecino por desechar residuos en estado de descomposición en las calles, no solo “en su acera” sino en las viviendas colindantes.
“Varias veces le reclamé por esto, ponen platitos de comida para los perritos y gatos en las calles, cosa que está muy bien, pero cuando no vienen a comer los animalitos, la comida se fermenta y en vez de botar esto a la basura, la desecha directamente en la calle, es de muy mala educación. Pero cuando protesté, solo recibí malos tratos”, indicó.
Carlos señaló que esas acciones deberían ser sancionadas con multas económicas, “de otra manera los vecinos no aprenden, siguen haciendo lo mismo, causan malos olores y un desgaste total a las aceras o calles de la ciudad”.
Desde la Unidad de Mantenimiento de Infraestructura de la Alcaldía, señalaron que la instancia pertinente para actuar es la Secretaría de Medio Ambiente.