Inicia el verano con el día más largo del año
El verano comienza este domingo 22 de diciembre de 2019 a las 00:21 hora boliviana en el hemisferio sur y el invierno en el hemisferio norte y, como consecuencia, en la mitad austral del planeta, donde Bolivia se encuentra, se experimentará el día más largo del año, el Sol aparecerá sobre el...



El verano comienza este domingo 22 de diciembre de 2019 a las 00:21 hora boliviana en el hemisferio sur y el invierno en el hemisferio norte y, como consecuencia, en la mitad austral del planeta, donde Bolivia se encuentra, se experimentará el día más largo del año, el Sol aparecerá sobre el horizonte a las 05:33 y desparecerá a las 19:01.
Evento
Según información brindada por el director del Observatorio Astronómico en Santa Ana, Rodolfo Zalles, este cambio de estación tiene lugar al producirse el fenómeno denominado solsticio de diciembre, que es un evento astronómico que marca el inicio del verano. La palabra solsticio es de origen latín “solstitium”, de “sol” y “statum” que significa “estático”, es el punto donde la trayectoria del Sol aparenta estar parado, se refiere a la época en que el Sol se encuentra en uno de los trópicos.
Los trópicos son los dos paralelos de la esfera celeste, situados a 23 grados 27 minutos de latitud norte y a 23 grados 26 minutos de latitud sud. Son los dos puntos situados más al norte y al sur respectivamente de la superficie terrestre donde los rayos del Sol inciden perpendicularmente sobre la Tierra, al mediodía, al menos un día al año, el día del Solsticio de verano (21 o22 de diciembre) y el día del solsticio de invierno (21 o 22 de junio).
Por otra parte, explicó que la Tierra está dotada de dos movimientos principales estrechamente relacionados con el clima y sus variaciones: el de traslación que es el recorrido que efectúa en torno al Sol que es fuente de calor que regula todo el proceso climático terrestre. Y el de rotación es el movimiento que ejecuta sobre su eje imaginario que pasa por los polos y provoca el día y la noche con la consiguiente influencia en los procesos atmosféricos.
Nuestro planeta orbita alrededor del Sol en un plano que se lo conoce como “plano de la eclíptica” y tarda en completar una órbita en 365 días, cinco horas, 45 minutos, 3.6 segundos, lo que comúnmente es denominado “año”.
El eje de rotación de la Tierra no es perpendicular al plano de la órbita que describe alrededor del Sol, sino que está a 23 grados inclinado respecto al mismo. Se debe a esta inclinación la desigualdad de los días y las noches y la sucesión de las estaciones: primavera, verano, otoño e invierno. Si el eje de rotación de la Tierra no estuviera inclinado no habría estaciones y todo el año sería lo mismo, sin ningún cambio climático.