Detectan dos nuevos casos de hepatitis en San Lorenzo

Los casos de hepatitis A van en ascenso en San Lorenzo, pues el Servicio Departamental de Salud (Sedes) reportó dos nuevos casos positivos de esa patología, por lo que recomiendan medidas de prevención para que no se incremente más pacientes con ese mal.

El anterior reporte epidemiológico indicaba que los dos primeros casos del departamento eran uno en Cercado y otro en San Lorenzo. Sin embargo, en el último reporte indica que se confirmaron dos más en el último municipio mencionado.

En anteriores años San Lorenzo fue una las jurisdicciones que más pacientes con este mal reportó. Los más afectados fueron los niños en edad escolar, como también sucede en la actualidad.

Esta enfermedad se contagia principalmente en los colegios o lugares donde hay hacinamiento, grupos de personas, centros de niños, entre otros, porque es una patología que se trasmite por el contacto con el virus, al beber agua contaminada, mal lavado de manos después de salir del baño y todo lo que tiene que ver con la higiene.

Los síntomas que presenta el cuerpo son piel y ojos amarillos, hinchazón o dolor del estómago, debilidad de los músculos, artritis, vómitos, orina oscura, pérdida de apetito, fiebre y cansancio.

En una etapa avanzada, la hepatitis presenta síntomas desde leves, como el cansancio, hasta severos, por ejemplo la confusión mental, porque daña las células del hígado y forma la piel con cicatrices y provoca que las células dañadas ya no puedan funcionar. En algunas ocasiones no se tiene síntomas, por lo cual es difícil detectar a tiempo.

A diferencia de las hepatitis B y C, la A no causa hepatopatía crónica y rara vez es mortal, pero puede causar síntomas debilitantes y hepatitis fulminante (insuficiencia hepática aguda), que se asocia a una alta mortalidad.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) indica que las hepatitis virales B y C son grandes desafíos para la salud pública, pues afecta a 325 millones de personas en todo el mundo. Éstas son las mayores causas del cáncer de hígado, lo que lleva a 1,34 millones de muertes cada año.