Plantean mover comunidades de la ribera del Pilcomayo a zona segura
El asambleísta por el pueblo indígena Weenhayek, Gilberto Márquez, planteó trasladar a las comunidades que corren riesgo cada año por la crecida del río Pilcomayo a una zona segura mediante un proyecto de viviendas. En un aproximado, se deberían construir 150 casas para resguardar a las...
El asambleísta por el pueblo indígena Weenhayek, Gilberto Márquez, planteó trasladar a las comunidades que corren riesgo cada año por la crecida del río Pilcomayo a una zona segura mediante un proyecto de viviendas. En un aproximado, se deberían construir 150 casas para resguardar a las familias.
El desborde del Pilcomayo es un asunto recurrente y de interés internacional. Atraviesa Bolivia, Argentina y Paraguay y cuando llega una crecida -como la de este año en el Puente Aruma-puede subir hasta los 9.60 metros de altura. Las familias que habitan en la ribera son indígenas y viven en casas precarias, con lo suficiente para sobrevivir. La pesca es su principal actividad económica y también su forma de subsistir porque no hay cultivos alrededor.
Sin embargo, en la época de lluvia el río Pilcomayo crece y arrastra piedras, árboles y todo lo que se encuentre en su camino. Es por eso que se deben activar mecanismos de alerta para que las familias que se localizan en los puntos de mayor riesgo como: La Mora, D’Orbigny y Crevaux, sean reubicadas hasta que el cauce baje. En las peores etapas, los comunarios exponen su salud con enfermedades respiratorias y diarreas.
Márquez explicó que si bien las autoridades municipales y departamentales están realizando las acciones necesarias para la evacuación de las comunidades se requiere de una solución definitiva. Una posible solución es la construcción de viviendas para que las familias que corran mayor riesgo, es decir las que se encuentren al borde del Pilcomayo, puedan trasladarse y tener una calidad de vida mejor y segura. Las nuevas familias deberán localizarse a una distancia prudente según los alcances del río.
Por su parte, el director de Gestión de Riesgos de la Gobernación, Ember Montellanos, indicó que la propuesta no es viable porque las familias indígenas vivieron en esa zona “desde siempre” y trasladarlas es ir en contra de su cultura. Lo que se debe hacer, según la autoridad, reforzar las actividades de precaución y de monitoreo para conocer el curso y el cause del río.
De acuerdo al Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) existen altas probabilidades de lluvias entre el jueves y el domingo próximo en la cuenca alta. “No es posible estimar los montos, pero aparentemente entre esos días los montos acumulados podrían ser altos; lo que significa que por lo menos se mantendrán niveles de alerta naranja en toda la cuenca”, informó el representante del Sistema de Alerta Pilcomayo-Gran Chaco (PROADAPT), Luis María de la Cruz.
El Centro de Operaciones de Emergencia (COE) municipal de Yacuiba y Villa Montes se activó después de los reportes de las comunidades de la cuenca baja. Los niveles de la cuenca hasta el lunes por la tarde en las afluentes del San Juan del Oro y Pilaya están en alerta roja con un nivel de 3,50 metros. El Puente a las 12.00 horas registró 3,40 metros; a las 18:00 3,25 metros en bajante.
Los niveles altos de la Cuenca del San Juan del Oro permiten prever que se mantendrán niveles más o menos estables y altos en Puente Aruma y Villa Montes por lo menos durante las próximas 24 a 36 horas. Sin embargo, debe mantenerse el estado de alerta y vigilancia en la cuenca baja durante toda la semana; ya que persistirán los desbordes y desmoronamientos de barrancas.
Villa Montes continúa en alerta roja por la riada
La responsable de Comunicación y Prensa de Gran Chaco PROADAPT y Nativa, Inga Olmos, indicó que en las comunidades de D’Orbigny y Crevaux se presentaron autoridades de Villa Montes para hacer la inspección correspondiente y descartar perdidas mayores. El Pilcomayo traspasó el límite de la barrera y se estima que por la noche el río se desborde hacia las viviendas, pero esta información deberá ser corroborada por la mañana del martes.
El desborde del Pilcomayo es un asunto recurrente y de interés internacional. Atraviesa Bolivia, Argentina y Paraguay y cuando llega una crecida -como la de este año en el Puente Aruma-puede subir hasta los 9.60 metros de altura. Las familias que habitan en la ribera son indígenas y viven en casas precarias, con lo suficiente para sobrevivir. La pesca es su principal actividad económica y también su forma de subsistir porque no hay cultivos alrededor.
Sin embargo, en la época de lluvia el río Pilcomayo crece y arrastra piedras, árboles y todo lo que se encuentre en su camino. Es por eso que se deben activar mecanismos de alerta para que las familias que se localizan en los puntos de mayor riesgo como: La Mora, D’Orbigny y Crevaux, sean reubicadas hasta que el cauce baje. En las peores etapas, los comunarios exponen su salud con enfermedades respiratorias y diarreas.
Márquez explicó que si bien las autoridades municipales y departamentales están realizando las acciones necesarias para la evacuación de las comunidades se requiere de una solución definitiva. Una posible solución es la construcción de viviendas para que las familias que corran mayor riesgo, es decir las que se encuentren al borde del Pilcomayo, puedan trasladarse y tener una calidad de vida mejor y segura. Las nuevas familias deberán localizarse a una distancia prudente según los alcances del río.
Por su parte, el director de Gestión de Riesgos de la Gobernación, Ember Montellanos, indicó que la propuesta no es viable porque las familias indígenas vivieron en esa zona “desde siempre” y trasladarlas es ir en contra de su cultura. Lo que se debe hacer, según la autoridad, reforzar las actividades de precaución y de monitoreo para conocer el curso y el cause del río.
De acuerdo al Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) existen altas probabilidades de lluvias entre el jueves y el domingo próximo en la cuenca alta. “No es posible estimar los montos, pero aparentemente entre esos días los montos acumulados podrían ser altos; lo que significa que por lo menos se mantendrán niveles de alerta naranja en toda la cuenca”, informó el representante del Sistema de Alerta Pilcomayo-Gran Chaco (PROADAPT), Luis María de la Cruz.
El Centro de Operaciones de Emergencia (COE) municipal de Yacuiba y Villa Montes se activó después de los reportes de las comunidades de la cuenca baja. Los niveles de la cuenca hasta el lunes por la tarde en las afluentes del San Juan del Oro y Pilaya están en alerta roja con un nivel de 3,50 metros. El Puente a las 12.00 horas registró 3,40 metros; a las 18:00 3,25 metros en bajante.
Los niveles altos de la Cuenca del San Juan del Oro permiten prever que se mantendrán niveles más o menos estables y altos en Puente Aruma y Villa Montes por lo menos durante las próximas 24 a 36 horas. Sin embargo, debe mantenerse el estado de alerta y vigilancia en la cuenca baja durante toda la semana; ya que persistirán los desbordes y desmoronamientos de barrancas.
Villa Montes continúa en alerta roja por la riada
La responsable de Comunicación y Prensa de Gran Chaco PROADAPT y Nativa, Inga Olmos, indicó que en las comunidades de D’Orbigny y Crevaux se presentaron autoridades de Villa Montes para hacer la inspección correspondiente y descartar perdidas mayores. El Pilcomayo traspasó el límite de la barrera y se estima que por la noche el río se desborde hacia las viviendas, pero esta información deberá ser corroborada por la mañana del martes.