La vena literaria de Atiliano Auza se expresa en “Místicas Dispersas”
Con su mejor vocación de escritor, el musicólogo, violinista, compositor e investigador de la música boliviana, el maestro Atiliano Auza León presentó su último libro que recorre y pone en escena diversos hechos que consideró trascendentales y que lleva el título “Místicas...



Con su mejor vocación de escritor, el musicólogo, violinista, compositor e investigador de la música boliviana, el maestro Atiliano Auza León presentó su último libro que recorre y pone en escena diversos hechos que consideró trascendentales y que lleva el título “Místicas Dispersas”.
Se trata de una recopilación de artículos, ensayos y disertaciones sobre el acontecer cultural y artístico musical de casi medio siglo transcurrido. En los textos se trasluce cómo concibe la música. Auza explicó que el título responde a “la teología que trata de la vida espiritual de la humanidad completa”.
Inspiración
Para su escritura y “repasar lo andado”, tuvo como referente, por ejemplo a Ignacio José Prudencio Bustillo, autor del siglo pasado que falleció a los 33 años y que publicó el libro “Páginas Dispersas” en el que expone diversos temas, pero conectados a través del interés que presenta cada artículo, que no son muy largos.
Contó que también se inspiró en el libro “Música y Músicos bolivianos, II parte, Ópera en el Real Teatro de Madrid” de María Teresa de Stahlie, en la compilación de ensayos, prólogos y artículos “Bolivianos sin hado propicio” de Mariano Baptista Gumucio y en “Rastrojo de Lecturas y Obituarios” de Heberto Arduz Ruiz.
Ellos aluden que el artista, el escritor, en nuestro medio –sostuvo-, si no es mal visto es maltratado, mal pagado, a menos que tenga alguna herencia o propiedad o asuma un cargo público que lo pueda sostener porque no ganan ni un centavo con su obra.
[caption id="attachment_220075" align="alignnone" width="1944"] Portada del libro de Auza[/caption]
En el texto también propone revisar las biografías de músicos como Simeón Roncal, Gilberto Rojas y otros que fueron populares, semiclásicos, folcloristas de cierto nivel que “vale la pena recordarlos”. Puntualizó que en Tarija tenemos a virtuosos como Nilo Soruco y Hugo Monzón.
El libro contiene capítulos dedicados a una diversidad de temas, por ejemplo la creación del Himno Nacional, la Musicoterapia, relatos sobre personajes como Gaius Cilnius Maecenas, que dio origen al término “mecenas” para referirse a quienes fomentan económicamente la producción artística y la enseñanza del “Trivium y “Quadrivium” en el época medieval.
El texto es un paseo por la cultura diversa que posee Auza, aborda indistintamente temas como el Ensamble Moxos, la música barroca de los siglos XVII y XVIII, breves semblanzas de compositores como el norteamericano Aaron Copland y el argentino Alberto Ginastera, y evoca a autores como Humberto Viscarra Monje, Antonio Ibañez y otros.
Busca develar el espíritu de la Novena Sinfonía de Ludwig van Beethoven y en un magistral capítulo aborda la ópera en Bolivia y a continuación, en un pincelazo, describe el argumento de su obra musical máxima, “Incallajta”.
Al final de la obra brinda un listado de las 26 composiciones musicales que realizó, los nueve libros que escribió sobre teoría musical y las 15 partituras publicadas
Recorrido
El inicio de su carrera musical surge cuando se matriculó en la Academia de Música de la Sociedad Filarmónica de Sucre, luego egresó como profesor de música y canto de la Escuela Nacional de Maestros.
Auza León publicó a partir de 1967 su primer libro sobre la dinámica musical en Bolivia, aunque en 1959 lanzó el tomo de Ramillete Sonoro en la Récord Americana de Buenos Aires, en Argentina. También fue fundador del Colegio San Bernardo en la ciudad de Tarija, lugar donde además dirigió el Coro de la Universidad Juan Misael Saracho. En 1964 ganó el Premio Nacional de Música de Luzmila Patiño Entre 1965 y 1966 fue becado al Instituto Torcuato Di Tella, Centro Latinoamericano de Altos Estudios Musicales, en Buenos Aires, Argentina. También fue autor del libro Dinámica musical en Bolivia y fue profesor de armonía y coros de la Escuela Nacional de Maestros de Sucre, entre otras funciones.
El escritor René Aguilera Fierro, detalla que Auza León, es el autor con mayor experiencia en el campo musical e investigativo, los méritos de docente, escritor y músico, se los ganó palmo a palmo, a puro pulmón, entregándose a la docencia, ejecución, dirección y a la composición, en su tierra natal Sucre y la propia ciudad de Tarija, donde tiene su hogar y residencia permanente.
Nació en Sucre el 5 de octubre de 1928, paralelamente a su trabajo, encaró su posición de músico con autenticidad, buscó en la creatividad la expresión artística del tarijeño, de la propia historia, aquello que palpan sus sentimientos, es el artista cauteloso que indaga, propone y entrega sus obras.
Rompió los moldes tradicionales de escolaridad, no consagró su tiempo a repetir, su posición de creador musical produjo célebres obras para el país y el mundo. Lastimosamente, la bibliografía referida a la historia de la música es escasa en Bolivia y, la existente, es importante para revalorizar nuestro patrimonio cultural.
Sorteando una serie de vicisitudes ha publicado: Dinámica Musical en Bolivia; Música contemporánea; Historia de la Música Boliviana; Seis Danzas Bolivianas; Ramillete Sonoro (tres tomos); Música Moderna para piano; Música Coral; Los Chunchos (Sonata para piano); Anfiblástula (Sonata para piano); Homenaje a Cesar Frank (Sonata para violín y piano); Música de Cámara, Concierto para violín y orquesta; Estructuras para orquesta; Incallajta (Opera en tres actos); Oda al Moto Méndez (Cantata para coros, orquesta y narrador); Divertimiento para charango, guitarra y orquesta; Sinfonía Boliviana; Khipus para violín y piano; Simbiosis Cultural de la Música Boliviana; Cimas de Sucre y Un Cuarteto de Cuerdas entre otras.
Además, cuenta en su haber con un sinnúmero de interpretaciones y conciertos ofrecidos por el autor en La Paz y el interior del país. Referentes a premios y distinciones han sido varios los eventos nacionales que le han otorgado los primeros puestos, lo que le ha permitido consagrarse internacionalmente, tal es así que figura en el “Diccionario Bibliográfico de Compositores Latinoamericanos”; sus obras son ejecutadas en distintos países del orbe.
Sus libros son conocidos en los principales centros de enseñanza musical de Bolivia, son textos de consulta obligada por docentes del área, obras que enorgullecen a la literatura americana por su proyección continental. El autor indica que su obra, se trata solamente de un esbozo histórico, sin embargo, la extracción genética del libro, nos remonta un poco más allá de los vértices de la música tarijeña.
[caption id="attachment_220076" align="alignnone" width="550"] Imagen actual de Incallajta en Cochabamba[/caption]
Se trata de una recopilación de artículos, ensayos y disertaciones sobre el acontecer cultural y artístico musical de casi medio siglo transcurrido. En los textos se trasluce cómo concibe la música. Auza explicó que el título responde a “la teología que trata de la vida espiritual de la humanidad completa”.
Inspiración
Para su escritura y “repasar lo andado”, tuvo como referente, por ejemplo a Ignacio José Prudencio Bustillo, autor del siglo pasado que falleció a los 33 años y que publicó el libro “Páginas Dispersas” en el que expone diversos temas, pero conectados a través del interés que presenta cada artículo, que no son muy largos.
Contó que también se inspiró en el libro “Música y Músicos bolivianos, II parte, Ópera en el Real Teatro de Madrid” de María Teresa de Stahlie, en la compilación de ensayos, prólogos y artículos “Bolivianos sin hado propicio” de Mariano Baptista Gumucio y en “Rastrojo de Lecturas y Obituarios” de Heberto Arduz Ruiz.
Ellos aluden que el artista, el escritor, en nuestro medio –sostuvo-, si no es mal visto es maltratado, mal pagado, a menos que tenga alguna herencia o propiedad o asuma un cargo público que lo pueda sostener porque no ganan ni un centavo con su obra.
[caption id="attachment_220075" align="alignnone" width="1944"] Portada del libro de Auza[/caption]
En el texto también propone revisar las biografías de músicos como Simeón Roncal, Gilberto Rojas y otros que fueron populares, semiclásicos, folcloristas de cierto nivel que “vale la pena recordarlos”. Puntualizó que en Tarija tenemos a virtuosos como Nilo Soruco y Hugo Monzón.
El libro contiene capítulos dedicados a una diversidad de temas, por ejemplo la creación del Himno Nacional, la Musicoterapia, relatos sobre personajes como Gaius Cilnius Maecenas, que dio origen al término “mecenas” para referirse a quienes fomentan económicamente la producción artística y la enseñanza del “Trivium y “Quadrivium” en el época medieval.
El texto es un paseo por la cultura diversa que posee Auza, aborda indistintamente temas como el Ensamble Moxos, la música barroca de los siglos XVII y XVIII, breves semblanzas de compositores como el norteamericano Aaron Copland y el argentino Alberto Ginastera, y evoca a autores como Humberto Viscarra Monje, Antonio Ibañez y otros.
Busca develar el espíritu de la Novena Sinfonía de Ludwig van Beethoven y en un magistral capítulo aborda la ópera en Bolivia y a continuación, en un pincelazo, describe el argumento de su obra musical máxima, “Incallajta”.
Al final de la obra brinda un listado de las 26 composiciones musicales que realizó, los nueve libros que escribió sobre teoría musical y las 15 partituras publicadas
Recorrido
El inicio de su carrera musical surge cuando se matriculó en la Academia de Música de la Sociedad Filarmónica de Sucre, luego egresó como profesor de música y canto de la Escuela Nacional de Maestros.
Auza León publicó a partir de 1967 su primer libro sobre la dinámica musical en Bolivia, aunque en 1959 lanzó el tomo de Ramillete Sonoro en la Récord Americana de Buenos Aires, en Argentina. También fue fundador del Colegio San Bernardo en la ciudad de Tarija, lugar donde además dirigió el Coro de la Universidad Juan Misael Saracho. En 1964 ganó el Premio Nacional de Música de Luzmila Patiño Entre 1965 y 1966 fue becado al Instituto Torcuato Di Tella, Centro Latinoamericano de Altos Estudios Musicales, en Buenos Aires, Argentina. También fue autor del libro Dinámica musical en Bolivia y fue profesor de armonía y coros de la Escuela Nacional de Maestros de Sucre, entre otras funciones.
El escritor René Aguilera Fierro, detalla que Auza León, es el autor con mayor experiencia en el campo musical e investigativo, los méritos de docente, escritor y músico, se los ganó palmo a palmo, a puro pulmón, entregándose a la docencia, ejecución, dirección y a la composición, en su tierra natal Sucre y la propia ciudad de Tarija, donde tiene su hogar y residencia permanente.
Nació en Sucre el 5 de octubre de 1928, paralelamente a su trabajo, encaró su posición de músico con autenticidad, buscó en la creatividad la expresión artística del tarijeño, de la propia historia, aquello que palpan sus sentimientos, es el artista cauteloso que indaga, propone y entrega sus obras.
Rompió los moldes tradicionales de escolaridad, no consagró su tiempo a repetir, su posición de creador musical produjo célebres obras para el país y el mundo. Lastimosamente, la bibliografía referida a la historia de la música es escasa en Bolivia y, la existente, es importante para revalorizar nuestro patrimonio cultural.
Sorteando una serie de vicisitudes ha publicado: Dinámica Musical en Bolivia; Música contemporánea; Historia de la Música Boliviana; Seis Danzas Bolivianas; Ramillete Sonoro (tres tomos); Música Moderna para piano; Música Coral; Los Chunchos (Sonata para piano); Anfiblástula (Sonata para piano); Homenaje a Cesar Frank (Sonata para violín y piano); Música de Cámara, Concierto para violín y orquesta; Estructuras para orquesta; Incallajta (Opera en tres actos); Oda al Moto Méndez (Cantata para coros, orquesta y narrador); Divertimiento para charango, guitarra y orquesta; Sinfonía Boliviana; Khipus para violín y piano; Simbiosis Cultural de la Música Boliviana; Cimas de Sucre y Un Cuarteto de Cuerdas entre otras.
Además, cuenta en su haber con un sinnúmero de interpretaciones y conciertos ofrecidos por el autor en La Paz y el interior del país. Referentes a premios y distinciones han sido varios los eventos nacionales que le han otorgado los primeros puestos, lo que le ha permitido consagrarse internacionalmente, tal es así que figura en el “Diccionario Bibliográfico de Compositores Latinoamericanos”; sus obras son ejecutadas en distintos países del orbe.
Sus libros son conocidos en los principales centros de enseñanza musical de Bolivia, son textos de consulta obligada por docentes del área, obras que enorgullecen a la literatura americana por su proyección continental. El autor indica que su obra, se trata solamente de un esbozo histórico, sin embargo, la extracción genética del libro, nos remonta un poco más allá de los vértices de la música tarijeña.
[caption id="attachment_220076" align="alignnone" width="550"] Imagen actual de Incallajta en Cochabamba[/caption]