Juan XXIII fascinó con sus miniaturas de Santa Anita
Los vecinos del barrio Juan XXIII, la mañana del domingo 22 de julio, se dieron cita en la avenida Monseñor Fond, donde se concentró la feria de Santa Sanita, un evento que reunió a más de un centenar de pequeños expositores. Los habitantes de la zona asentaron sus puestos, cada uno con sus...



Los vecinos del barrio Juan XXIII, la mañana del domingo 22 de julio, se dieron cita en la avenida Monseñor Fond, donde se concentró la feria de Santa Sanita, un evento que reunió a más de un centenar de pequeños expositores. Los habitantes de la zona asentaron sus puestos, cada uno con sus propias características según los productos que tenían para ofrecer.
Los diferentes platos típicos servidos en platos pequeñitos, masitas en miniatura, hamburguesitas, empanaditas, gelatinas en pocillos diminutos y tortas de todos los colores fueron los que primaron a simple vista y trascendían los aromas que invitaban a los espectadores a probar más de un bocado. Si bien la diversidad gastronómica fue la protagonista, muchos vecinos se quejaron debido a que los precios no eran tan diminutos como los bocados.
La ropa en miniatura y los objetos pequeños a escala también fueron los más requeridos por los niños, pero se pudo notar que ya no son los protagonistas de la feria, pues los juguetes chinos o los que regularmente se los puede adquirir en cualquier feria eran parte de la exposición. Una de las ideas innovadoras que ofrecieron fue la suerte sin blanca de plantas. Varios vendedores de flores, cactus, helechos y plantas aromáticas pusieron un número a cada espécimen y los sortearon en rifas de hasta 5 bolivianos.
Las alcancías en forma de cerdos, perros y otros animales hechos de yeso y coloreados con pigmentos muy reconocidos por las anteriores generaciones aun permanecían en los stands, así como los víveres pequeños o los ladrillitos y material de construcción. Los vecinos no dejaron a un lado ofrecer productos de interés variado, casi en su mayoría realizados por ellos mismos, como collares, aros, macetas pintadas con mandalas y cactus pintados en piedras alargadas.
La Santa Anita en la tradicional calle Cochabamba se realizará a partir del jueves 26 de julio y para eso la secretaria de Turismo y Cultura de la Alcaldía, Gabriela Pacello, señaló que se quiere recuperar las tradiciones y hacer el intercambio de comida y productos con botones para Santa Anita.
“Me complace de gran manera poder realizar este lanzamiento, porque es una de las festividades más importantes en nuestra ciudad, una gran fiesta religiosa cultural que alberga a todos los miembros de las familias y son protagonistas nuestros niños y es por eso que en el Municipio estamos haciendo enormes esfuerzos para poder preservar y fortalecer las tradiciones que enmarcan esta fiesta de Santa Anita”, manifestó.
Variedad en la santa anita del barrio juan xxiii
Miniaturas
Los niños se concentraron en los juguetes en miniatura, los víveres pequeños, los materiales de construcción y en objetos en escala como canastas, libros, camiones, muñecas, ropa, entre otros. Sin embargo, los adultos también buscaron los famosos documentos en miniatura.
En familia
Las familias aprovecharon para pasar un rato juntos, mientras realizaban actividades provechosas para su economía y para compartir con los vecinos. Tal es el caso de la Familia Ugarte Baldivieso que preparó comida rápida pequeña con la ayuda de su hijo Eduardito.
Ecológicas
La suerte sin blanca de las plantas también llamó la atención de los vecinos más ecológicos y apostaron para poder adquirir los especímenes más requeridos, entre ellos las hortensias, las rosas, los claveles y los jazmines. Otros esperaron la llegada de cactus con diferentes formas y tamaños.
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Los diferentes platos típicos servidos en platos pequeñitos, masitas en miniatura, hamburguesitas, empanaditas, gelatinas en pocillos diminutos y tortas de todos los colores fueron los que primaron a simple vista y trascendían los aromas que invitaban a los espectadores a probar más de un bocado. Si bien la diversidad gastronómica fue la protagonista, muchos vecinos se quejaron debido a que los precios no eran tan diminutos como los bocados.
La ropa en miniatura y los objetos pequeños a escala también fueron los más requeridos por los niños, pero se pudo notar que ya no son los protagonistas de la feria, pues los juguetes chinos o los que regularmente se los puede adquirir en cualquier feria eran parte de la exposición. Una de las ideas innovadoras que ofrecieron fue la suerte sin blanca de plantas. Varios vendedores de flores, cactus, helechos y plantas aromáticas pusieron un número a cada espécimen y los sortearon en rifas de hasta 5 bolivianos.
Las alcancías en forma de cerdos, perros y otros animales hechos de yeso y coloreados con pigmentos muy reconocidos por las anteriores generaciones aun permanecían en los stands, así como los víveres pequeños o los ladrillitos y material de construcción. Los vecinos no dejaron a un lado ofrecer productos de interés variado, casi en su mayoría realizados por ellos mismos, como collares, aros, macetas pintadas con mandalas y cactus pintados en piedras alargadas.
La Santa Anita en la tradicional calle Cochabamba se realizará a partir del jueves 26 de julio y para eso la secretaria de Turismo y Cultura de la Alcaldía, Gabriela Pacello, señaló que se quiere recuperar las tradiciones y hacer el intercambio de comida y productos con botones para Santa Anita.
“Me complace de gran manera poder realizar este lanzamiento, porque es una de las festividades más importantes en nuestra ciudad, una gran fiesta religiosa cultural que alberga a todos los miembros de las familias y son protagonistas nuestros niños y es por eso que en el Municipio estamos haciendo enormes esfuerzos para poder preservar y fortalecer las tradiciones que enmarcan esta fiesta de Santa Anita”, manifestó.
Variedad en la santa anita del barrio juan xxiii
Miniaturas
Los niños se concentraron en los juguetes en miniatura, los víveres pequeños, los materiales de construcción y en objetos en escala como canastas, libros, camiones, muñecas, ropa, entre otros. Sin embargo, los adultos también buscaron los famosos documentos en miniatura.
En familia
Las familias aprovecharon para pasar un rato juntos, mientras realizaban actividades provechosas para su economía y para compartir con los vecinos. Tal es el caso de la Familia Ugarte Baldivieso que preparó comida rápida pequeña con la ayuda de su hijo Eduardito.
Ecológicas
La suerte sin blanca de las plantas también llamó la atención de los vecinos más ecológicos y apostaron para poder adquirir los especímenes más requeridos, entre ellos las hortensias, las rosas, los claveles y los jazmines. Otros esperaron la llegada de cactus con diferentes formas y tamaños.
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