Sin mercados, Gazprom quiere duplicar producción en Bolivia
El ministro de Hidrocarburos boliviano, Luis Alberto Sánchez, espera concretar hoy las previsiones de negocio de Gazprom que el presidente ruso Vladimir Putin anunció ayer en la recepción con el presidente Evo Morales. Según Putin, se prevé duplicar la extracción de gas en los dos campos...



El ministro de Hidrocarburos boliviano, Luis Alberto Sánchez, espera concretar hoy las previsiones de negocio de Gazprom que el presidente ruso Vladimir Putin anunció ayer en la recepción con el presidente Evo Morales. Según Putin, se prevé duplicar la extracción de gas en los dos campos que explota, Aquio e Incahuasi, y que pasan por ser los de más expectativa reciente han generado. La previsión extractiva actual es de unos 6-7 millones de metros cúbicos al día y se pretende que alcance los 12 lo que lo convertiría en el mayor campo de Bolivia después de Margarita superando a San Antonio y San Alberto, en franca declinación.
El presidente ruso no habló de plazos, asuntos que se deberían resolver en la reunión anunciada por el Ministerio para hoy con los representantes de la empresa rusa.
Mientras tanto siguen sin concretarse si cambiarán o no cambiarán los términos del contrato de exportación de gas a la Argentina, el Ministro de Energía del vecino país, Juan José Aranguren, en la previa a la cumbre de ministro del área pertenecientes al G20, indicó que las previsiones son que el consumo de energía de la sociedad argentina baje un 10 por ciento en los próximos 12 años. El funcionario del área también apuesta a que en un corto plazo el sector energético vuelva a exportar al mundo gracias a los volúmenes crecientes de producción que ofrece Vaca Muerta.
¿Producir para qué?
El ministro argentino lo tiene claro, el objetivo es que Argentina vuelva a exportar gas al mercado internacional a través de los proyectos de Gas Natural licuado (GNL), en Bolivia se anuncian proyectos para incrementar la producción sin tener claro cuál será su destino.
“La previsión es que la Argentina sea capaz de dar energía a mayor volumen que aquella que estamos importando a partir del desarrollo principalmente de la formaciones rocosas tanto como Vaca Muerta y otras que tenemos en el país, que nos dan ese aporte de recursos por métodos no convencionales”, indicó Aranguren. “Estamos convencidos de que ese es el camino, de que con ese objetivo vamos a poder reducir la importación de energía”, agregó.
Argentina propuso en pasadas semanas incrementar el precio del gas importado en invierno a cambio de reducir el volumen importado en verano, una propuesta que afectaría al equilibrio en las cuentas bolivianas y en su producción.
Actualmente el país produce unos 60 millones de metros cúbicos de gas al día que distribuye entre el mercado interno y la exportación. En Bolivia se quedan unos 14 millones de metro cúbicos mientras que Brasil tiene capacidad despedir, por contrato, hasta 30,5 millones de metros cúbicos y Argentina más de 20. Si todos pidieran el máximo no habría capacidad para abastecer, sin embargo Brasil lleva meses pidiendo el mínimo de 24 e incluso menos por decisiones particularmente políticas.
En 2019 concluye el contrato de exportación con Brasil y la expectativa es conseguir enganchar nuevos contratos con el vecino país pero ya no a través de Petrobras y con un contrato de larga duración sino a través de contratos cortos y precios variables. Los expertos indican que se lograría alcanzar la mitad de lo que actualmente se envía, es decir, unos 15 millones de metros cúbicos.
Argentina debe comprar hasta 2026 27 millones de metros cúbicos, por lo que todavía quedaría un porcentaje excedente que no se utilizaría, al haber demorado o fracasado en la consecución de algunos proyectos.
Es el caso del proyecto petroquímico de polipropileno de Yacuiba que debía haberse instalado hasta 2018 según la hoja de ruta de la nacionalización de 2006 y que sin embargo no se espera hasta el año 2023, como pronto, según información oficial del Ministro Luis Alberto Sánchez.
El Ministerio de Hidrocarburos tampoco ha llegado a materializar el proyecto ya diagramado en las cumbres bilaterales con Perú. Durante la gestión de Ollanta Humala se trazó la posibilidad de conectar ductos de Bolivia con Perú para alcanzar las plantas de GNL y competir así en el mercado mundial. Las últimas noticias referidas al tema por parte de YPFBH hablaban de un proyecto en estudio para tender ductos hasta Ilo, la costa cedida para uso boliviano en Perú, construir allí la planta de GNL, e iniciar en solitario la comercialización.
Expectativas por el apoyo al GNV
“La relación entre los presidentes Morales y Putin y la relación entre YPFB, Gazprom y Acron hace que se pueda consolidar mayores inversiones extranjeras en Bolivia” dijo el ministro Sánchez que informó que hoy jueves se desarrollará el encuentro del presidente Morales con los ejecutivos de las firmas Gazprom y Acron para la consolidación de inversiones por parte de estas empresas en Bolivia.
Se prevé que en el encuentro de este jueves se aborde con la firma Gazprom, el cambio de matriz energética vehicular en Bolivia, e inversiones en exploración y explotación de hidrocarburos. Asimismo, acuerdos muy importantes con la empresa de fertilizantes Acron.
El presidente ruso no habló de plazos, asuntos que se deberían resolver en la reunión anunciada por el Ministerio para hoy con los representantes de la empresa rusa.
Mientras tanto siguen sin concretarse si cambiarán o no cambiarán los términos del contrato de exportación de gas a la Argentina, el Ministro de Energía del vecino país, Juan José Aranguren, en la previa a la cumbre de ministro del área pertenecientes al G20, indicó que las previsiones son que el consumo de energía de la sociedad argentina baje un 10 por ciento en los próximos 12 años. El funcionario del área también apuesta a que en un corto plazo el sector energético vuelva a exportar al mundo gracias a los volúmenes crecientes de producción que ofrece Vaca Muerta.
¿Producir para qué?
El ministro argentino lo tiene claro, el objetivo es que Argentina vuelva a exportar gas al mercado internacional a través de los proyectos de Gas Natural licuado (GNL), en Bolivia se anuncian proyectos para incrementar la producción sin tener claro cuál será su destino.
“La previsión es que la Argentina sea capaz de dar energía a mayor volumen que aquella que estamos importando a partir del desarrollo principalmente de la formaciones rocosas tanto como Vaca Muerta y otras que tenemos en el país, que nos dan ese aporte de recursos por métodos no convencionales”, indicó Aranguren. “Estamos convencidos de que ese es el camino, de que con ese objetivo vamos a poder reducir la importación de energía”, agregó.
Argentina propuso en pasadas semanas incrementar el precio del gas importado en invierno a cambio de reducir el volumen importado en verano, una propuesta que afectaría al equilibrio en las cuentas bolivianas y en su producción.
Actualmente el país produce unos 60 millones de metros cúbicos de gas al día que distribuye entre el mercado interno y la exportación. En Bolivia se quedan unos 14 millones de metro cúbicos mientras que Brasil tiene capacidad despedir, por contrato, hasta 30,5 millones de metros cúbicos y Argentina más de 20. Si todos pidieran el máximo no habría capacidad para abastecer, sin embargo Brasil lleva meses pidiendo el mínimo de 24 e incluso menos por decisiones particularmente políticas.
En 2019 concluye el contrato de exportación con Brasil y la expectativa es conseguir enganchar nuevos contratos con el vecino país pero ya no a través de Petrobras y con un contrato de larga duración sino a través de contratos cortos y precios variables. Los expertos indican que se lograría alcanzar la mitad de lo que actualmente se envía, es decir, unos 15 millones de metros cúbicos.
Argentina debe comprar hasta 2026 27 millones de metros cúbicos, por lo que todavía quedaría un porcentaje excedente que no se utilizaría, al haber demorado o fracasado en la consecución de algunos proyectos.
Es el caso del proyecto petroquímico de polipropileno de Yacuiba que debía haberse instalado hasta 2018 según la hoja de ruta de la nacionalización de 2006 y que sin embargo no se espera hasta el año 2023, como pronto, según información oficial del Ministro Luis Alberto Sánchez.
El Ministerio de Hidrocarburos tampoco ha llegado a materializar el proyecto ya diagramado en las cumbres bilaterales con Perú. Durante la gestión de Ollanta Humala se trazó la posibilidad de conectar ductos de Bolivia con Perú para alcanzar las plantas de GNL y competir así en el mercado mundial. Las últimas noticias referidas al tema por parte de YPFBH hablaban de un proyecto en estudio para tender ductos hasta Ilo, la costa cedida para uso boliviano en Perú, construir allí la planta de GNL, e iniciar en solitario la comercialización.
Expectativas por el apoyo al GNV
“La relación entre los presidentes Morales y Putin y la relación entre YPFB, Gazprom y Acron hace que se pueda consolidar mayores inversiones extranjeras en Bolivia” dijo el ministro Sánchez que informó que hoy jueves se desarrollará el encuentro del presidente Morales con los ejecutivos de las firmas Gazprom y Acron para la consolidación de inversiones por parte de estas empresas en Bolivia.
Se prevé que en el encuentro de este jueves se aborde con la firma Gazprom, el cambio de matriz energética vehicular en Bolivia, e inversiones en exploración y explotación de hidrocarburos. Asimismo, acuerdos muy importantes con la empresa de fertilizantes Acron.