Álvaro Márquez y Daniela Romero: los alfajores como cultura
El éxito de su marca les significó pedidos en el plano nacional



Los alfajores representan toda una cultura para Álvaro Márquez, una esencia por la cual en la pandemia se obsesionó con ellos y junto a Daniela Romero, su esposa, decidieron emprender con sus propios alfajores artesanales. Álvaro es ingeniero mecánico, mientras que Daniela, administradora de empresas, pero, entre todas las cosas que comparten y que los une, su marca “Chocolate y canela” es en lo que centraron sus fuerzas los últimos meses.
Aunque la idea de crear un negocio nació durante la pandemia por covid-19, Álvaro ya arrastraba por años un intenso gusto por los alfajores. “Siempre me han gustado, desde niño. Era lo primero que comía en los recreos”, recuerda. Con la cuarentena rígida privándolo de poder adquirir alfajores, Álvaro empezó a plantearse la idea de hacerlos en casa, pues la cocina también era algo que le llamaba la atención.
Primero con una receta familiar se puso manos a la obra para lograr ese alfajor que buscaba y de a poco se fue obsesionando con la idea, en un sentido positivo para él. Así empezó a adentrarse en la “cultura de los alfajores” como él la identifica. Explica que es toda una cultura porque los alfajores, sobre todo en Argentina, forman parte de los pequeños momentos especiales de un día cotidiano. “Son un snack dulce que se come con un café o mate; junto a amigos o la familia; en casa o cuando se sale”, así comenta todo lo que estos productos implican para él.
“Los alfajores combinan con todo”.
Con el paso de los días fue probando nuevas recetas. A su entorno cercano le gustaban sus alfajores y se lo hacían saber, por ello nació la idea de crear un negocio en torno a su pasión. Junto a Daniela empezaron a idear el proyecto, buscar la receta perfecta y la presentación ideal.
Por un mes trabajaron por balancear todos los aspectos que consideraban importantes: sabor, textura y presentación. Cuando por fin lo lograron, les tocó definir los roles. Aunque ninguna tarea está asilada del otro, Álvaro se centra en la cocina, mientras que Daniela, en la administración y empaquetación. Ella, entre risas, dice que tienen métodos de trabajo muy distintos, por lo que dividen así las tareas.
“Chocolate y canela” tiene tres principales alfajores: los de dulce de leche, mousse de café y mousse de chocolate amargo. Según el tamaño la unidad tiene un precio de Bs. 4.50 o Bs. 6. Actualmente trabajan en la implementación de una nueva fábrica en casa para “Chocolate y canela”.