Bianca Monje: “Hay que cuidar nuestra piel como nos cuidamos por dentro”
Bianca crea jabones naturales para el cuidado de la piel.



El esperar a su primera bebé conllevó nuevos cambios y perspectivas para Bianca Belén Monje Yañez. Uno de ellos fue el ser consciente de las maneras en las que cuidaba su salud. A causa de eso se interesó por la cosmética natural y empezó un camino de investigación y aprendizaje para poder implementarla en su día a día. Más tarde, se daría cuenta de las chances que tenía para emprender en Tarija con todo aquello que había descubierto.
Bianca tiene 21 años y lo que motivó su interés por los productos naturales fueron los cambios que el embarazo causaba en su cuerpo. Explica que, además de combatir las estrías y el acné, supo que, si se cuidaba por dentro, también debía hacerlo por fuera. Con la intención de evitar los químicos de algunos productos comerciales descubrió la cosmética natural. Sin embargo, no pudo encontrarla en Tarija, solo a pedido desde otros departamentos.
Pero con todo el contenido que Bianca encontró en internet supo que podía crear sus propios cosméticos. Así se embarcó en un proceso de dos meses de estudio y experimentación. Si bien sí tenía la información y teoría en internet, los ensayos y primeros intentos le presentaron muchas dificultades. Ella eligió trabajar en un inicio con jabones faciales y corporales, por lo que tuvo que aprender a manipular glicerina y aceites esenciales. Al inicio desperdició muchos de sus insumos, pero poco a poco fue dominando la técnica.
Bianca destaca a la higiene del entorno como una clave para crear jabones. Hace un énfasis especial en ese punto pues, si bien se puede trabajar en casa, se debe hacer lejos de niños y animales.
“La cosmética natural está pensada para todas las personas”.
Fue en julio de 2021 que Bianca se animó a crear un emprendimiento en torno a sus jabones. Así decidió bautizar su negocio como “Roma” en honor a los orígenes del jabón en el río Tiber de Roma hace más de 4.500 años, según se tiene registrado. Bianca recuerda que las primeras semanas fueron difíciles por los miedos y frustraciones que la invadían, pero resalta que eso es algo normal a la hora de emprender.
Bianca hace énfasis en que sus productos son para todos, no solo para mujeres.
Una de las ventajas con las que cuenta es que, al ser estudiante de Ingeniería Industrial, pudo aplicar sus conocimientos en procesos y ventas para optimizar tanto la creación como la comercialización de sus productos.
El último orgullo de Bianca es formar parte de la tienda colaborativa Mercadito Creativo, espacio en el que ofrece por primera vez sus productos de forma presencial. Para el futuro espera que Roma cuente con productos de skin care así como con champús y acondicionadores sólidos.