Sergio Martínez y los arándanos de Tarija
Hace 12 años Sergio le presentó a Tarija los arándanos.



Sergio Martínez Calvimontes nació con una atracción especial por el campo y todo lo que abarca. No es casualidad que esté al frente de la empresa que dota de arándanos al departamento y a Bolivia.
Él, ingeniero agrónomo de profesión, nació hace 54 años en Tarija y ya en la infancia comenzó a enamorarse de todo lo relacionado al área rural. “Mi padre compró un terreno en San Lorenzo, donde hizo una viña. Yo era niño y me gustaba mucho acompañarlo. Me encantó el trabajo en el campo”, cuenta Sergio.
Cuando cursaba la secundaria fue que hizo sus primeros ensayos en un invernadero en casa. Cultivaba tomates y zanahorias. Este experimento casero le permitió empezar a lucrar y ganar su propio dinero, una experiencia que destaca. “Fueron épocas de mucho aprendizaje. Vendía en el mercado La Loma y me permitía tener mi plata en un tiempo no muy permisivo”.
Respecto de su amor por el campo, explica: “Lo que más me gusta del campo es la gente. La gente de la ruralidad es noble y trabajadora. Me gustan las plantas, la vida y el aire libre. Soy muy apegado a las cosas biológicas”.
Sergio cuenta que ya desde los 16 años sabía que iba a estudiar Ingeniería Agrónoma. En la universidad pudo profundizar sus conocimientos y aprender que estudiar no es fácil, según cuenta: “Entendí que tenía que estudiar más y buscar oportunidades en el exterior”.
“Tenemos una tierra bendecida. Los arándanos son de gran calidad y no necesitan pesticidas”
Así Sergio comenzó a postular a distintas becas, unas 20 según recuerda. Fueron 2 años de no lograr esa meta, hasta que consiguió una en Bélgica. Ahí se especializó en fitopatología, dice “No se trataba de meterme información a la cabeza, me enseñaron a aprender solo”. Posteriormente se especializó en biotecnología en España.
Ya con todo ese bagaje reinició su carrera laboral en Tarija. Lo hizo primero trabajando con plantaciones de ajo, además de un paso por la docencia. Pero hace 12 años fue que su vida tomó el rumbo actual. Sergio participó de un estudio sobre la viabilidad del cultivo de arándano en Tarija. Lo hizo en 26 parcelas distribuidas por el departamento y con 6 especies distintas de la planta.
Tan buenos fueron los resultados que hoy vive completamente de los arándanos, que distribuye al departamento y al país bajo el nombre comercial de su empresa Frutas de Tarija. Destaca la importancia de su familia, pues esta compone los pilares de la empresa. Y deja un sólido mensaje: “Se puede vivir de la producción agrícola y los emprendimientos familiares”.