Asesinan a dos turistas en las playas de Costa Rica
El pasado no fue un buen fin de semana para el turismo en Costa Rica ya que dos turistas extranjeras fueron asesinadas por asaltantes y una tercera, aunque logró escapar ilesa, tampoco tendrá sus mejores recuerdos del viaje por el país centroamericano. La preocupación de las autoridades...



El pasado no fue un buen fin de semana para el turismo en Costa Rica ya que dos turistas extranjeras fueron asesinadas por asaltantes y una tercera, aunque logró escapar ilesa, tampoco tendrá sus mejores recuerdos del viaje por el país centroamericano.
La preocupación de las autoridades por el incremento en los asaltos y los crímenes es clara, y la están enfrentado con los denominados “mega operativos”, que activan a todos los cuerpos policiales durante una noche, cada dos semanas, para requisar todos los vehículos en sectores conflictivos, y mostrar una mayor presencia en las zonas con mayores índices de criminalidad.
Sin embargo, el ataque a las extranjeras escapa de esas zonas peligrosas. Sucedieron en lugares turísticos, muy alejados del centro del país, precisamente en zonas a las que debe llegarse en lancha o cruzando en el ferry, de allí el temor de que esto vaya a traer alguna repercusión en la imagen del país como destino turístico.
Durante la mañana de este lunes autoridades del Ministerio de Seguridad se encuentran reunidas para analizar, entre otros temas, los ataques a las turistas perpetrados este fin de semana y las posibles acciones a tomar para garantizar mayor seguridad a los visitantes.
La primera víctima del hampa este fin de semana fue una mujer española, de 31 años, identificada como Arantxa López Gutiérrez, quien según el reporte preliminar de las autoridades fue estrangulada en un intento de violación el sábado por la mañana.
Su muerte se dio en un sendero del hotel Laguna Lodge, en Tortuguero, donde se hospedaba junto a su esposo, un guía turístico y ocho turistas europeos más. Esta es una zona paradisíaca en el Caribe del país centroamericano, adonde solo se puede ingresar en lancha mediante los canales marítimos, y ese es uno de sus mayores atractivos, así como su riqueza natural y el ambiente de paz y silencio que lo envuelve.
Esa tranquilidad fue interrumpida por un nicaragüense de apellido Díaz, quien la atacó mientras ella realizaba una caminata matutina por la playa, para disfrutar la belleza del lugar antes de salir con su esposo y el grupo de viajeros europeos rumbo al Parque Nacional Tortuguero.
Walter Espinoza, director del Organismo de Investigación Judicial costarricense, confirmó que la violación parece ser el móvil del crimen, ya que la víctima tenía su ropa interior corrida.
La preocupación de las autoridades por el incremento en los asaltos y los crímenes es clara, y la están enfrentado con los denominados “mega operativos”, que activan a todos los cuerpos policiales durante una noche, cada dos semanas, para requisar todos los vehículos en sectores conflictivos, y mostrar una mayor presencia en las zonas con mayores índices de criminalidad.
Sin embargo, el ataque a las extranjeras escapa de esas zonas peligrosas. Sucedieron en lugares turísticos, muy alejados del centro del país, precisamente en zonas a las que debe llegarse en lancha o cruzando en el ferry, de allí el temor de que esto vaya a traer alguna repercusión en la imagen del país como destino turístico.
Durante la mañana de este lunes autoridades del Ministerio de Seguridad se encuentran reunidas para analizar, entre otros temas, los ataques a las turistas perpetrados este fin de semana y las posibles acciones a tomar para garantizar mayor seguridad a los visitantes.
La primera víctima del hampa este fin de semana fue una mujer española, de 31 años, identificada como Arantxa López Gutiérrez, quien según el reporte preliminar de las autoridades fue estrangulada en un intento de violación el sábado por la mañana.
Su muerte se dio en un sendero del hotel Laguna Lodge, en Tortuguero, donde se hospedaba junto a su esposo, un guía turístico y ocho turistas europeos más. Esta es una zona paradisíaca en el Caribe del país centroamericano, adonde solo se puede ingresar en lancha mediante los canales marítimos, y ese es uno de sus mayores atractivos, así como su riqueza natural y el ambiente de paz y silencio que lo envuelve.
Esa tranquilidad fue interrumpida por un nicaragüense de apellido Díaz, quien la atacó mientras ella realizaba una caminata matutina por la playa, para disfrutar la belleza del lugar antes de salir con su esposo y el grupo de viajeros europeos rumbo al Parque Nacional Tortuguero.
Walter Espinoza, director del Organismo de Investigación Judicial costarricense, confirmó que la violación parece ser el móvil del crimen, ya que la víctima tenía su ropa interior corrida.