Balance en el trabajo y la vida personal

Se sabe que el trabajo es la fuente de recursos monetarios para poder vivir mejor. Sin embargo, cada vez más se nota la dificultad de que los trabajadores puedan conciliar con éxito las demandas laborales y su vida personal. Muchas veces las demandas en los lugares de trabajo se enfocan en tareas y la conclusión exitosa de las mismas en un periodo determinado. Este tiempo de trabajo es normalmente subestimado y esta puede ser la raíz de no poder conciliar un balance entre la vida personal y laboral. Sentir la presión para lograr los objetivos trazados a nivel laboral y terminarlos en el tiempo establecido implica muchas veces llegar a casa después de una jornada laboral a seguir trabajando en lo que se dejó pendiente. La posibilidad de acceder a las oficinas virtuales ha ayudado tremendamente a la efectividad de que puedes trabajar desde casa o cualquier punto en el que te encuentres y los trabajares muchas veces sienten la presión de tener que trabajar.

Si bien hay normas firmadas y acordadas por todos los países ante la Organización Mundial del Trabajo para respetar el balance entre la vida laboral y personal, es cada vez más difícil de lograr. La elevada competitividad en el mercado laboral puede hacer que nos sintamos como seres reemplazables y por ello debemos demostrar que somos eficientes en lo que hacemos. Esto obliga a dejar de lado las cosas importantes en la vida como la familia, el deporte o actividades de recreación.

No obstante, es importante tomar pausas para la autorreflexión y evitar el burnout. La familia es la principal fuente de salud porque puede mitigar el estrés extremo y motivar a la distracción grupal. El mismo rol importante tienen los amigos, el deporte y las actividades de recreación. Si abrimos espacios para el sano esparcimiento, y tratamos de ser conscientes de la importancia de nuestro tiempo a nuestra vida familiar, podremos tratar de encontrar opciones para un mejor balance.

 

*es PhD en economía internacional