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Es inevitable, la cuarta ola está en camino en Bolivia

Según Our World in Data, Bolivia tiene solo 19 por ciento de vacunado con dos inyecciones y 7 por ciento con una inyección. Bolivia sigue en serio peligro de infectarse del COVID-19 y abre la posibilidad a mayores mutaciones. Lamento decir que creo que una cuarta ola de COVID-19 va a ser inevitable. En el caso que Bolivia haya vacunado a la población en riesgo primero, el número de pacientes en hospital y muertos puede ser menor, pero probablemente igual estemos lejos de cero.

Primero, la sepa Delta de COVID-19. Se estima que es más infecciosa y letal que las anteriores. Mas bien, la mayoría de las vacunas te protegen, pero sólo entre 70 y 90 por ciento, o quizás menos. El problema es que es más infeccioso lo que signifique que una persona infectada va a infectar más otras personas que en el caso de otras sepas. En Holanda en este momento han visto que más del 90 por ciento de los casos son Delta, y con 60 por ciento vacunados completos y el 10 por ciento parcial, hemos casi vencido a la pandemia. Sin embargo, todavía hay un gran número de casos, pacientes en hospital y 40 muertos por semana. Además, hay todavía algunas restricciones, como trabajar desde casa, 1.5m de distancia y máscaras obligatorias en varios lugares cerrados. Si Holanda tiene todavía problemas de vencer el COVID-19, temo que Bolivia tiene que prepararse para la cuarta ola.

Segundo, yo creo que las olas están relacionadas directamente con el comportamiento de las personas. Cuando el número de casos, pacientes y muertos están bajos, la población empieza a comportarse diferente. Se olvidan de las medidas pensando que todo se ha terminado. Este comportamiento aumenta el número de contactos, y si incluimos las características de la sepa Delta, otra vez empieza a crecer el número de casos. El resultado es una cuarta ola.

He mencionado antes que para muchos países es difícil parar la economía para controlar el COVID-19, pero más bien las medidas para una cuarta ola no tienen que ser tan rígidas. Esto si hay un gran número  que está vacunado o inmune por infección. Pero igual se necesita precaución, es necesario tomar medidas mínimas en cuenta, evadir contactos cuando puedas, mantener distancia, usar barbijo etc. Todo esto son acciones que casi no dañan a la economía.

El ultimo, y el más importante, es que el gobierno tiene que hacer todo posible para conseguir vacunas. Ellos tienen que poner presión a los productores, a otros países para acelerar esta campaña de vacunación. Es la responsabilidad de ellos, y además una buena inversión para que la economía se vaya a normalizar lo más rápido posible.

* Experto en modelización dinámica para el COVID-19


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