El uso de las redes sociales

Durante nuestra existencia como seres sentí-pensantes hemos escuchado mencionar que las redes sociales son fascinantes, necesarias e incluso indispensables hoy en día. Otros las consideran innecesarias, peligrosas y hasta infructuosas. Lo cierto es que desde aparecieron en Internet, el mundo entero ha cambiado y los cambios a veces cuesta asimilarlos o convivir con ellos. Lo que sí está claro es que las redes sociales en cualquiera de sus facetas o herramientas tales como: Facebook, Instragram, WhatssApp; creo yo, si no se manejan de manera correcta y con un cierto grado de inteligencia y prudencia pueden llevarnos a formar parte de una masa de sumisos sin criterio ni opinión, simplemente, transmisores de cualquier noticia o comentario sin comprobación ni verificación.

No niego que las redes sociales son un avance colosal para la humanidad, a la cual cualquier individuo en uso de sus facultades puede acceder desde la comodidad de un dispositivo celular o un ordenador. Sin embargo, tantas posibilidades están llevando a nuestra sociedad a que cada individuo se aísle en su madriguera, sentado delante de una pantalla y ajeno a su entorno inmediato. Donde en los últimos años han traído desordenes educativos y hasta riesgos para los usuarios y para quienes los rodean.

Por principio, las nuevas generaciones, no son capaces de despegarse del asiento frente al monitor de su computadora, otros no despegan sus dedos de sus dispositivos celulares, perdiendo no solo tiempo de interacción real con humanos perceptibles, especialmente sus familiares, sino también postergando sus tareas y estudios por preferir seguir obsesivamente la menor tontería que aparezca en alguna de esas redes sociales, llegando en la mayoría de los casos a caer en la compulsión y obsesión, entonces se habla ya de adicción a las redes sociales. Esta enfermedad aumenta enormemente, y miles de personas pierden no solo materias escolares, algunas el año escolar por completo, otros carreras universitarias e incluso el trabajo, cuando desatienden en su totalidad sus deberes por atender cualquier novedad en las redes, aunque sea algo totalmente paradójico.

Por eso es mejor usar las redes sociales, solo para lo que fueron hechas, pero cuidando no caer en la adicción ni descuidar los estudios. Estas pueden ser muy entretenidas, pero al final, existe el mundo real, y para sobrevivir en él se necesitan conocimientos reales, fuera de la realidad virtual. 


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