¿Es usted nomofóbico?
Los niños crecen y cambian de intereses por las distracciones en un abrir y cerrar de ojo. Sin darnos cuenta, un día descubrimos que los ositos de peluches que solía acompañar en esas noches oscuras, fueron reemplazados por la tecnología, en este caso, por el celular.
En la actualidad los adolescentes duermen con su celular bajo la almohada. Cualquiera creería que el celular se ha convertido de una especie de extensión del cuerpo. El celular no solo les mantiene conectados las 24 horas del día, sino que también les permite tomar fotos, videos, escuchar música y obtener toda la información que necesite.
Para muchos jóvenes y adultos, el uso exagerado del celular se ha convertido en una adicción más. Los adolescentes que usan constantemente el celular presentan comportamientos similares a los de una persona adicta, como agresión, depresión, aislamiento, agitación, dificultad para concentrarse y mantener la atención.
El 2019, Marcelo Durán, experto en redes explicó en el Programa "Hora 23" de la Red Bolivisión, el significado de la palabra “nomofobia”, término que hace referencia a la ansiedad o miedo irracional al quedarse sin acceso al celular.
El uso del celular nos permite momentos de satisfacción personal, al alcancé de la mano, evadiendo la realidad, perdiendo muchas veces la noción del tiempo y lugar, se obtienen momentos distractores, no pensar y olvidar las situaciones de la vida diaria.
Nuestra sociedad se ve apaciguada por este objeto que aparenta poder llenar todo tipo de espacio vacío. Este descontrol del dominio del celular, hace que la persona se quede sin capacidad de reacción, deseando cada vez más y más estás sensaciones placenteras.
El tiempo que pasamos en el celular es significativo, puede haber casos de personas con conductas compulsivas, donde no pueden parar de revisar su celular, transcurriendo muchas horas conectados al dispositivo. Probablemente, si el celular solo sirviera para hacer llamadas, nadie estaría adicto, lo que cautiva son las aplicaciones que tiene, sobre todo, redes sociales, videos y música.
Es muy difícil concebir la idea de la vida sin tecnología, es imposible dar vuelta para atrás, el desarrollo tecnológico no tiene frenos. Es un desafío para cada generación el adaptarse a los avances tecnológicos de la época, sin generar una adicción al uso excesivo del celular.
