Lo estructural y lo coyuntural

pero de ninguna manera la solucionan. Al contrario, la agravan.Hemos oído hablar de tales soluciones estructurales para ese y para otros problemas, pero eso no significa que conozcamos realmente en qué consisten, ni que tengamos actitudes e inclusive lenguaje coherente con lo que eso...

pero de ninguna manera la solucionan. Al contrario, la agravan.Hemos oído hablar de tales soluciones estructurales para ese y para otros problemas, pero eso no significa que conozcamos realmente en qué consisten, ni que tengamos actitudes e inclusive lenguaje coherente con lo que eso significa.Estructura, por definición, es la disposición y orden de las partes dentro de un todo. También se entiende como un sistema de conceptos coherentes enlazados, cuyo objetivo es precisar la esencia del objeto de estudio. Tanto la realidad como el lenguaje tienen estructura. Uno de los objetivos de la semántica y de la ciencia consiste en que la estructura del lenguaje refleje fielmente la estructura de la realidad.Por contraposición, coyuntura y coyuntural es lo opuesto a estructura y estructural. Se dice de lo que no es permanente, sino contingente y cambiante, aunque pueda ser decisivo en el periodo más o menos largo en que se presenta.Pero hace falta el significado “político” de estructura y algunas corrientes (como el marxismo) le dan importancia privilegiada. Para el marxismo la estructura es el conjunto de relaciones de producción tanto técnicas como sociales equivalente a la economía y la sociedad. Mientras que la superestructura (equivalente a la política y la ideología) viene determinada por ella. Para el marxismo, por tanto, la estructura es la parte decisiva de la realidad social.Y vamos a lo nuestro: La carencia progresiva de agua en Tarija viene determinada por causas superestructurales, es decir por política y por ideología, que han privilegiado el lucro y el usufructo “privados” sobre las necesidades “públicas”.Los llamados agronegocios, que desplazaron la cultura agrícola campesina tienen mucho que ver con esto. Ellos son la causa y el efecto se siente en la deforestación, que provoca desertización inminente por acción de erosiones hídricas, eólicas o de cualquier índole.Y también en las tierras ocupadas con fines urbanos ha primado siempre la especulación comercial en vez de un ordenamiento territorial socialmente justo y razonable.En la información periodística relacionada con este recurrente problema: el estiaje, verano y sequía, se mencionan muchos efectos, pero no se buscan las causas, que son las que se tienen que modificar si se habla de soluciones estructurales.Por eso es importante “el cambio” que aparece mencionado en discursos políticos de toda clase, sin acciones correspondientes que muestren que es una realidad.Concluyamos, entonces, que las soluciones estructurales son lo único que podría remediar ese problema de la sequía y debería ser oficio de los políticos plantearlas y ejecutarlas. Así debería ser, pero en la realidad los políticos viven enfrascados en sus propias coyunturas.

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