Preocupantes contradicciones

en el que de igual forma el primer mandatario se retractaba del Decreto Supremo 0748, que determinaba un alza en los precios de los carburantes de casi un 100 %. Los sentimientos que provocaba ese recuerdo en mi, eran frustración, desanimo y una profunda preocupación por el futuro de nuestro país.Pareciera ser que las decisiones que se van tomando en el seno del gobierno del Estado Plurinacional son cada vez menos analizadas y repensadas, y peor aún no siguen una línea política o económica en pro de los intereses del país, sino que son producto de intereses personales y/o coyunturales que buscan favorecer a grupos minoritarios específicos de la sociedad. Sino ¿de qué forma podemos entender tamañas contradicciones?.Cuando en abril pasado, en reunión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), con bombos y platillos, el presidente del Estado Plurinacional planteaba como prioridad Mundial la defensa del medio ambiente, pidiendo la aprobación de los derechos de la “Madre Tierra”, convirtiendo este tema en motivo de protagonismo político internacional.La medida tomada por el gobierno del 3 de diciembre de 2008 de no dejar importar autos con antigüedad mayor a cinco años, parecía justificada, aunque extremadamente dura para las personas que tenían sus vehículos en tránsito en espera de poderlos importar o legalizar; a pesar de las huelgas de hambre, bloqueos, llantos y demás recursos, nada logró conmover y menos convencer a un gobierno que parecía firme en la toma de sus decisiones y su línea política de defensa del medio ambiente y la “Pachamama”.Pero empiezan las contradicciones y no todo lo que brilla es oro, al parecer la “Pachamama” no era tan importante y podíamos olvidarnos eventualmente de los tan pregonados y promocionados derechos de la “Madre Tierra”, sorpresivamente en días pasados, mediante Decreto Supremo No. 0890, no solo se permite la importación de toda clase de vehículos, sino que ya no importa ni si quiera su año de fabricación, dando carta abierta para todos. De acuerdo a las estimaciones actuales, aproximadamente cien mil vehículos estarán en proceso de legalización y libre tránsito en el territorio nacional, de pronto la contaminación y la defensa del medio ambiente pasaron a carecer de cualquier tipo de valor.Pero este no es el único caso en que el gobierno ha evidenciado serias contradicciones, en fecha 28 de diciembre de la pasada gestión, mediante Decreto Supremo No. 0748 se determina el alza del precio de los carburantes de casi un 100%, medida que fue justificaba en virtud de los más de mil millones de dólares que el Estado gastó por el subsidio a estos carburantes y este gasto hacia “desangrar” lentamente al Estado. Sin embargo, el pueblo puso en evidencia la fragilidad del actual gobierno, el mismo que al ver venir un inminente conflicto de proporciones incalculables, prefirió, retractarse de esta funesta decisión y así mismo, mediante Decreto Supremo No. 0890, se prohíbe la circulación de movilidades de servicio público con antigüedad mayor a 12 años, usando el mismo argumento de protección de medio ambiente. Pero en esta ocasión, el llamado a torcer el brazo del gobierno fue el cuasi intocable gremio del transporte público que de ninguna forma iba a aceptar el despojo de sus herramientas de trabajo, y en vista de que nuestros actuales mandatarios prefieren no lidiar con ciertos sectores sociales estratégicos, una vez más tuvieron que retroceder y abrogar otra de sus supuestamente bien justificadas medidas.Todos estos preocupantes acontecimientos hacen que una serie de cuestionamientos sin respuestas coherentes por parte de los llamados a responderlas afloren en el conjunto de la sociedad.¿Los aproximadamente 100.000 recientemente importados vehículos; que pronto estarán circulando en el país no producirán más contaminación de la que ahora se enfrenta?¿Tendrá el gobierno una verdadera política de defensa del medio ambiente y de derechos de la “Madre Tierra”?.¿No se incrementará de forma alarmante el gasto del Estado en el pago de la subvención por el consumo de gasolina?¿Bajo qué  lineamientos económicos se dictan medidas tan contradictorias?¿Las medidas que el gobierno aprueba son consistentes con alguna política de Estado de largo plazo?Y si es así, ¿Por qué las abroga después de decretarlas?¿O es que depende del tamaño del conflicto que le ocasionan dichas medidas para que se las abrogue o no?