Arce y su gabinete se trasladan a Santa Cruz para afrontar los incendios forestales y ordena militarizar zonas afectadas
El mandatario además anunció el arribo de un avión cisterna y el desplazamiento de “cajas de agua”, un mecanismo para frenar el avance de las llamas.
El presidente Luis Arce anunció este miércoles que se trasladará con su gabinete de ministros al departamento de Santa Cruz para enfrentar la emergencia generada por los incendios forestales.
“Estaremos presentes en los propios lugares, donde se necesita, para ir monitoreando y poder dirigir estos trabajos en nuestro suelo boliviano”, anunció el mandatario durante la firma de un contrato vinculado con la explotación de litio.
El presidente Arce indicó que debido a este panorama se vio obligado a suspender su agenda en el departamento de Cochabamba, que está de aniversario, para atender la emergencia.
Asimismo, Arce dijo que instruyó la militarización de los accesos a las comunidades afectadas para garantizar, por ejemplo, la evacuación de las familias damnificadas.
“A efectos de mayor seguridad, hemos instruido a nuestro ministro de Defensa (Edmundo Novillo) para poder militarizar los caminos, los accesos de las comunidades que están sufriendo los incendios a objeto de garantizarnos, es más, si es necesaria la evacuación de hermanas y hermanos que estén sufriendo incendios, se puede realizar de mejor manera”, detalló.
El mandatario además anunció el arribo de un avión cisterna y el desplazamiento de “cajas de agua”, un mecanismo para frenar el avance de las llamas.
”Anunciar que vamos a probar en nuestro país una nueva tecnología para combatir los incendios, hemos visto que alguno de nuestros países vecinos lo está aplicando que consiste en ‘cajas guardian’ para la extinción de incendios forestales”, indicó.
Explicó que son “cajas que contienen agua que tiene una retardación en su efecto” y que “puede cargar hasta 1.000 litros de agua”.
“Está llegando mañana (jueves) 150 cajas que vamos a poner en operación desde mañana en Santa Cruz”, sostuvo.
Según el informe del Gobierno, unos 4 millones de hectáreas fueron consumidas por las llamas.