Senador del MAS: La pobreza no se mide por falta de dinero, la pobreza está en la mente
A principios de febrero, el Banco Central de Bolivia (BCB) reportó nuevamente una disminución en las Reservas Internacionales Netas y poco después comenzó la escasez de dólares en el mercado interno



El senador del Movimiento Al Socialismo (MAS) Félix Ajpi sostuvo esta jornada que la pobreza no se mide por la falta de dinero, sino que “la pobreza en Bolivia está en la mente” y es psicológica.
“Yo no pienso que la pobreza se mida por falta de dinero, la pobreza en Bolivia está en la mente. Porque si nosotros nos creemos que somos pobres, siempre vamos a ser pobres. Tenemos que tener una iniciativa de siempre trabajar y el pueblo boliviano tiene eso”, dijo el senador del MAS en respuesta al expresidente Evo Morales.
El fin de semana, Morales dijo en el congreso del MAS, en presencia del primer mandatario, que la situación económica en Bolivia no está bien y sugirió que una comisión del partido pueda ayudar al Gobierno a resolver los problemas.
“La comisión económica puede ayudar, voy a proponer a nuestro hermano presidente, a nuestro gobierno, cómo poder salvar Bolivia. Sabe, hermano Lucho, no estamos tan bien económicamente. Vamos a sugerir nuevas políticas sociales para la gente humilde, para la gente pobre”, sostuvo el líder nacional del MAS.
Ajpi criticó las aseveraciones de Morales y dijo que el exmandatario se alinea a un discurso de la “derecha” y no debería de destacar eso, sino debería alentar al desarrollo y al emprendimiento.
“(…) El que tiene menos recursos no significa que sea un pobre, pero cuando tenemos pobreza mental es que vamos a tener esa idea de que cuando falta dinero es que estamos pobres”, reafirmó.
A principios de febrero, el Banco Central de Bolivia (BCB) reportó nuevamente una disminución en las Reservas Internacionales Netas. Poco después, se registró una escasez de dólares en las entidades financieras de todo el país. Sumado a eso, la semana pasada, la calificadora internacional Fitch Ratings posicionó a Bolivia de una calificación “B” estable a “B-” inestable.