Montes versus Torres: La batalla demorada
Los dos referentes de la política tarijeña que se presentaron en alianza empiezan a presentar diferencias
El gobernador Óscar Montes y el alcalde Johnny Torres son dos viejos todoterrenos de la política departamental y conforman junto al exgobernador Mario Cossío, el asambleísta Mauricio Lea Plaza y los chaqueños Rubén Vaca, Carlos Bru y Wilman Cardozo una especie de santísima Trinidad comunitaria, omnipresentes en casi todas las escaramuzas desde hace 30 años.
En la última correría, Johnny Torres los madrugó a todos proclamándose candidato a alcalde cuando aún no se cerraba la campaña presidencial de 2019. Pasó lo que pasó y la elección no llegó hasta marzo de 2021, pero ya nadie lo movió de aquello.
El cargo apetecía también en Camino Al Cambio con Reina Vaca y el mismo Lea Plaza, y también en UNIR, ya que aunque Montes había declarado con anterioridad que su camino natural después de ser quince años alcalde lo llevaba a disputar la Gobernación, el enfrentamiento con su sucesor Rodrigo Paz y las malas previsiones económicas departamentales podían haberlo hecho reconsiderar la posición.
En la política de hechos consumados, todo se acabó acomodando y Montes aceptó la candidatura a la Gobernación conformando además una alianza, Unidos, donde se integró también Camino al Cambio con Mario Cossío asumiendo el papel de notario. La alianza, como es costumbre, duró hasta el mismo día de la elección.
Montes y Torres se conocen bien aún sin haber sido nunca íntimos. Torres se convirtió en el último defensor del MNR y Montes aprovechó los rescoldos del mirismo en su reconversión para atrincherarse en la Alcaldía soltando pasivos. El enemigo común, es decir, el MAS, es el que más horas de análisis les ha hecho compartir, aunque en estas, también ambos han cargado en momentos con el sambenito de la “funcionalidad”.
Recelos
No es secreto para nadie que la Gobernación está en la ruina y que la alcaldía, por muchos problemas que pueda acarrear, sigue teniendo numerosos frentes que administrar. Cuentan adentro que Montes se aburre y que en esas, el equipo de la alcaldía teme que se entretenga jugueteando con lo que fue su casa quince años.
Puede haber algo patológico en esa actitud, pero lo cierto es que hace seis meses la alianza de Unidos naufragó en el Concejo Municipal y los de Torres tuvieron que recurrir a chicanas para mantener a César Mentasti como presidente, sumando el apoyo del exmasista y ahora verso suelto Erwin Mancilla o del concejal de Todos, Daniel López frente al de Alberto Valdez, mano derecha de Montes en el entorno municipal y que fue señalado como el artificiero de la rebelión.
Hasta qué punto Torres y su equipo participaron del movimiento interno de la Asamblea Departamental y que dejó sin presidencia a los elegidos de Montes para cobrar venganza está por ver, en su equipo lo niegan vehementemente, pero los caminos del señor, y del MNR, son inescrutables.
Desde entonces, varias pequeñas escaramuzas a cuenta de la gestión se han ido poniendo encima de la mesa, entre otras, han disputado el protagonismo en la Expo, en la solución del asunto de la planta de Tratamiento de Aguas Residuales e incluso en obras subsidiarias al Materno Infantil, pero la última parece que va en serio: La Gobernación amenaza con dejar de cobrar vía Setar el aseo urbano, es decir, los recursos de Emat, lo que generaría un serio problema para el gobierno municipal. Torres se ha apresurado a poner su cara para pedir que no se haga y evitar que el asunto se atasque entre funcionarios de rango medio…
Para unos es otro impasse pasajero para ajustar cuentas – de las económicas de verdad -, para otros un pasito más en el inevitable enfrentamiento que más temprano que tarde ambos tendrán que protagonizar para medirse en las ánforas de 2026: la búsqueda de la hegemonía es intrínseca al ejercicio de la política y no es raro que el uno acabe queriendo mandar también sobre lo del otro, y viceversa. Más si en el escenario hay otros jugadores, como los citados, que también aspiran a crecer.
¿Quién estará en lo correcto? Sin duda, pronto quedará en evidencia lo que sea.