¿Cómo nos lo repartimos?
Lo peor todavía no ha llegado; el presupuesto presentado por el ministro de Economía Luis Arce Catacora y aprobado sin cambios en la Asamblea contempla un barril de petróleo a 45 dólares, un precio que deja maltrechas las magras economías de las gobernaciones y municipios y no tanto el del...



Lo peor todavía no ha llegado; el presupuesto presentado por el ministro de Economía Luis Arce Catacora y aprobado sin cambios en la Asamblea contempla un barril de petróleo a 45 dólares, un precio que deja maltrechas las magras economías de las gobernaciones y municipios y no tanto el del gobierno nacional y que sin embargo, todavía serán sujetos a reducción, ya que los ingresos previstos por Impuesto Directo de los Hidrocarburos y Regalías están sujeto a la cotización internacional del precio del crudo.Noviembre y diciembre han sido meses negros, aún más negros, para el barril de crudo que ha marcado en estos primeros días de enero su cotización más baja. Por los cobros diferidos, los efectos se empezarán a sentir en marzo, aunque todos los expertos coinciden que difícilmente, salvo estallido real de conflicto entre Arabia Saudi e Irán, los precios superen los 40 dólares este 2016. El tema va para largo a medida que Estados Unidos ha logrado hacer rentable su petróleo de shale según el último reporte del Lheman por debajo de los 50 dólares a diferencia del resto de economías dependientes del petróleo y de sus proyectos no convencionales: Venezuela en el Orinoco, Rusia en el mar del Norte, Brasil en el Presal, etc, etc… así que Arabia Saudí no va a cambiar de estrategia en el corto plazo. La teoría de sembrar el gas era de sobra conocida, al igual que las curvas de declinación de los pozos, etc, etc. La práctica no ha sido coincidente. Las economías institucionales se han engrosado de gasto corriente, miles de trabajadores con poca rentabilidad y productividad que por sus propios méritos hoy pueden ser considerados innecesarios y que acabaran en el desempleo o la informalidad dañando a lo que Arce Catacora considera el motor dorado de la economía patria: El consumo interno. Quien no cobra no gasta.Posiblemente es el momento de recortar proyectos y programas que no han aportado nada al conjunto de la sociedad. Ni la papa es más barata ni se han construido industrias agroalimentarias de peso gracias al Prosol. La ciudad está más o menos igual de habitable con o sin PEUP y con o sin Brigadistas Barriales, aunque muchos hayan conseguido hacerse con veredas y caminos particulares financiados con fondos públicos o conseguido un simpático pasanaco con los compañeros del barrio. En cualquier caso, dejar en la calle a miles de mujeres y hombres tendrá un impacto directo en la economía formal, la informal y también en la ilegal total en forma de blanqueo y corrupción. Si antes no se sembró el gas, ahora hay que sembrar la plata que queda y buscar la alianza nacional y supranacional parece el camino correcto. No más canchitas ni tingladitos pero tampoco la discrecionalidad absoluta con la que se ha manejado, y se sigue manejando, el reparto de recursos entre municipios y subgobernaciones. En el horizonte una ley que regule todos estos aspectos con los municipios (no tanto con las subgobernaciones que están camino a la extinción) parece indispensable, sin embargo la política puede volver a cruzarse en el camino de la transparencia. Pronto pasará el referéndum que todo lo tapa.
Cartas desde Miraflores
Querido:Con lo bien que lo pasamos la primera vez que nos encontramos… míranos ahora. Vos allí, silbado junto al García por los tuyos, y yo acá, despreciada entre barrotes por los míos. Aquel día el presidente alzaba tu mano y yo sonreía a tu lado. Quizá fue la primera vez que me viste. Yo llevaba ahí toda la vida. Tú también. Nos habíamos imaginado seguro en situaciones semejantes, pero nunca juntos.Cuando yo estaba, íbamos para arriba. Los nuestros nos querían, nos abrazaban, nos vitoreaban y luego ganábamos elecciones. A veces estaba el Evo.Ahora si está el Evo, a veces ganamos elecciones y entonces nos vitorean, nos dan palmaditas en la espalda y dicen que nos quieren. A veces están los nuestros.Si no está el Evo, silban. Aunque tampoco sé si a los nuestros o los nuestros.No han pasado ni doce meses y se viene un nuevo reto. Esperemos que no sea otro batacazo como el de entonces. A mi aún me duele. Lo de la cancioncita no ayudó. Lo otro tampoco. La corrupción había sido en Tarija, dicen. Y dicen que aquí por eso he venido. Aunque gobernar gobernaban otros. Dicen que ahora que eres funcionario público tenemos más cosas en común y quizá nos volvamos a encontrar pronto. Quizá con el Jorge blabla, el Virginio, el Betito y los demás. Quizá sea divertido. Quizá no.Te mando adjunto un ramo de Julias y Margaritas y muchos saludos.