La coherencia de Samuel y el legado de Leopoldo
Unidad Demócrata y la dupla UNIR – MNR (PDC ya es historia) se han cambiado los roles en el departamento. Si Montes y Torres se subieron al carro de Tuto Quiroga a última hora en oposición a Samuel Doria Medina



(a quien dedicaron siempre palabras gruesas en los discursos de campaña) y fueron acusados de “romper la unidad” en esta ocasión armaron el barco primero y lo lanzaron al mar, dejando en la orilla a los voceros de Unidad Demócrata que aspiraban a tener un cargo relevante al menos en el puesto de mando.
Tuto hizo mucho daño a los sueños de Samuel y no sólo por el 9 por ciento que arañó el Partido Demócrata Cristiano y, teóricamente, restó a UD. Aunque esos votos tampoco le hubieran permitido ganar, ni siquiera acceder a la segunda vuelta, la irrupción de Tuto trastocó todos los planes de la campaña, diseñada para ilusionar, hablar de futuro con alegría, divertir y mostrar otro camino (recuerden, #carajonomepuedomorir, #levantandolasmanos, etc) hasta convertirla en una campaña a cejo fruncido, negándose a debatir ante el temor de perder votos y enfrentándose al peor escándalo (no hay guerra sucia que esconda las amenazas a una mujer que denuncia maltrato). Un 39 por ciento de la población no votó a Evo Morales, un uno por ciento menos de lo que hubiera obligado a la segunda vuelta.Un hipotético triunfo de la oposición en Tarija no será el triunfo de Samuel y sus detractores en las nacionales no se han cansado de ningunear la estructura de Unidad Nacional y al propio candidato, por lo que no sería coherente de ninguna manera correr ahora a los brazos de Óscar Montes y Johnny Torres.El MAS tiene un 40 por ciento de voto duro en Tarija como demuestran los resultados de las últimas nacionales y departamentales. Aún dividiendo el voto opositor hay muchas opciones de llegar a una segunda vuelta, donde los votos aliados y enemigos si van a tener un peso específico (La Ley prevé nombrar vencedor a quien sume más del 40 por ciento sólo si hay diez puntos por encima del segundo).La otra carta es Leopoldo, el cacique de Pando, aliado de Costas y Doria Medina y también, vecino de celda en San Pedro durante muchos años de Felipe Moza. Las reglas de Leopoldo son diferentes, son otros códigos y en Tarija también tiene amigos, y enemigos.