Francia, Alemania y Bruselas: la Unión Europea se ha derechizado



Los partidos tradicionales mantuvieron la mayoría absoluta en el Parlamento Europeo, pero el crecimiento de la ultraderecha ha abierto una crisis interna en los principales países de la Unión Europea: Francia y Alemania.
¿Qué tienes que saber?
La ultraderecha crece, pero no decide en la UE. Los tres principales grupos del Parlamento Europeo —democristianos, socialdemócratas y liberales— podrán reeditar su gran coalición. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, apeló a esta alianza para aislar a los extremistas. Ella pertenece al grupo de los democristianos.
Sin embargo, el ascenso de la ultraderecha ha sido notorio en varios países. Han sido la primera fuerza en Francia, Italia, Austria, Hungría y Bélgica. El caso francés es el más destacado. La Agrupación Nacional de Marine Le Pen sacó más del doble de votos que la lista respaldada por el presidente Emmanuel Macron.
Macron ha adelantado las elecciones legislativas al 30 de junio. Su partidoperdió la mayoría absoluta en la Asamblea en los últimos comicios de 2022. Además, la izquierda ya ha anunciado un nuevo frente común para enfrentarse a los bloques de Macron y Le Pen. Por su parte, el líder de los conservadores ha defendido aliarse con la ultraderecha.
El otro damnificado por el auge de la ultraderecha ha sido el Gobierno alemán. Los ultraderechistas se han afianzado como segundo partido, superando a las tres formaciones de la coalición gubernamental —socialdemócratas, verdes y liberales—. Las elecciones regionales en otoño podrían precipitar un adelanto electoral a nivel nacional.
La disolución anticipada de la Asamblea Nacional francesa no significa que Macron vaya a dejar su cargo. En Francia, el presidente se elige en unos comicios diferentes a los del Parlamento. Descubre cómo funcionan las elecciones en Francia con esta infografía:
¿Por qué es importante?
El crecimiento de la ultraderecha en el Parlamento Europeo refleja la derechización de Europa. Las fuerzas más nacionalistas y euroescépticas están ganando peso como consecuencia de declive económico de las clases medias y bajas y del auge del tema migratorio.
La convocatoria de elecciones legislativas en Francia es un órdago de Macron. El mandatario galo busca movilizar al electorado para contrarrestar la tendencia creciente de Le Pen. Sin embargo, una victoria de la Agrupación Nacional podría provocar que haya un Gobierno de cohabitación entre Macron y un primer ministro de ultraderecha.
El ascenso en Francia y Alemania puede tener graves consecuencias para la UE. Ambos países son las principales potencias de la Unión. Si la ultraderecha entra o condiciona sus Gobiernos, podrían paralizar cualquier avance en la integración europea.
Pero ese ascenso también tiene límites. Los resultados electorales impiden a los dos grupos ultraderechistas del Parlamento Europeo condicionar los nombramientos de los principales cargos en la UE. Además, sus discrepancias dificultan que se unan en uno solo.
¿Qué cabe esperar?
La UE seguirá gobernada por la coalición tradicional. Lo más probable es queVon der Leyen repita como presidenta de la Comisión. La presidencia del Consejo Europeo recaerá en un socialdemócrata, que seguramente será el ex primer ministro portugués António Costa.
Existen serias opciones de que haya un Gobierno de cohabitación en Francia. Con el acercamiento de la derecha tradicional a Le Pen, es probable que la ultraderecha obligue a Macron a tener que nombrar un primer ministro de su línea política.
La influencia de la ultraderecha dañará el eje franco-alemán. Con ello, el liderazgo de Francia en la UE se verá debilitado. El proyecto europeo caminará hacia un enfoque más nacionalista y menos integrador, liquidando iniciativas como el Pacto Verde y dando más peso a las políticas antiinmigratorias.