Bolivia y el retorno a la democracia en 2024

La voluntad popular a través de los representantes del pueblo se ha expresado y el gobierno lo debe asumir: no tiene sentido llevar el conflicto a las calles

Bolivia descarriló de la senda democrática el 2 de enero de 2024, cuando los Magistrados de los más altos Tribunales del Estado, atendiendo a sus propias apetencias, se consultaron y se respondieron sobre qué hacer ante la negligente conducta de un poder legislativo incapaz de viabilizar un proceso electoral en un año. Esos magistrados que se preguntaron y se respondieron determinaron que claro, ellos mismos se quedarían en sus cargos para no crear un “vacío de poder” al que ellos habían contribuido notoriamente boicoteando el proceso atendiendo todos los amparos y suspendiendo una y otra vez los procedimientos.

Cualquiera puede aducir intereses personales o económicos en estas conductas, pues no se puede olvidar que son los mismos magistrados que digirieron la sentencia del “derecho humano” de Evo a su repostulación que pergeñaron sus antecesores para burlar el referéndum del 21F y después, avalaron la presidencia de Jeanine Áñez para después desdecirse cuando el MAS recuperó el control, sin embargo es evidente que hay un interés del ejecutivo en mantenerlos y ayer, por fin, fue el presidente del Senado Andrónico Rodríguez quien lo verbalizó sin eufemismos.

Es una buena noticia que una buena parte del oficialismo disidente y la oposición se hayan puesto de acuerdo para intentar retornar a la senda democrática

El asunto estaba telegrafiado, pero igual se ejecutó. El presidente Luis Arce viajó a Rusia, el vicepresidente David Choquehuanca asumió como presidente y en uno de esos vacíos de la Ley donde se encontraron cientos de argumentos a favor y en contra, el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, evista de pura cepa, convocó a la sesión clave que inconstitucionalmente se llevaba meses postergando.

Andrónico tomó el toro por las astas y tras vencer los burdos intentos de boicot de la sesión, incluyendo un ridículo fumigado y un corte de suministros, instaló la sesión, modificó el orden del día y aprobó las leyes que liquidan la prórroga de los Magistrados – única forma de que prospere la elección judicial – y de paso aprobó varios créditos internacionales bloqueados como se había comprometido y el indulto y amnistía para algunos presos.

Al costado ha quedado arrinconado el presidente nato de la Asamblea, David Choquehuanca, cuestionado desde varios frentes, y también el ministro de Justicia Iván Lima, promotor de la estrategia fallida.

Es una buena noticia que una buena parte del oficialismo disidente y la oposición se hayan puesto de acuerdo para intentar retornar a la senda democrática, pero nada de esto será fácil. O funciona la política de los susurros en estas horas cruciales, o la Policía de Eduardo del Castillo tendría que entrar en escena para desalojar a los jueces y reponer el orden constitucional después de que la norma se promulgue en sus plazos, que tampoco será fácil- Con todo, la prioridad hoy, por encima de cualquier otra consideración, es tener una elección judicial abierta y plural, pues es la única garantía de poder recuperar la República.

Hoy no importa demasiado si esto se ha hecho con el visto bueno de Luis Arce o si todo tiene que ver con el ajuste de cuentas de cara a un Congreso de Unidad, lo importante es que la voluntad popular se exprese a través de sus parlamentarios elegidos. No tiene sentido llevar este pulso a las calles cuando las fuerzas están tan contrastadas. Será un error fatal del presidente Arce intentar hacerlo.


Más del autor
Tema del día
Tema del día
La filosofía del bien vivir
La filosofía del bien vivir