Ante Always Ready
Gualberto Villarroel suma un punto de oro en El Alto
El aluvión que parecía lanzar Always Ready sobre Gualberto Villarroel quedó en un susto, porque el elenco millonario fue ineficiente para pasar adelante con una mayor diferencia en el marcador



Gualberto Villarroel San José sumó un empate valioso (1-1) en su encuentro contra Always Ready en El Alto, donde el elenco orureño soportó con gallardía la adversidad de jugar con un hombre menos desde el minuto nueve y con esta limitación propuso fútbol hasta quedarse con este resultado.
El aluvión que parecía lanzar Always Ready sobre Gualberto Villarroel quedó en un susto, porque el elenco millonario fue ineficiente para pasar adelante con una mayor diferencia en el marcador, desperdiciando la ventaja de tener un hombre más por 80 minutos.
El primer gol llegó a los tres minutos del inicio con una definición de Wesley Da Silva, empujando el balón delante del pórtico, tras un primer intento de José Martínes, quien bajó un centro largo, a espaldas de los defensores en un descuido que costó caro.
El cotejo parecía abrirse de la forma que quería Always Ready cuando el defensor central Wallace Gomes fue expulsado por una dura entrada, jugada que fue revisada desde la sala VOR. Era el peor escenario sobre el cual podía pararse Gualberto Villarroel.
Sin embargo, el plantel orureño mostró personalidad, mantuvo la calma y llegó a emparejar las acciones con el gol de Saúl Torres, a los 15 minutos, con un disparo potente y que por la fuerza confundió al arquero Alaín Baroja. Previo al derechazo, Moisés Paniagua perdió el balón en salida, en un error imperdonable.
La visita se dio cuenta que el rival era vulnerable. Minutos después una habilitación al vacío dejó a Javier Sanguinetti con perfil para definir de zurda delante del arco, enviando la pelota por encima del travesaño.
Contrario a lo que se esperaba, Gualberto Villarroel mantuvo bajo resguardo la pelota, apelando a los pases cortos y precisos. Esta forma de juego hizo entrar en pánico a los millonarios, que estaba desesperados por recuperar el control y cuando tenía la pelota de su lado falló la ofensiva. Tampoco fue una tarde para recurrir a los disparos de larga distancia.