Preocupación en Tarija por impacto ambiental de vehículos antiguos
En Tarija hay un vehículo por cada cuatro personas
El INE señala que el parque automotor departamental es de 137.360 vehículos, pero la mayoría son antiguos. Piden modificar la regulación impositiva para favorecer la renovación y reducir el impacto ambiental
El número de vehículos en el departamento de Tarija no para de crecer. En la actualidad, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), Tarija tiene el cuarto parque automotor más grande del país, con un registro de 137.360 vehículos, lo que supone uno por cada cuatro personas. El 60% de ellos se concentra en la capital lo que hace que la densidad sea aún mayor.
La preocupación por la contaminación ambiental generada por este volumen de parque automotor en la ciudad de Tarija ha llevado a los vecinos a demandar políticas más estrictas por parte del Gobierno Municipal para regular la circulación de vehículos antiguos, especialmente aquellos que forman parte del servicio de transporte público y que ya no cumplen con las condiciones adecuadas.
Aunque no existen cifras oficiales que detallen la cantidad de motorizados antiguos, desde la Federación Departamental de Juntas Vecinales (Fedjuve), señalan que son “varios” los vehículos antiguos que continúan operando en las calles de Tarija, contribuyendo significativamente a la contaminación atmosférica.
El vicepresidente de la Fedjuve, Cristian Ventura, ha expresado su preocupación por la falta de regulación y control sobre estos motorizados, que emiten niveles más altos de contaminantes en comparación con vehículos más modernos.
Parque Tarija tiene el cuarto parque automotor más grande del país
A esto, cuestionó que el sector del transporte público pretenda incrementar las tarifas del pasaje, cuando los motorizados no cumplen las condiciones para prestar el servicio. Ventura manifestó que los vehículos que prestan este servicio, mínimamente deberían ser del modelo 2010 en adelante y ser el Municipio el encargado de controlar esta situación, para que a partir de ahí recién analizar la posibilidad de subir costos del transporte.
Desde la Federación del Autotransporte 15 de Abril, su ejecutivo, Gabriel Pérez, con anterioridad había reconocido la existencia de vehículos antiguos en este sector, pero mencionó que han instado a sus afiliados a considerar el cambio de sus herramientas de trabajo.
Sin embargo, Pérez había advertido la falta de incentivos para quienes adquieren vehículos cero kilómetros es una barrera significativa, argumentó que los impuestos asociados a los vehículos nuevos son un 80% más altos que los aplicados a los vehículos antiguos, lo que desincentiva la renovación de la flota.
Otros de los factores que han sido observados por parte del sector del transporte, es el mal estado de las calles en la capital chapaca. Aquellos que optan por adquirir nuevos vehículos para el transporte público se ven obligados a circular incluso por calles de tierra llenas de baches, o como en la actualidad, cubiertas de barro, lo que deteriora rápidamente sus motorizados.
El País intentó contactar a Boris Fernández, para conocer la influencia del parque automotor en la contaminación ambiental que se da en la ciudad, sin embargo, la autoridad no contestó su teléfono.
Sindican responsabilidad
Desde el Concejo Municipal de Tarija, reconocen la necesidad de generar un cambio en el parque automotor para reducir la contaminación ambiental. A pesar de la ausencia de proyectos de ley específicos en este sentido, señalan que es imperativo abordar la problemática y estudiar posibles soluciones, las cuales quedan bajo responsabilidad del Ejecutivo Municipal.
La concejal municipal, Marcela Guerrero, señaló que en materia de movilidad urbana existen varios aspectos por trabajar, uno de ellos es la descongestión vehicular en el centro de la ciudad, a esto se suma, el hecho de establecer nuevas calles y avenidas que permitan una mejor transitabilidad.
Guerrero explicó que en este contexto, también se ha trabajado una normativa para el cambio de radicatoria de los vehículos, ya que han podido advertir que la mayoría de los motorizados pagan sus impuestos en otros municipios.
“También nos ha llegado desde auditoría interna, cierta recomendación por la calidad del aire en Tarija, que se tienen que hacer los controles respectivos, ya que hay vehículos que están emitiendo una serie de gases contaminantes y que sin duda debe haber una renovación en el parque automotor. Insta a que desde el Gobierno Municipal se pueda fijar una política medioambiental y de salubridad para contrarrestar la contaminación”, expuso.
En este contexto, Guerrero instó a la ciudadanía a considerar la transición hacia vehículos eléctricos como una medida para disminuir las emisiones de carbono. Además, hizo hincapié en la importancia de adoptar prácticas más sostenibles en el transporte público y de brindar incentivos que impulsen la renovación del parque automotor hacia opciones más amigables con el medio ambiente.
La demanda de carburantes creció 1.200%
Desde la gestión 2005 a la fecha, el parque automotor creció 364%, es decir, el registro pasó de 536.578 unidades a 2.493.753 vehículos. Sin embargo, la demanda de combustibles incrementó en 1.200%. Para el asambleísta departamental, Luis Lema, esto confirma el destino ilegal de carburantes en el país, beneficiando al narcotráfico, contrabando, minería aurífera y autos chutos.
Autoridades, como el director distrital de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, Franz Rodríguez, y el gerente distrital de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), han evitado referirse sobre el tema. Lo propio sucedió con parlamentarios tarijeños afines a la línea del Gobierno nacional.
Las observaciones planteadas al crecimiento del parque automotor y la desproporción con la demanda en la importación de carburantes, han sido planteadas por el asambleísta Lema en un análisis realizado en base información del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Lema detalló que en 2005 la importación de combustibles era por 239,5 millones de dólares, mientras que en la gestión 2022, la importación alcanzó los $us 3.144,8 millones, 12 veces más.
En esa misma línea, Lema refiere que el parque automotor solamente ha crecido tres veces más entre el 2005 al 2022.
“Vemos que no hay una relación, que hay un desfase muy grande entre la importación y el crecimiento del parque automotor. ¿Entonces dónde se va el consumo? Por supuesto que se está yendo a la minería, narcotráfico, contrabando y los autos chutos”, afirmó.