Crónica política de la jornada
De la “rehabilitación” de Nina al pseudo-audio de “Arce SA”
El expresidente Morales mostró un audio en el que el hijo del presidente Arce se atribuye potestad para intermediar en negocios como el litio, aunque no hace referencias a ninguna ilegalidad
Esta no ha sido solo una semana de transición entre un Congreso fallido y un más que probable cabildo “fake”, sino la semana en la que evistas y arcistas han retozado hasta el límite por el fango de la política bajo la atenta mirada de la no menos enfangada Comunidad Ciudadana, que ha expulsado a 8 de 39 diputados, casi el 25%, por sus más que dudosos cameos, precisamente, con el Movimiento Al Socialismo.
El primero en abrir fuego fue Evo Morales y su comparecencia pública para mostrar unos audios en los que el hijo de Luis Arce se atribuye capacidades y delegaciones para intermediar en el tema del proyecto del litio. Esto ya lo disparó Morales el año pasado y fue la gota que colmó el vaso de la paciencia del presidente Luis Arce, que rompió definitivamente el hio tutorial que hasta entonces había permitido incluso con las duras arremetidas contra ministros de su confianza, como el de Gobierno Eduardo del Castillo. La diferencia esta vez es que sí mostró un audio con la voz de Marcelo Arce y un diálogo que, aún editado, no acaba de evidenciar corrupción explícita, pero sí la participación de un familiar, ajeno al cuerpo de funcionarios públicos, mediando en asuntos de alto interés.
De García Linera a Pablo Cossío pasando por los Paz, los Zamora o los Banzer Donoso, lo de utilizar a la familia en la primera línea de la política es un clásico, pero no por ello es menos gravoso, más en estos tiempos de hiperdigitalización. Marcelo Arce no dice ninguna palabra mal, pero es evidente que atribuirse la voz del presidente para hacer gestiones y que luego él remate apesta por todos lados.
La acusación puso la cereza en la torta de una semana que ya se había complicado desde el mismo momento en el que a alguien le pareció buena idea colocar al jefe de los interculturales, Henry Nina, al frente de Emagua, la entidad ejecutora de proyectos de agua y una de las que mueve más plata en estos tiempos de sequía. Nina no es un cualquiera, hace apenas un mes salió por la puerta de atrás de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) después de meses de denuncias de corrupción y con la sospecha muy pegada. Ni siquiera los más fanáticos del arcismo y su teoría de la “renovación” han podido poner buena cara a esta designación.
Las grandes consultoras todavía no están trabajando en el país a fondo y cada bando se conforma con sus sondeos rutilantes, casi siempre construidos a favor del cliente. Ahora, en las redes empieza a aparecer ese meme del agotamiento para definir a Evo Morales y su permanente perorata contra el gobierno actual al que ya ha nombrado como derechista, traidor, y otras tantas lindezas. Mientras, Arce sigue sorteando la imagen de la marioneta, pero cayendo en la caricatura del despotismo ilustrado. ¿Hasta cuándo se alargará esta situación? No se prevé en cualquier caso acuerdo hasta bien entrado el 2025 siempre y cuando haya primarias que definan la suerte de cada uno. Faltan todavía muchos retozones.
Los rivales
Comunidad Ciudadana, mientras tanto, sigue en su harakiri particular, con diputados expulsados luego de coincidir en sus votaciones con el MAS de forma premeditada, algo que es recurrente desde hace varias legislaturas sea cual sea la alianza que represente a la oposición; pasó con Podemos, pasó con Convergencia, pasó con Unidad Demócrata y ha pasado con Comunidad Ciudadana, lo triste sin embargo es que esta vez el transfugio respondía exclusivamente a la voluntad de subirse el sueldo de los propios diputados y gozar de otros beneficios.
Ahora, hay que ver sí esto se cumple, pues ya también en el pasado se expulsó a Edwin Rosas por colarse en la directiva de Diputados con el apoyo del MAS y en contra del criterio de la bancada, pero ahí sigue.
Los equilibrios en cualquier caso seguirán siendo complejos en el Legislativo: CC ha votado con el arcismo, por ejemplo, para arrebatar la presidencia de Diputados al hombre de Evo y colocar a Jerjes Mercado, hombre de Arce, pero también ha votado con el evismo para acelerar la de nuevo entrampada elección judicial o para devolver a comisión la Ley de abusos sexuales.
La crisis de CC se solapa con la que permanentemente asola a Creemos, que no sabe a quien responder en este momento de crisis, con el gobernador en la cárcel y divididos entre benianos y cruceños, aunque no solo eso. NO habrá reforma constitucional inminente, pero no se sabe en qué momento se invocará la necesidad de los dos tercios. Ahí, todos los frentes empiezan a evidenciar costuras débiles.
Montes se queda (casi) solo en la política local
Con el alcalde Johnny Torres de nuevo formalmente “abuenado” con el gobernador de Tarija, Óscar Montes, después de un tiempo de hostilidad, la política departamental está experimentando cierto vacío, pues el Movimiento Al Socialismo (MAS) sigue concentrado en sus pulsos nacionales.
La Asamblea Legislativa Departamental dirigida por Alan Barca no está logrando ejercer un liderazgo alternativo pese a que se separó de Unidos con ese fin y la Asociación de Municipios de Tarija, entidad formalmente controlada por el MAS, tampoco está siendo capaz de crear un relato de oposición.
Entre los nombres individuales, el propio coordinador gubernamental, Walter Ferrufino, ha sido acusado de hacer doble juego con Morales y con Arce, mientras que el último candidato a la gobernación, Álvaro Ruíz, juega en las “grandes ligas” peleando con exministros en su defensa de Arce y se acuerda más bien poco de lo local.