Por empatía hacia las personas con autismo, piden a los tarijeños "abstenerse" del uso de pirotecnia
La Fundación TEAcompaño, que trabaja en favor de las personas con autismo, y el Centro Sombreritus, especializado en Comunicación desarrollo y autismo, en Tarija, piden a población tarijeña "abstenerse" del uso de pirotecnia "como una muestra de empatía y solidaridad" con las familias y personas autistas que viven en la región, debido al impacto negativo que estos producen en la salud mental.
En los últimos años se ha ido incrementando el uso de pirotecnia para diferentes celebraciones, y las fiestas de fin de año no son la excepción, "llegando a un nivel de abuso con un impacto extremo en la salud auditiva y mental de las personas y animales en general, y de las personas con autismo, personas con diferentes afectaciones de salud, ancianos, y otras en situación de vulnerabilidad en especial", cita un pronunciamiento de la organización.
El efecto de los artefactos pirotécnicos sobre los niños es diverso, pero fundamentalmente se refiere al efecto sonoro y al directo a través del fuego y la onda expansiva que generan. De acuerdo a diversos estudios médicos, el uso de pirotecnia afecta enormemente a las personas con autismo.
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"En la ciudad de Tarija hay un alto número de personas con autismo, desde niños pequeños hasta personas adultas, éstas son afectadas por la exposición a la pirotecnia, manifestando el incremento en las estereotipias motoras, las ecolalias se manifiestan con mayor frecuencia, en muchos casos se autolesionan al morderse los dedos o las uñas como un escape a la ansiedad, muestran agitación, mayor tendencia al llanto (en el caso de los niños) y a conductas agresivas verbales y físicas en el caso de adolescentes y adultos, hay alteraciones en el sueño, terrores nocturnos, y la dinámica familiar se ve afectada por la desregulación que presentan, explica la Fundación TEAcompaño.
Que seamos capaces de celebrar de una manera diferente, sin poner en riesgo la salud mental y física de las personas con autismo, recordando que lo que divierte a unos hace daño y lastima a otros.